#2.-Cajas, bromas y recuerdos. (parte 1)

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Los tres meses habían transcurrido lentamente, tan lentamente que pareciera que han pasado dos años. Durante esos tres meses Jungkook y yo nos hicimos mas cercanos, en parte porque dejó de utilizar el celular tan a menudo y porque yo dejé de estudiar cada que nos veíamos en algún lugar.

Al inicio la idea de viajar a Seul no me sorprendía ni un poco, de hecho, me daba igual, siempre y cuando yo pudiera seguir estudiando, pero ahora que me he encariñado con él, ya no quería irme. Tanto me encariñé con Jungkook que una semana antes de irme intenté convencer a mis padres de que sólo fuera mi hermana a Seul, después de todo, siempre tendría amigos que no la dejarían sola, pero mi opinión ya no era valida, ya habían comprado los boletos.
Y ahora, un día antes de irme, me encontraba en mi habitación acomodando lo ultimo de mi equipaje con ayuda de Jungkook.

-Tengo un amigo en Seul -decía mientras guardaba una de mis camisas en la maleta -Tal vez algún día se encuentren en la calle.
-O tal vez no -intentaba cerrar otra de mis maletas -¿Cual de todos tus amigos es? ¿Lo conozco?
-Neh, lo conocí hace una semana, se llama Hoseok, tiene tu edad -se quedó de pie observando como no lograba cerrar mi maleta -¿Quieres qué te ayude?
-Yo puedo solo -lo intenté por ultima vez -Ok si, ayuda me -pedí al fracasar.
-¿Cómo es qué tienes tantas cosas? -se sentó arriba de la maleta mientras yo intentaba cerrarla.
-Ni yo lo sé -jale con fuerza y rompí el cierre -¿Ahora qué?
Jungkook hizo ademán de estar pensando, para luego decir:
-Utiliza algún pegamento realmente fuerte.
-No podre abrirla cuando llegue a Seul.
-Entonces compra otra -me crucé de brazos.
-¿Cual será la razón por la que mis padres me estarán mandando a vivir con mi abuela? -pregunte sarcásticamente.
-Ya entendí Don sarcasmo -tomó su celular, escribió algo y luego me lo mostró, Jungkook había cambiado mi nombre de contacto a "Don sarcasmo". Rodeé los ojos.
-Que original.
-Lo sé, entonces ¿utilizaras el pegamento? -volví a poner los ojos en blanco.
-Iré a ver si mi hermana tiene alguna maleta que me preste.

Después de que mi hermana me dijo que en unos minutos me daría una maleta que tenia por ahí sepultada entre sus cosas, regresé a mi habitación y encontré a Jungkook sentando en el suelo, al lado de la ventana, escuchando la canción de mi caja de música y observando como la bailarina de esa caja daba vueltas, y sé que la caja de musica es algo femenina, pero es porque era un regalo de un ex de mi hermana y cuando estaba apunto de romper la caja después de que su ex la dejara, le pedí que me la diera a mi, no me cuestiono, siempre ha sabido en secreto que me gustan las canciones de las cajas de música.
Jungkook tardó en notar mi presencia y cuando lo hizo se asustó.
-No te asustes -me senté en la cama.
-No me asusté -cerró la caja de musica y la dejó a un lado -¿Qué pasó con lo de tu maleta?
-Dijo que buscaría una maleta entre sus cosas sepultadas -Jungkook asintió y ninguno dijo nada más. Después de mucho, finalmente hay un cómodo silencio entre nosotros dos, aunque su cara sonrojada dice que para él no se siente nada cómodo este momento.
-Y...¿la caja de musica no te la vas a llevar? -preguntó después de largo rato callado.
-No -respondí -No quiero arriesgarme a que se pierda o se rompa -aclaré.
-Ah ¿y no quieres que yo la cuide mientras no estas? -lo veía nervioso, pero no podía creer que fuera sólo por esa caja de musica.
-Kookie ¿Eso es lo qué te tiene tan nervioso? -me levanté de la cama para ir a sentarme en el suelo, al lado de él -Te regalo la caja de musica si quieres, por mi no hay problema.
-No, no es eso -negó con la cabeza -Es solo que...que... -empezaba a preocuparme que estuviera tan nervioso a tal punto de que por su frente caían gotas de sudor frío y no lograba entender que es lo que lo ponía así.
-Tranquilo, kookie -pasé mi brazo derecho por sus hombros, ahora hasta sus orejas se sonrojaron -soy malo para entender tu repentino nerviosismo pero si me dices que sucede te puedo ayudar -y para mi desgracia, no solamente soy malo para entender eso, si no que igual soy malo para ayudar a los demás
-Está bien -dio un muy largo y profundo suspiro -Lo que sucede es que tu me gu-.
-Nam aquí tengo la maleta que me pediste -volteé a ver a mi hermana quien entró interrumpiendo -Perdón ¿interrumpo algo? -Jungkook suspiró.
-No.
-Si -respondí al mismo tiempo que él.
-Tengo que irme, ya es tarde -dijo mientras se levantaba y se dirigía a la puerta.
-Kookie -lo llamé y volteó a verme -Estás olvidando tu caja de musica -dije alzando la caja para que la tomara. Dudó si aceptarla y por un momento creí que la rechazaría, pero al final la tomó.
-Gracias-dijo y se fue.
-¿Qué pasa entre ustedes dos eh? -cuestionó mi hermana una vez escuchamos que la puerta de entrada se cerró.
-No lo sé -me levanté y mire por la ventana a Jungkook cruzando la calle -Lo sabría si tan sólo alguien no hubiera interrumpido -dije con frustración. Ella murmuró algo como respuesta y me dio igual, prefería prestar atención a Jungkook quien, antes de entrar a su casa, se dio la vuelta y al verme me saludó y sin darme cuenta le regrese el saludo junto con una sonrisa mía.

💻

El avión salía hasta las 8:00p.m. Así que pasé toda la mañana asegurándome de que nada se me olvidaba y durante la tarde estuve con Jungkook en la cafetería y ahora ya estaba en el aeropuerto, despidiendo me de mis padres y de Jungkook.
-Extrañaré ir a tu habitación -dijo sonriendo -Es realmente cómoda -aclaró cuando vio mi cara de confusión.
-Pensé que me extrañarías a mí -bromee.
-Claro que no te extrañaré -dijo serio -Porque seguiremos hablando por whatsapp -empezó a reírse, yo suspire y me llevé una mano al corazón.
-Realmente me preocupé -Jungkook siguió riendo y yo igual empecé a reír.
-Perdón por eso -se disculpó con una sonrisa.
-Hijo -habló mi madre acercándose junto a mi padre, después de que ambos terminaran de despedirse de mi hermana -¿Estás seguro de que realmente llevas todo? -en una de sus manos sostenía un pañuelo para limpiar sus ojos llorosos.
-Queda te tranquila -la abracé -He revisado mil veces y sé que sí está todo.
-¿No olvidas tu pijama de dryan? -mi hermana y Jungkook empezaron a reírse, yo me sonrojé.
-No mamá -dejé de abrazarla.
-Envíame un mensaje en cuanto bajen del avión ¿sí? -asentí y ella sonrió mientras seguía limpiándose con el pañuelo.
-Porta te bien -dijo mi padre -Sigue estudiando, no duermas tarde y cuida de tu hermana -igual asentí y estrechamos nuestras manos.
Mi padre no es de mostrarse cariñoso con alguien que no sea mamá.
-El vuelo 47 despegará en diez minutos, favor de subir por la puerta 512*
-Ese es nuestro vuelo -avisó mi hermana. A mamá le salieron más lágrimas -Vamos mamá, no seas tan sentimental.
-Sabes que no puedo evitarlo cariño -dijo mientras secaba sus lágrimas.
-No olvides traerme algún recuerdo de allá -pidió Jungkook con una sonrisa.
-No lo haré -aseguré sonriendo igual.
-Tampoco olvides hablarme -se encogió de hombros y su sonrisa se volvió triste.
-Tampoco lo haré -volví a asegurar y lo abrazo.
-¡Nam! -gritó mi hermana -¡Apresura te o nos dejará el avión!
Jungkook y yo nos separamos.
-Adiós -le dije, él negó.
-Hasta luego -me corrigió.

💻

Durante el vuelo estuve mirando por la ventana, veía las nubes pasar al lado mio mientras por mi mente cruzaban varios recuerdos a la vez, pero hubo uno de ellos que hizo que los demás desaparecieran, era el recuerdo de cómo conocí a Jungkook.

Fue cuando tenia doce años, Jungkook tenia como ocho o nueve, él y su familia se habían mudado frente a mi casa, no le tomé importancia.
-Tienen un hijo -decía mi madre -¿Porqué no vas y te haces amigo de él?
-Tiene como siete -respondí.
-¿Y qué? Seguro que terminan llevándose bien.
-Algún día le hablaré -mentí para que dejara de insistir y funcionó.

Un mes después, iba caminando de regreso a casa después de estar en la biblioteca, faltaban dos calles para llegar, y entonces lo vi, sentado en la banqueta mientras lloraba, me dio demasiada ternura ver que estaba abrazando a un conejo de peluche, le pregunté si podía ayudarlo, al verme sus ojos se iluminaron y corrió a abrazar mis piernas.

-Lleve me a casa por favor -pidió, aun estaba llorando -Me he perdido, no me deje aquí solo.
-Tan adorable -dije y lo lleve a su casa tomándole de la mano.

Sus padres estaban tan agradecidos de que lo encontré que me invitaron a mi y a mi familia a cenar con ellos.
Después de eso, siempre que me veía, Jungkook me saludaba y daba las gracias de que lo salvé, así era hasta que él cumplió nueve.

Aun no entiendo como me encariñé rápidamente con él en éstos últimos tres meses y no en tres años.
Tres meses, tres años, ahora el numero tres me persigue.

💻

¿Como imaginas que seria la casa de un par de ancianos? cualquiera diría que sería una pequeña casa muy linda y acogedora y con un jardín con flores bien cuidadas.

La casa de mi abuela no era pequeña, tiene tres pisos, en el primer piso está la sala de estar, la cocina, el comedor y un baño, en el segundo piso hay habitaciones y otro baño y en el tercer piso no tengo la mas mínima idea de lo que haya, había una puerta que bloqueaba las escaleras para subir, la abuela sólo nos dijo que no debíamos ir ahí, hasta ese punto había pensado que la casa era linda y acogedora, ahora me dio algo de miedo.

Mi habitación estaba al final del pasillo y al lado del baño y la habitación de mi hermana estaba del lado contrario al mio, al lado de las escaleras.
-Ambos querrán tener privacidad -había dicho mi abuela.

Es probable que la segunda parte la publique hasta finales de enero😪😪
✖Capitulo ya corregido ahre

Amor A Distancia💻Namjin.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora