Su silueta vuelve aparecer en mi sueño, todo sucede tal cual como siempre. Ella en el bosque pidiéndome ayuda. Pero esta vez antes de desaparecer ella me sostiene la mirada y se va.
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Durante todo el resto del día no dejaba de aparecer esa mirada tan cargada de miedo con angustia. Que me mantuvo desconectado de lo que sucedía a mí alrededor. Así hasta el punto que me desvíe del cambio a mi casa, terminando parado frente a un edifico con muchas cosas escritas, pero lo que más me llamó la atención es que entre una de esas escrituras estaba mi número de teléfono con mi nombre. Al lado de el se encontraba una dirección con otro número de celular escrita con la misma pintura y letra. Esto hizo que a mi cuerpo le recorriera un escalofrío. Decidí anotar la información y seguir caminando, sintiendo la necesidad de que aquella escritura tuviera que ver con aquella joven vestida de negro.
En el transcurso le escribo a mi padre para saber si ya está en casa, ya que mi madre salió por cosas de trabajo. Al llegar decido no esperar un minuto más y comienzo a escribir el número, no llega a sonar ni una vez cuando me contacto con la máquina diciendo que ese número no existe o que está fuera de la zona de telefonía. Frustrado decido que iré a la dirección, pero al abrir la puerta esta mi padre que me impide la salida, diciendo que pidamos una pizza ya que no quiere hacer la cena. Luego de unos minutos llega la pizza, pero prefiero comer en mi habitación para poder seguir llamando y tener un resultado distinto al de unas horas atrás.
Después de tanto marcar, decido que ya es hora de que vaya a la dirección. La busco en Google Maps y encuentro que es a dos cuadras de mí casa. Salgo por la ventana para evitarme el interrogatorio de mí padre a donde voy.
Mientras voy caminado me doy cuenta que las casas están deshabilitadas, cuando llegó a mi destino la casa se encuentra de la misma forma, pero esta tiene algo distinto. Todas las casa anteriores estaban cerradas sin forma de poder ingresar, pero esta tiene una abertura en la puerta, tomando impulso la golpeo con mi hombro y se abre permitiendo me ingresar con facilidad.
La vivienda es igual a la mía, sólo que está se encuentra en un estado deteriorado y en las habitaciones se puede ver que remodelaron hace algún tiempo. En el primer piso me encuentro con algunas fotografías familiares, pero estas están en un estado muy malo, para poder observar a los integrantes.
Sigo avanzando y me encuentro con la escalera del segundo piso. En las paredes hay más cuadros pero esta vez son de barcos y fruteros pintados a mano. No le tomo mucha importancia y continúo subiendo.
Hay 4 puertas, de las cuales dos están abiertas no ingreso pero puedo notar que en una hay solo una cama matrimonial y que en la otra sólo hay una ventana que da a un gran balcón. Continúo caminando y me encuentro con las otras dos puertas cerradas, trato de abrir una pero no puedo así que desisto y me propongo salir de aquel lugar antes de que oscurezca y a mi padre se le ocurra ir a verme.
Al momento de llegar a casa, me voy directo a la cama.
Era el primer día de clases, yo no quería separarme de mi madre. Aferrado cada vez más fuerte a su pierna, hasta que de tanto llorar mis fuerzas se aflojaron lograron soltarme. La maestra me tenía en sus brazos logre escabullirme y salí disparado tratando de volver a la pierna de mi mamá.
En el lapso que me devolvía una voz me incita a mirar a la izquierda, ahí mismo sentada en las típicas sillitas pequeñas de preescolar está ella. La joven de negro. Siempre manteniendo su distancia, que no me deja reconocerla.
En esta ocasión no se encuentra sola, si no que viene acompañada de otra persona, con la misma vestimenta, pero este se puede diferenciar de que es un hombre ya que su contextura física me da esa pista y su rostro no se encuentra borroso. El hombre es de una ya avanzada edad, pelo canoso, rostro arrugado y se puede escuchar su respiración agitada por falta de aire. Él se me hace conocido, ya que este último tiempo me lo he topado mucho. Hubo un momento donde estuve mirando fijo al señor, pero algo me distrajo de seguir observándolo. Un montón de niños corriendo, uno me atraviesa. Esto me da terror... ¿Cómo es esto posible ? Pero no puedo seguir preguntándome eso, ya que mi cuerpo comienza a desvanecerse y desaparece dejando un pequeño dolor en el pecho al momento de despertar.
