Capítulo 10.

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PDV Mackenzie.

Volvimos al hospital en el coche, entre sonrojos y sonrisas lo miré un par de veces mientras conducía y volví a colocar mi mano sobre la suya sobre la palanca de velocidades. Una vez llegamos a nuestro destino, me dijo:

-No te culpes por lo que pasó, no fué tu culpa, fué su decisión. No dejes que ella te arrastre con la huella que dejó su depresión.- Acercó su cabeza a mi oído y me dijo.- Te amo.

Una vez mis sentidos percibieron su aliento en mi cuello me ericé y me despedí. Camino al hospital no podía parar de sonreír, a pesar de que aquel lugar fuera mi peor pesadilla.

Pasando entre todas esas personas con mi radiante sonrisa, mis pómulos ligeramente enrojecidos y con mis pensamientos en las nubes a causa de sus dulces palabras me hizo volver a pensar en ella, ahí acostada en una camilla de hospital, con tubos conectados a sus venas hizo que mi sonrisa dejara de ser verdadera y tan brillante al dejarme paso con mis amigas.

Apenas entré se abalanzaron sobre mi con sus preguntas de "¿Qué pasó?" o "¿Te dijo algo que valga la pena recordar?" pero la que más me hizo intrigar, molestar y sonrojar fué la de "¿La tiene grande?" La cual fué hecha por Sidney con su típica sonrisa pervertida.

PDV Lily.

Estaba recordando en ese preciso momento cuando Sam me regaló una sonrisa por última vez antes de que sus ojos cambiaran drásticamente por el pánico al caer por la orilla. Recordar cuando le regalé el Stitch y no quería soltarme de lo emocionada que estaba, cuando me abrazó por la espalda y cuando logré librarme de sus dulces abrazos para mostrarle el Stitch, dejando ver aquellos ojos brillar como nunca y sus dientes tan brilantes como perlas sonreír para dar paso a un "Gracias" y el beso más romántico de la vida. Y ahora nada. Ni una sonrisa, ni un abrazo, ni mucho menos un beso, jamás.

Todo finalizó por mi culpa y aunque pueda decidir si quedarme solo puedo escuchar a mis amigas como si estuvieran lejos de mi. Entraron junto a mi cama mientras yo observaba y escuchaba como si no estuviera dentro de mi.

-¿Que pasó?.- Dijo Sidney éxtasiada por lo que iban a contar. ¿Qué pasa en mi ausencia?

-Pues fuimos al parque, luego de que el me comprara un frappé, el comenzó diciéndome lo mucho que me quería, con sus manos temblorosas y calientes, sus fuertes brazos rodeándome la cintura, me pidió que sea su...

NOVIA.

¡¿QUE!?

PDV Mackenzie.

Y en ese preciso momento observé como Lily se reincorporaba de la cama, aún con un tubo atravesándole la nariz y la garganta, así como con cables conectados reaccionó y dijo "-¡En serio!.- Mientras que todas nos quedamos sin habla, aunque yo comenzé a partirme de la risa con lágrimas en los ojos hasta el punto de no saber si lloraba de alegría, de alivio o de sorpresa, aunque creo que una combinación de las tres. Ella comenzó a mover la cabeza de lado a lado y luego se llevo una mano a ella, parpadeo unas veces y luego vi una lágrima salir de sus ojos dando paso a otras más.

Sidney se abalanzó sobre ella y la abrazó, luego hice lo mismo, luego Chloe y nos hechamos a llorar entre las tres aunque yo no sabía si Lily lloraba de alegría o lloraba porque no había muerto, y obviamente fué la segunda opción lo cual quedó confirmado con un "Ni para matarme sirvo, pero para matar si..." Luego comenzó a llorar más fuerte y dijo "Soy una maldita asesina" entre sollozos.

Después de escuchar eso nos separamos y Sidney solo se alejó un poco para dejar paso a una cachetada que resonó en toda la habitación, aunque solo un doctor lo escuchó pues es un hospital privado y estábamos solas en aquel momento.

No Te Enamores De Un Pendejo.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora