Yachi caminaba nerviosamente al lado de Kei, pareciese como si cada paso que él martillara sus nervios haciéndolos temblar. Por su lado Kei permanecía sereno, su usual cara de póker ponía aún más nerviosa a Hitoka.
- ¿Cómo lo hace? –
Pensó ella mientras lo miraba de reojo, Kei tenía ya mucho rato callado, solo caminaba lentamente y ciertamente era un silencio inquietante, como si asfixiara a Hitoka y no la dejara hablar, fue en ese instante cuando Kei se detuvo y se volteo hacia ella.
- Tengo algo muy importante que decirte Yachi Hitoka –
La expresión de Kei se transformó, ahora era notable en su rostro la angustia, el nerviosismo y la ansiedad.
- Últimamente he actuado de manera ambigua cuando estoy cerca de ti, y por eso siento que nuestra relación comenzó a torcerse un poco, no soy precisamente alguien expresivo y tampoco se me da bien eso de sonreír, no soy tan brillante como otros, soy bastante amargado, me enojo con facilidad, soy torpe cuando de relacionarse con otros se trata, también soy cobarde –
La lluvia de palabras que salían de la boca de Kei tomaron por sorpresa a Hitoka quien no decía nada, estaba demasiado ocupada intentando descubrir que quería decir Kei con todas esas palabras.
- Si, ciertamente soy un cobarde, pero debo admitir que no se en que momento quise cambiar, ser honesto y valiente, antes de darme cuenta había pasado de ser un cobarde mentiroso a ser alguien extremadamente posesivo y egoísta, quería más y más, me encontré incapaz de pensar en otra cosa –
Kei extendió su mano hasta tocar le mejilla de Hitoka con la punta de sus dedos.
- Soy incapaz de pensar en otra cosa que no seas tú Yachi Hitoka -
Los ojos de Hitoka centellearon al escuchar a Kei, sintió que lloraría, pero estaba segura del porqué, estaba feliz, de eso no había duda pero, algo en ella exploto, sin saber en que momento se dio cuenta de que aquel chico alto e inexpresivo que tenía frente a ella había pasado a ser un simple conocido a ser alguien tan influyente en ella y era raro, le parecía raro sentirse tan confundida, hasta hacia unas semanas su corazón solo se aceleraba cuando veía o escuchaba a Hinata, sin embargo ahí estaba, con el corazón a punto de salírsele del pecho y con las lágrimas a punto de desbordarse y todo era a causa de Tsukishima Kei y no de Hinata Shoyo.
- Me gustas Yachi Hitoka, no necesito una respuesta, al menos no ahora, pero quiero que lo sepas –
Kei se dispuso a marcharse, pero antes de que lo hiciera Hitoka lo sostuvo por la manga de su uniforme, con los ojos húmedos y los labios fruncidos intento hablar, pero no pudo.
- Ya te lo dije –
Exclamo Kei.
- No tienes que decir nada, no necesitas darme una respuesta y si de veras te importa, aunque sea un poco esta relación, trataras de que esta confesión no la afecte –
Después de decir eso Kei esbozo una sonrisa que Hitoka jamás había visto en él, era claro que le había costado mucho valor decir todo aquello, pero aun así ella no pudo si quiera agradecerle, después de que Kei se marchó ella solo pudo caer sobre sus rodillas y llorar, estaba en un dilema, en su corazón estaba Hinata, pero en su mente solo había espacio para Kei.
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Haikyuu After Practice #MareaDAwards2017
FanficLo que pasa después de las practicas del club de Voleyball de la preparatoria Karasuno es un misterio que muchos quisieran saber, como son los cuervos fuera de la cancha, eso y mas veremos en este tierno Fanfic.