«Corazón limpio»

1.9K 137 9
                                    

Que el Señor sea limpiando nuestros corazones; quitando todo desecho en el causado por el odio, rencor, orgullo, envidia y todos aquellos venenos que son tóxicos para nuestros corazones, y por consiguiente nuestro cuerpo que es templo y morada de su Espíritu Santo.

Que su amor inunde con rios y corrientes torrenciales, llenando cada rincón quitando toda piedra que se haya adherido a nosotros; y lo peor que nos cuesta dejar ir. Que nos dé un corazón limpio y sano, perdonemos como Él nos perdona, amemos como Él nos ama, con gran frenesí de su amor.

Que seamos perfeccionados cada día más en su perfecto amor, que echa fuera temor y en el que no puede y haber ningun tipo de mal.

Somos humanos, sí, muchas veces por naturaleza somos orgullosos, no perdonamos, guardamos algo malo, y preferimos que eso nos carcoma por dentro. Pero Él no quiere eso de nosotros.
Quiere que a donde vayamos nuestros rostros resplandezcan de gracia, belleza, paz; que proviene de Él.
Que seamos conocidos por lo que Él ha echo en cada uno.

Pidamos ser perfeccionados en su amor, anhelemos eso con pasión, que reiné en todo nuestro ser, que inunde, que desborde, que nos sumerga, que vivamos en Él y Él en nosotros.

En Él nuevas criaturas somos, todas las cosas viejas pasaron he aquí todas son echas nuevas.

Que su palabra sea nuestro deleite, que en ella encontremos delicia, en ella nos alegremos y esté ese verdadero gozo, que no dá paso a otra cosa.

Que nos limpie y seamos como limpia vasija, y que vayamos depositando en otros lo que somos, de lo que Él es.

El mismo espíritu dará testimonio de todo aquello. Solo coloquemos disposición, Él hará el resto. Pidamos eso, imitemos al Salvador en todo aquello que es y representa.

Anhelemos eso cada día, busquemos; un corazón que ame y que perdone.

Anhelemos eso cada día, busquemos; un corazón que ame y que perdone

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Más de tí, menos de míDonde viven las historias. Descúbrelo ahora