TN__ quedo perpleja ante sus palabras, nunca se imaginó que su respuesta seria despedirla. Lo miro a los ojos asintiendo, prometió ser fuerte si las cosas salían mal, pero no pudo contener las lágrimas. Young Min quedo asombrado de ver la expresión tan triste de parte la chica, no sabía que decir ¿había cometido un error? ¿Por qué ahora se arrepentía de haberlo dicho? A él le dolía verla de esa manera. Ella sonrió y agacho la mirada simplemente guardando sus palabras, dándose vuelta y abandonando el lugar.
Cuando doblo en el pasillo se llevó las manos a la boca y rompió en llanto, corrió a lo que ya no sería su habitación, entro y cerró la puerta cayendo recostada en esta, no podía parar de llorar. ¿Tantas esperanzas tenia de que el corresponda? "Oh vamos TN__" se dijo para sí misma, ella sabía muy bien que nunca pasaría ¿entonces porque se había ilusionado tanto? Esto era lo correcto.
TN__ se levantó y aun dejando caer lágrimas de sus mejillas comenzó a empacar las pocas cosas que tenía allí, se cambió y dejo el traje sobre la cama, lo miro sabiendo que esa era la última vez que lo usaría, ya no despertaría en el cuarto de esa casa, ya no vería mas a Kwang Min ni a su agradable novia, ya Robert no le daría los trabajos más largos. Se arrodillo frente a la cama y comenzó a golpearla mientras su llanto aumentaba, ella ya no sería parte de esa casa.
Young Min estaba en su cuarto, se estaba arrepintiendo de lo que había hecho, bajo hasta allí, hasta el cuarto de ella, sorprendentemente no se escuchaban sus llantos, ni siquiera algún ruido, esto lo tranquilizo, al menos ella ya no estaba llorando. Se acercó y toco la puerta – ¿TN__? Quería pedirte disculpas...- entono en tono serio, pero nadie respondió. Volvió a tocar -¿podrías salir un momento?- volvió a preguntar el rubio, pero nuevamente no obtuvo respuesta. Extrañado decidió abrir la puerta, agarro el picaporte y empujo hacia delante abriéndola lentamente haciendo que la vieja puerta rechine. –TN__ por favor, quiero hablar cont...- sus palabras dejaron de salir al ver ese cuarto completamente vacío. El traje estaba sobre la cama, los pocos muebles ya no tenían las cosas de ella, trago saliva pensando que era una broma, cerró la puerta y volvió a abrirla, pensando que tal vez era su imaginación, pero lamentablemente la habitación estaba igual. Se llevó una mano en la frente anonadado. -¿Qué fue lo que hice?- Sus ojos se humedecieron un poco, esto era su culpa, él lo había hecho, el solo tenía la culpa de que ese cuarto estuviera vacío. Cerro su puño con y por impulso golpeo la puerta, una vez y luego otra, y otra, hasta dejarse caer arrodillado mientras dejaba caer unas pocas lagrimas de culpa. ¿Por qué se sentía así? Era solo una empleada común y corriente, no era nadie importante ¿verdad? Era solo una chiquilla molesta y quejumbrosa... era una muchacha que cualquiera podría remplazar, incluso alguien mucho mejor. –No...- hablo el rubio con la voz quebrada. Nadie podría remplazarla a ella. Agarro su móvil e intento llamarla, pero al fijarse se dio cuenta de que estaba bloqueado. Se levantó rápidamente y corrió hacia la entrada de la casa, luego salió hacia fuera, buscándola desesperadamente, pero no la encontró, se llevó las manos a la cabeza sentado en el jardín y miro la calle vacía frente a él derramando pequeñas lágrimas. Ya era tarde, ella se había marchado y probablemente jamás volvería a verla.
En otra parte, TN__ ya más calmada estaba frente la puerta de su hogar, disimulando su tristeza toco la puerta y respiro hondo, debía olvidarse de todo lo ocurrido. La puerta se abrió dejando ver a una mujer mayor muy parecida a TN__ -¡¡TN__!! ¡Hija!- la mujer abrazo a TN__ fuertemente, esta correspondió feliz de sentir el cálido abrazo de su madre -¿Qué haces aquí? ¿Tomaste un día de vacaciones?- pregunto intrigada la mujer, que confundida la miro a los ojos.
-Mamá yo, fui despedida- rio levemente forzando una sonrisa –Pero descuida, me pagaron lo suficiente y buscare trabajo en otro lugar- su madre sonrió –no te preocupes hija, todo estará bien- esta volvió abrazar a TN__ y sonrió. -¿Dónde están los demás?- pregunto extrañada TN__ entrando a la casa detrás de su madre.
–Oh, tu padre está trabajando y tu hermano fue a la casa de su novia, aunque no lo creas- contesto su madre alegremente.
TN__ asintió, sentándose en el sofá, hacia tanto que no entraba a su hogar, sintió su aroma, el mismo de siempre. Le trajo buenos recuerdos de cuando era niña, mientras jugaba con su hermano mayor. Recordó que siempre terminaba llorando por culpa de su querido hermano que nunca la dejaba ganar. Rio mientras recordaba y miro hacia la ventana. –Olvidare todo lo que sucedió en esa casa, olvidare todo lo que sucedió con ese chico- hablo para sí misma, cerrando sus ojos mientras sentía el cálido sol pegar en su cuerpo.
Pasaron las horas, los días, las semanas y luego meses, TN__ no había vuelto a cruzarse con Young Min, ya casi no pensaba en él, incluso había conseguido un empleo gracias a Min Woo en un local de ropa. Salió varias veces con él, lo quería, y aunque dijo que tenía que enamorarse de él, ahora sería menos posible, solo lo veía como amigo y además si fueran novios, se cruzaría a Young Min varias veces. También se veía pocas veces con Hul Min, ella era su amiga así que seguían en contacto.
Se despertó de mañana, levantándose feliz abriendo sus cortinas, se vistió y salió rumbo hacia su trabajo, caminaba alegre sonriendo entre todas las personas, miraba al frente saludando a algunos de los vendedores que veía todos los días cuando de repente entre el montón de personas, diviso el cabello y el abrigo de aquel muchacho que no veía hacía tiempo. -¿Young min?- susurro atónita TN__ quedando parada en el lugar, viendo como el rubio desaparecía entre la multitud.
*lo se, lo se, perdon por tardar tanto... Estoy muy ocupada estos dias y en la noche llego cansada asi que me acuesto a dormir... Intentaré subir mas seguido ^^ besos*
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Un Amor Complicado 《Young Min y tu》
FanfictionJamas pensaste que te fueras a enamorar de el, un tonto enojon. Pensabas que lo odiabas, pero no era así. Se notaba cuando el no estaba en la casa, su presencia era lo único que importaba para ti.