El pueblo de Petalia era un lugar hermoso,rodeado de inmensos bosques y la gente que vivía en aquel lugar era tranquila y felíz.Mientras que en un lugar oculto en el pueblo habia un antiguo templo de artes marciales donde sólo los más dignos y valientes podían ser entrenados.Ahí se encontraba un maestro legendario experto en todas las artes marciales. Su nombre era mufoshi,un guerrero que fue un héroe en su tiempo pero ahora era un anciano en agonía,mientras él estaba acostado en su cama dos de sus más grandes aprendices estaban junto a él acompañandolo en sus últimos momentos de vida. Peter Hart y James Valerian fueron sus alumnos más destacados y los únicos que quedaban ya que uno estaba desaparecido y los demás murieron en batalla.
-James- dijo el hombre anciano mirando a un hombre de mediana edad de cabello castaño y ojos cafés con piel blanca y estatura media.
-dígame maestro- contestó James.
-Desde ahora tu serás el nuevo guardián del templo y reclutarás a la siguiente generación deguerreros- dijo Mufoshi.
-No lo descepcionare señor-. Dijo James con la voz cortada.
-Peter. Quiero que protejas nuestro pueblo y seas un gran jefe de Policía-. Dijo Mufoshi a un hombre Rubio con piel blanca y ojos verdes.
-No lo descepcionare señor-. Dijo Peter.
Y mientras ambos sostenían la mano de Mufoshi el hombre expiró y las antorchas que iluminabán el templo se apagaron. Dejando el lugar completamente oscuro. Esa misma noche se dio la noticia en el pueblo y todos se unieron a despedir a quien alguna vez los salvó y protegió de todo mal. El templo se llenó de gente que se acercaban al lugar para despedir a Mufoshi mientras que en el jardín del templo Peter y James hablaban
-¿Y que harás ahora que eres el guardián y maestro del templo James?-. Dijo Peter
-Daré mi mejor esfuerzo para no decepcionar a nuestro maestro-. Respondió James. -¿Y tu que harás Pit?.
-Supongo que lo mismo que tu-. Respondió Peter -Tampoco quiero descepcionarlo.
Ambos miraban las estrellas. Mientras, los aprendices de Mufoshi atendían a las personas que venían a ver al viejo maestro James y Peter los llamaron a todos al patio principal con el cuerpo de Mufoshi para hacer la ceremonia de despedida. Los visitantes y alumnos se acercaron al patio mientras James y Peter tenían dos antorchas en la mano y ambos dijeron lo siguiente.
-Mufoshi. Tu cuerpo nos a dejado pero tu alma y recuerdo vivirán eternamente en nosotros. Esperamos que tu espíritu puro nos guíe por nuestro caminó-.
Y ambos pusieron sus antorchas sobre el cuerpo sin vida del maestro y en ese momento se prendió inmensamente mientras de el salía un aura blanca en forma de dragón. Todos se inclinaron en señal de respeto mientras el cuerpo desaparecía en el fuego. Al terminar el funeral el templo cerró sus puertas de nuevo y no serían abiertas hasta encontrar una nueva generación de guerreros. Pasaron meses y todos creyeron que el templo no volvería a abrir.
Una mañana en el mercado había un gran caos ocasionado por tres niños huérfanos que buscaban sobrevivir. Matt un niño delgado de ojos cafés y cabello negro, Ana. Una niña delgada de piel morena,muy hermosa de ojos cafés y cabello largo castaño y Robert. Un niño bajito de ojeras y cuerpo delgado por el hambre. Los tres niños habían robado manzanas para sobrevivir. Mientras corrían por la calle, llegaron a un callejón y sólo podían escapar si trepaban.
-Ustedes suban rapido-. Dijo Matt. -Si los agarran será nuestro fin.
Los ayudó a subir y cuando se disponía a subir los mercaderes lo alcanzaron.
-Creiste que escaparias maldito mocoso-. Dijo un hombre robusto con cara de amargado mientras sostenía un palo.
-Mis amigos ya huyeron así que no podrán alcanzarlos-. Dijo Matt.
Mientras Ana y Robert escuchaban todo detrás de la pared.
-cierra la boca mocoso-. Dijo el Mercader golpeandolo fuertemente con el palo que tenía en la manos.
Mientras el y otros dos mercaderes lo golpeaban brutalmente el resistía los golpes en el suelo y no soltaba las manzanas mientras Ana lloraba en silencio y Robert la abrazaba.
-siempre serás un miserable muerto de hambre mocoso-. Dijo un chico que lo pateaba en el estómago.
-Haznos un favor y mueranse. Dijo el mercader golpeandolo con el palo.
-Así ya no nos traeran problemas-. Dijo otro chico que lo golpeaba en la cara.
Cuando se sintieron satisfechos los tres sujetos se fueron del callejón dejando a Matt en el suelo completamente herido.Ana y Robert subieron rápido el muro y fueron a ver a su amigo quien no soltaba las manzanas aún después de ser golpeado, en ese momento Ana lo abrazo y con lágrimas en los ojos le dijo.
-Por qué siempre recibes los golpes por nosotros-.
-No quiero que los lastimen-. Dijo Matt.
Les dio las manzanas y se dispusieron a comer. Mientras que a lo lejos dos sujetos los miraban a lo lejos.
-Esos niños sólo traen problemas ¿no crees?-. Dijo Peter.
-Pienso en llevarlos al templo-. Dijo James.
-¿Así que tomaste una decisión James?-.
-Si, Y también pienso en llevarme a tus hijas Pit-. Dijo James mirando a los niños.
-No quiero que mis hijas se involucren en esto. Pero quiero que te lleves a mi sobrino-. Respondió mientras miraba a los niños.
-Esta bien Pit, lo llevaré al templo-. Dijo James mientras se daba la vuelta.
-Para mi seria sería un honor Valerian sensei-. Dijo Peter en un tono serio.-¿Sabes?. Esos niños merecen algo mejor-.
-mañana será noche buena y desde que murió la anciana que los cuidaba nunca han tenido a nadie. Y quiero darles un detalle antes de irse al templo-. Dijo James con una sonrisa.
-¿Ya tienes elegidos a la siguiente generación de guerreros?-. Dijo Peter sorprendido.
-Si-. Dijo James.
-.¿Quienes son?-. Dijo Peter con curiosidad.
-La hija de los bibliotecarios, el hijo de los Could, la hija de los botánicos Dustox,el hijo de los fisoculturistas y el hijo del guarda bosques-. Dijo James seguro de si.
-Se que serás un buen sensei para ellos-. Dijo Peter.
James se despidió de su amigo y se alejó del lugar.
Cuando terminaron de comer los niños se dirigieron a su casa. Era una casa completamente en ruinas y apuntó de caer, no tenían camas,sólo tres cobijas con las cuales se cubrían del frío. Al llegar a su hogar los tres se comenzaron a lanzar bolas de nieve y jugaban sin parar.
Al día siguiente era 24 de diciembre y muchas familias estaban comprando sus obsequios para la Navidad. Mientras los tres niños buscaban que comer sin tener éxito alguno se marcharon a su casa y esperaron ahí hasta el anochecer para acechar la basura de las familias más ricas del pueblo. Sin tener éxito de nuevo. Regresaron desilucionados a su hogar. Mientras la nieve caía y los tres estaban cobijados en su casa la nieve cayó con más fuerza,provocándoles mas frío. Ana y Robert se juntaron y se cobijarón mientras Matt los veía dormir los vio temblando de más frío y se acercó a ponerles su manta para que no tuvieran más frío,en ese momento James se paró frente a ellos diciendo.
-¿Hay alguien en casa?-.
Los tres salieron desconcertados y el los miro fijamente y noto sus miradas hambrientas y con ganas de calentarse. Entonces les dijo.
-Vengan con migo los invito a cenar a mi casa-.
Los tres se miraron extrañados,pues desde que la anciana murió nadie más se había preocupado por ellos.
-La cena se enfriara-. Dijo James con una sonrisa en la cara y comenzó a Alejarse.
Los tres lo siguieron hasta su casa y al entrar sobre la mesa había un gran banquete. Un pavo enorme, puré de papa, chocolate caliente,ensalada navideña. El los volvió a mirar y les dijo.
-Tomen asiento. Esto es para ustedes-.
Los cuatro se sentaron y comenzaron a cenar.
Los tres se veían felices,pues,nunca habían comido algo tan delicioso ya que siempre eran sobras de la basura y rara vez una manzana deliciosa. Al terminar la cena James fue a su cuarto y sacó tres regalos. Uno para cada uno.
-Necesitan ropa nueva-. Les dijo mientras les sonreía.
Ana lo miro con lágrimas en los ojos y lo abrazo. Acto seguido de los dos niños.
-Bien, aquí hay agua caliente y pueden bañarse con confianza-. Les dijo James.
De uno en uno se bañaron y en sus miradas se veía una felicidad inmensa cuando salían estrenando su ropa nueva.
-Bien,ya que estamos en la sala les diré algo importante-. Dijo James mientras se sentaba en el sofá.
Los miro serio y después de respirar profundo les dijo.
-Apartir de ahora ustedes vivirán aqui,además,les sustentare alimento y ropa pero a cambio yo los entrenare en el templo de Mufoshi-.
Los niños lo miraron impresionados y no sabían que decir hasta que Ana dijo.
-Pero ahí sólo los dignos guerreros pueden entrenar-.
-Sólo los de linaje guerrero pueden entrenar ahi-. La interrumpió Matt.
-Así es,yo soy el sensei ahí-.
-¡Quee!-. Interrumpieron los niños.
-Así es. Yo mismo los entrenare y dentro de poco conocerán a sus compañeros-. Dijo James entusiasmado.
Los tres le agradecieron dándole otro abrazo.
-Bien, ya es tarde y necesitan descansar, sus recámaras están listas-. Dijo James indicándoles donde estaban sus nuevos dormitorios.
Los tres se dirigieron a sus respectivas habitaciones y se sintieron felices de tener una cama calentita para cada uno. Le dieron las buenas noches a James y se dispusieron a dormir.
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Locura de amigos
Teen FictionMatt Likaniss y Adi Hart son buenos amigos,pero su vida da un giro radical cuando viajan a un mundo alterno similar al que conocen pero sus amigos son totalmente diferentes a comparación de los que recuerdan,haciendo posible está locura. Ahora deber...