quince.

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"¿han visto a josh?" dijo ashley hacia jenna y tyler, quienes respondieron que no. josh no había aparecido desde aquel incidente con tyler en la mañana, pero las chicas no sabían el por qué de su desaparición.

como si no fuese por coincidencia, el teléfono de la peliazul comenzó a sonar.

"es josh." anunció antes de alejarse un poco de los otros dos chicos y comenzar a hablar con él.

tyler miraba atento a ashley desde lejos, mientras que jenna se encontraba a su lado, tratando de descifrar la desesperación del castaño.

"¿estás bien? ¿ocurrió algo, tyler?" pronunció la rubia.

el mencionado la miró y luego cerró los ojos, algo arrepentido de lo sucedido. no podía negar que quería que ocurriera aquel beso con josh, pero, a la vez, habría preferido que no ocurriera si hubiese sabido de las consecuencias que habría traído consigo.

sólo atinó a negar con la cabeza. jenna, algo dudosa, decidió creerle.

"dijo que se sentía demasiado mal y estaba algo cansado, así que prefirió irse. también dijo que no nos preocupáramos, ya que no era nada grave, y que sólo nos fuéramos." dijo la peliazul.

las dos chicas parecían bastante tranquilas con la razonable razón de josh, pero tyler seguía sintiéndose culpable porque creía que en parte, era también responsabilidad de él.

"yo... creo que pasaré por la casa de josh en el camino, así que no se extrañen si me desvío del camino normal." dicho esto, ambas lo miraron algo confundidas, estando casi seguras de que se perdieron de algo. "¿qué pasó? josh nunca se enferma, sólo me preocupo si en verdad es algo grave y nos dice para que no lo veamos así."

"eh... supongo que está bien, es algo razonable." pronunció ashley. "sólo dime por favor si le ocurre algo malo, necesito saberlo." el castaño asintió. "por mientras, supongo que pasaré un poco el rato con jenna. ¿no quieres que te esperemos?"

"no, no se preocupen, en serio. creo que estaré un rato allá."

dicho esto, los tres chicos comenzaron a caminar hacia sus respectivos destinos, mientras que tyler sólo podía pensar en qué estaría pasando por la mente del teñido.

(...)

el castaño se encontraba al frente de la puerta de la casa de josh. había pensado en devolverse –ya que le temía a las confrontaciones de ese tipo–, pero decidió no hacerlo, no quería perder el coraje. algo dubitativo, tocó el timbre, siendo recibido por jordan.

"¡hola, tyler! ¿cómo estás? ¿qué haces por aquí?" tyler se rascó su nuca.

"¿es-está josh aquí? supe que vino antes de clases y sólo quería asegurarme de que..." fue interrumpido por el pelinegro.

"está bien, tyler, en serio. josh me dijo que si preguntaran por él, dijera que no podía atender a nadie, pero él me ha hablado tanto de ti que sé que me arrepentiría si no te dejo pasar." dicho esto, el castaño se sonrojó.

"gracias, jordan. no molestaré durante mucho tiempo, lo prometo."

el pelinegro dejó entrar a tyler, quien fue directamente hacia la puerta de la habitación de josh, no sin antes ver a abigail, quien lo miraba con un gesto de desaprobación.

luego de esto, tocó la puerta de la habitación.

"bajaré a almorzar dentro de un rato, jordan, no me molestes ahora." escuchó al teñido gritar del otro lado de la puerta.

algo asustado, cerró sus ojos y trató de calmar su respiración. seguía inseguro de si hacerlo o no, pero ya no había vuelta atrás.

"s-soy yo, josh. t-tyler." dijo algo nervioso a un volumen bajo, pero audible para josh.

"eh... ya voy, espera." escuchó decir de parte del otro chico.

luego de esto, la puerta se abrió, dejando ver a un josh algo despeinado y solamente con shorts, dejando a la vista sus abdominales algo trabajados, que tyler creía que eran gracias a que practicaba batería.

ahora mismo, si tyler se encontraba nervioso sólo por ver a josh, ahora lo estaba aún más.

"perdón por cómo estoy, es sólo que no creí que nadie viniera." dijo el teñido mirando hacia el piso, algo incómodo.

"yo... si quieres que me vaya, me-me puedo ir." las palabras de tyler salían demasiado entrecortadas y, otra vez, josh lo encontró demasiado adorable.

"no, tyler, quédate." y, dicho esto, abrió más la puerta de su habitación para dejar que entrara el castaño. mientras éste entraba, josh tomó una polera que se encontraba encima de su cama y se la puso.

"bueno... supongo que si viniste, es porque estás en busca de explicaciones." dijo justo antes de suspirar. "quería... quiero pedirte perdón por lo que hice en el baño... ya sabes."

tyler veía el nerviosismo en josh que reflejaba el que se tocaba constantemente su cabello mientras hablaba, lo cual, irónicamente, verlo hacer eso lo relajaba un poco más a él.

por otra parte, josh sólo quería decirle a tyler lo que sentía por él y lo mucho que había significado aquel beso, pero las palabras no salían de su boca. no sabía cómo expresárselo.

"pero... tyler, yo..." el sonido de la puerta de la habitación abrirse los interrumpió. era abigail.

"josh, quería avisarte que debes bajar en veinte minutos a almorzar, jordan ya casi termina." dijo la chica, ignorando casi por completo a tyler, yéndose posteriormente. el teñido se dio cuenta de esto, y pensó bien las cosas.

tal vez si no se lo decía a tyler y dejaba pasar esta situación, luego se olvidaría de sus emociones y no tendría que enfrentar aquellos obstáculos de los que no se sentía capaz de superar. después de todo, él era cobarde, o al menos eso creía.

"bien, tyler, quería decirte que no sé por qué hice eso, tal vez fue un impulso, simplemente no lo sé. sólo espero que aquello no arruine nuestra amistad y que de verdad me arrepiento de ello, ¿me perdonas?"

el castaño sólo miraba al suelo, tratando de aguantarse todas las lágrimas que quería soltar con un nudo en la garganta. por primera vez había creído que tenía algo especial.

"sí, josh, no te preocupes. todo está bien." dijo haciendo su mayor esfuerzo en hacérselo creer a sí mismo, más que al teñido.

anathema » joshlerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora