Paso A Paso [In A Heartbeat]

Tercer paso

Era hora de la salida, y todos los alumnos salían de clases con una sonrisa en el rostro y sus mochilas en los hombros, felices por el fin de semana que les esperaba. Varios tenían los planes de salir a algún lugar o qué sé yo, pero Sherwin era de los pocos que no tenía ni un plan para esos días. Tal vez quedarse en casa y no hacer nada más que pensar en Jonathan

-Jonathan... -suspiró con una sonrisa el pelirrojo al recordar a su amado

A pesar de parecer neutral ante los acontecimientos del día anterior, le agrada que estuviese un poco más cerca de él, de tener su atención.
Caminó hasta la salida del instituto, como cada alumno, y estaba por virar a la izquierda para poder ir a su casa y hacer lo de cada fin de semana: nada; pero, un chico lo detuvo antes de poder dar otro paso más

-¡hey! ¡Sherwin!

-¿qué sucede, Zack? -preguntó el pelirrojo mientras le dedicaba una sonrisa al capitán del equipo de baseball

Si bien, los eventos de ayer sorprendieron a todo el colegio, la verdad es que en su mayoría trataban del mismo modo al pelirrojo de loco corazón, y eso le alegraba a este

-esta tarde tenemos partido, y esperamos que estes allí. Ya sabes, apoyándonos y en la banda -habló- vendrás ¿verdad?

Sherwin lo pensó muy poco para llegar a una respuesta: NO. Quería ir a su casa y descansar y no hacer nada. Estaba por responder cuando al lado de Zack pasó cierto moreno quien le dijo ciertas palabras al capitán:

-nos vemos en el partido -y después vio al pelirrojo- adiós, Sherwin -se despidió con una sonrisa

Sherwin sintió su corazón -en el fondo de su mochila- latir con fuerza y recordó un detalle: Jonathan está en el equipo de baseball y fue por eso que se había metido a la banda en primer lugar. Tampoco lo pensó mucho y se apresuró a decir:

-sí, te veo en el partido

~●~

Nuevamente se le hizo tarde y ahora iba corriendo nuevamente al intituto, dónde se llevaría acabo el partido. Llevaba puesto su uniforme de la banda muy desalineado mientras su corazón flotaba a su lado, siguiendole el pasó a su dueño.
Finalmente llegó a su destino, al instituto. Aun así sigue corriendo para llegar a la cancha, pero, no se fijó al momento que sus agujetas se desataron hasta cuando cayó de cara contra el suelo. Despegó su cara del piso con pesadez y apoyo todo su peso en sus codos, necesitaba recuperar el aliento

-muy fea ha sido esa caída -escuchó una voz frente a él- ¿estás bien? -al levantar la mirada, vio la mano de su amado frentr a él, proporcionándole la ayuda que necesitaba

-gracias -musitó el pelirrojo mientras aceptaba la mano del contrario para luego levantarse del frío suelo antes de fijarse en su amado de pies a cabeza

Llevaba puesto su uniforme del equipo de baseball que consistía del color blanco con las rayas y demás detalles azules. Sherwin amaba verlo así, lo adoraba. Se controló muy bien para no babear frente al moreno

-pensé que no vendrías -comentó Jonathan- la banda te está esperando -añadió

-no faltaría por nada del mundo -sonrió- si tú juegas -se arrepintió por haberse dejado llevar por su corazón, quien literalmente estaba flotando a su lado, latiendo y delatandole

Jonathan sonrió tiernamente al verlo nervioso y con un notable sonrojo en su rostro que casi cubrían sus pecas

-¡di-igo...! E-eh... yo-o debo-o toca-ar y-y...

-¡oh, es cierto! -interrumpió el moreno- la banda te ha estado esperando

-¡rayos, debo darme prisa! -exclamó antes de salir corriendo a toda velocidad, no sin antes gritarle a su amado- ¡suerte en el partido!

Maldita sea, su corazón no dejaba de latir con fuerza por lo tonto que fue

CONTINUARA