Un Futuro Sin Querer.

El retorno

Ayer apenas fue la última conversación y el viaje para hoy preparado ya estaba.
María se levantó muy temprano y alistó unas pocas prendas en su mochila, estaba decidida y hasta la mochila parecía estar alegre con la idea de volver.

Apenas clareó el día salió de casa sin despedirse, era tanto el apuro que hasta el celular había dejado y se había dado cuenta recién en el bus -sirve solo para llamadas y nadie me llama, no debo volver por él.

Se sentó adelante, en el asiento que estaba cerca a la ventana de donde podía ver tranquilamente todos los paisajes.

Así se despidió de Lima, el sol apenas empezaba a dar su luz y maría acababa de partir.

Todo el viaje estuvo ansiosa por llegar rápido.
Al detenerse el bus era medio día, hora de almorzar, no bajó a comer si no que sacó un papel para plasmar ahí una figura de su cuarto a donde no pensaba volver jamás.

Eran las 6:00 pm y por fin luego de doce horas de viaje, llegó a su tan ansiado pueblo.

Corrió hacia adelante para avisar al conductor, luego bajó tan rápido como pudo, pero pensando en no olvidarse nada volteó para comprobar.-solamente quedan mis huellas- dijo para sí misma y se río de sí misma.

Al llegar a casa, la encontró igual como la había dejado, parecía que ayer hibiese sido su partida y hoy estaba de vuelta. -tan lento pasa el tiempo- se dijo preocupada y se quedó dormida, abrumada por el cansancio de un largo viaje.

Al levantarse dió un estirón de brazos y dejó salir un bostezo, se miró en el espejo y notó que seguía con la ropa de viaje. Fue a tomar un baño y salió para la calle.

-hoy las mujeres buscan a los hombres, porque estamos en el siglo XXI y hoy todo ha cambiado...menos mi pueblo, sigue así de malo. - dijo en voz baja y entonces se dirigió al parque.

Éste es el penúltimo capítulo, ya llega el fin...