Capítulo 1.❇

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Y aquí estábamos de nuevo, solos él y yo en casa, mirándonos y deseándonos.
Pero lo había dejado claro; no podía volver a pasar nada entre nosotros porque no era debido. Él olvidó todo lo que me había dicho esa vez y me besó ferozmente.

–Percy, maldita sea. Despierta que llegaremos tarde el primer día por tu culpa– Se quejó Lara.

¿Y adivinen qué? Estaba soñando, no fue real, entre él y yo no volverá a pasar nada.
Ya se darán cuenta de que y de quien hablo. Lara me esperó pacientemente mientras yo arreglé mi cama, coloqué el uniforme sobre la misma y fui tipo Flash a bañarme. Bueno tampoco es que a ella le molestara. Con tal de poder chatear más con Andy por ella estaba bien. Bajamos juntas los escalones, en la cocina ya estaba él y mis padres, no los biológicos, pero si los adoptivos; los Wilson.

–Niñas, primer día de clases y les está agarrando tarde, que va– Replicó Alice, ese era el nombre de mi madre adoptiva.

Lara y yo nos sentamos a tomar nuestros desayunos en silencio, hasta que papá me habló.

–Tenemos que hablar con ustedes, especialmente contigo, Percy– 

Paterson Wilson nunca había sido un hombre hablador, ni mucho menos cariñoso. Supongo que sus vivencias en la adolescencia lo cambiaron. Sin embargo, era un hombre de muchos gestos y siempre nos había dejado en claro que nos amaba, incluso a mí, a pesar de no ser hija biológica.

–Hace unos días un viejo amigo... De los Noswil, me comentó que hay ciertos rumores..– Dijo Paterson intentando encontrar las palabras indicadas para terminar su oración.

–¡Ve al grano!– Gritó Alice. Al ver la expresión de mamá nos dimos cuenta que algo no andaba bien.

–¡Se rumorea que quizá Mat y Marcy siguen vivos!–

Al escuchar esta frase, me levanté en seco. De repente la comida se había vuelto amarga en mi paladar y solamente quería vomitar y salir corriendo.

–Terminé mi desayuno, quiero ir caminando sola hacia el colegio–Dije yéndome sin dejar que me detuvieran o dijesen algo.

Así que en resumen, mis padres esa noche desaparecieron, nunca supimos que pasó, pero lo que sí sé es que  fue en contra de su voluntad. Siempre creí que estaban vivos, mi corazón me lo decía. Ellos insistían que debía aceptar la realidad, incluso estuve años yendo con una psicóloga que lo único que decía era; "¿Y como te sientes con eso?". En esos momentos lo único que quería era que la tierra me tragara. Estaba muy alterada, así que cuando pasé por una confitería y compré unas barras de chocolate, de alguna forma comer chocolate siempre me relajaba.

Retomé mi camino hacia el colegio mientras disfrutaba su dulce sabor deshacerse en mi boca.

–¿Me regalas?–Inquirió él.

Él de alguna forma me ponía nerviosa, pero era tan buena fingiendo que nunca lo notaba.

–Claro, ten–Le dije mientras le entregaba lo que me quedaba de chocolate y sacaba otra barra.

–Astuta Collins, sabías que no te dejaría en paz hasta que me dieras chocolate y preferiste darme este trozo a esa barra–

She Is A Unified.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora