Un Futuro Sin Querer.

"Leyendas"

María ya llevaba días conociendo la "ciudad de los reyes", pero algo le decía que podía más, las tardes de mar ya no le eran suficiente para calmar esas ansias de salir.

Era mediados de febrero y el calor ya era más insoportable, la playa no le parecía el mejor lugar, ya que se encontraban repletas de personas que al igual que ella acudian en son de auxilio.

Por su mente aún seguían la escena del día anterior, y trataba de encontrar alguien con quien pueda calmar ese vacío de soledad. Ella se encontraba en medio de más de diez millones de habitantes y donde tan solamente trataba de encontrar una sola persona, quizá la había pero era difícil de encontrarla.

Ese día fue tanto su aburimiento que decidio navegar en el mundo de las redes sociales donde se encontró con un supuesto "amigo" quien la invitó a conocer el parque de las leyendas.

Al siguiente día, sin importarle las consecuencias decidió ir muy temprano, por suerte no había sido mentira lo encontró en la dirección exácta y luego de ingresar. - que bueno que aún quedan personas-tardó un poco para luego -extraordinarias- terminar de pensar, al mismo tiempo que observaba la majestuosidad de aquel mapa.

No sabía ni dónde se encontraba porque en ese momento lo único que se mantenía vivo en sus pensamientos era ese ayer del cual nunca olvidaría, caminaba con miradas a todo los rincones y fotos y gotas de lluvia artificial empezaron a caer y humedecer el ambiente, cuanta paz existía allí, animales de todos los lugares encerrados aparentemente en su hábitat. flora y fauna, casi completa de todos las regiones.

Todo el día le pareció fugaz y fue como una hora para ella que en ese momento flotaba aún, en su mundo estaba recién por amanecer y acá ya era tarde. No se dió cuenta que la noche había llegado y que en su casa la esperaban con impaciencia...

Tres días después, al despertar una mañana como de costumbre a las once y luego de ir a tomar un baño refrescante y desayunar se  encontró con más aburrimiemto que lo normal y  nuevamente ingresó a redes sociales, y sin darse cuenta ni pensar el lo que seguiría publicó un "te odio".

Mil Disculpas.

Admito que debí explayar más de lo que fue este día, pero la protagonista de esta historia "vida real" así lo a querido.