Prólogo

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Entre la avenida cuarenta y ocho y la cincuenta y seis, en los suburbios de Bayside, se encuentra el bloque de departamentos número mil doscientos cuarenta y ocho de ATLANT Corporation, a diferencia de los demás de su tipo, era un edificio de arquitectura contemporánea de clase media baja construido hace bastantes años atrás, incluso antes del desastre en el Distrito L. La construcción no fue responsable de la compañía por la cual adquirió el nombre, en realidad se desconoce y se ignora a la persona o empresa encargada de financiar la edificación de aquella ya lúgubre estructura. ATLANT, quien para entonces solo era una de las muchas empresas independientes de gran capital destinada a la investigación en el área de la medicina, construyó setecientos cincuenta y compró otros setecientos cincuenta bloques (cómo fue el caso del conjunto número mil doscientos cuarenta y ocho) en todo el mundo para, en un principio, dar hogar a sus empleados. Lo único que queda, a día de hoy, de ATLANT en el bloque de departamentos número mil doscientos cuarenta y ocho es el nombre que posee y William D'Orean, un inquilino.

William es un ciudadano diagnosticado con estrés postraumático y una leve esquizofrenia. Fue capaz de encontrar un pequeño estrecho por el cual colarse a la sociedad; es un carguero del puerto ubicado a unos siete kilómetros de la cúpula. Había logrado pasar las pruebas de aptitud y los test psicológicos para participar en las primeras simulaciones invasivas; un nuevo tratamiento experimental para pacientes con trastornos mentales.

Como él fueron doscientos los seleccionados y otros cien elegidos al azar; trescientos en total. La última fracción se trata de criminales y pacientes de hospitales psiquiátricos.

El día de mañana trescientas personas serán expuestas al ambicioso proyecto WHITE MIND.


"Nuestra principal preocupación es usted...[...]"

— ATLANT Co.


W.H.I.T.EDonde viven las historias. Descúbrelo ahora