Locura de amigos

El festival de la cosecha

Los meses pasaron rápido y con ellos la primavera había llegado a su fin. El verano de ese año los chicos se reunían el fin de semana y acampaban a la orilla del lago que se encontraba cerca de Petalia. Era un pequeño lago cristalino con agua dulce ideal para pasarla bien. Todos los fines de semana estaban en aquel lugar divirtiéndose, incluso Kayla dejaba de leer sus libros y se ponía a conversar con los demás. Adi y Astrid también hiban hija ya que Barrie las llevaba para que se acoplaran y amigaran con los demás. Vanessa tomaba el sol junto con las demás chicas mientras los chicos competían para saber quién nadaba más rápido de orilla a orilla. A la hora de comer Finn Barrie y Matt pescaban algunos peces para comer mientras los demás chicos improvisaban con los vegetales que llevaban para hacer una ensalada. Después de comer platicaban un poco hasta el atardecer y después recogían todo para regresar a sus casas. Poco después de que terminó el verano pasaron dos meses y con ellos se acercaba halloween y para ese día todos habian planeado ir al cine a ver una película sobre un monstruo que disfrutaba de comer niños. La película era demasiado perturbadora y cada chica agarraba el brazo de el chico que estaba de su lado. Para Matt fue algo difícil ya que estaba en medio de Adi y Ana y ambas apretaban sus brazos cuando ocurría una escena de terror. Finn y Jack se cubrían el rostro mientras que Vanessa se escondía en el brazo de Barrie y Astrid sólo daba un pequeño salto y grito de vez en cuando. En una escena donde la criatura toma por sorpresa a una víctima Jack grito tan fuerte que todos en la sala comenzaron a reírse mientras el se avergonzaba por su reacción tan repentina. Al salir del cine Jack replicaba que no tenía miedo pero Vanessa le decía sarcástica.
-Claro,te creemos. Sobre todo por tu grito-.
Todos comenzaron a reír y Jack se sentía avergonzado después de eso Adi les dijo a todos.
-Oigan deberíamos de reunirnos todos para el festival de la cosecha ¿no creen?-.
Todos asintieron y continuaron caminando.
El festival de la cosecha era una festividad de Petalia en la que una semana antes de acción de gracias tenían una feria donde había puestos de comida,juegos y pirotecnia. Toda una semana durante la noche el centro de Petalia se iluminaba para celebrar el festival de la cosecha.
Después de que se despidieron todos cada quien se dirigió a su casa.
-Oigan ¿que haremos este año en acción de gracias?-. Les pregunto Ana a Matt y a Robert mientras caminaban a su casa.
-Lo de siempre. Pavo,puré de papas,ensalada,ponche,bastones de dulce-. Respondió Robert.
-Amigo. Los bastones de dulce y el ponche son en navidad-. Le dijo Matt con una risa diminuta.
-Matt tiene razón. Parece que ya quieres que sea navidad-. Dijo Ana mientras miraba a Robert sonriendo.
-Oigan ya casi es su aniversario-Dijo Matt parandose rápidamente mientras Ana y Robert hacían lo mismo.
-Tienes razón- respondió Robert.
-Ya pasaron trece años desde que la abuela Morrison murio-. Dijo Ana algo sería.
Los tres se quedaron un rato quietos mientras el viento de otoño les llegaba a la cara.
-Lleguemos a casa porque mañana entrenaremos duro para poder descansar en el festival de la cosecha-. Sugirió Matt.
Después de un rato los tres llegaron a casa y se dispusieron a ver un rato la televisión como acostumbraban cada noche antes de dormir.
Al día siguiente tuvieron un entrenamiento pesado pero ya estaban acostumbrados a ello. Mientras estaban en el gran jardín las chicas hablaban entre si sobre que ropa usarían el día del desfile de la cosecha y los chicos hablaban sobre que comerian primero en el festival.
-Les recomiendo el pastel de calabaza de la señora Morgan-. Les dijo Rick.
-Mejor las espiropapas del señor Finguerman- interrumpía Will.
-Ya tendremos toda la semana para poder comer todo eso-. Dijo Kevin. -Además mi padre me dio permiso de faltar en la cocina está semana ya que el venderá pasteles con mi madre en el festival-.
-Yo adoro el pastel de tres chocolates de tu madre Kevin- Dijo  Melanie mientras se acariciaba el estómago.
Todos estaban felices por el festival ya que era también la fecha en la que Petalia había sido fundada.
Al terminar el entrenamiento James les recordó que tendrían una semana de descanso por el festival. Todos se despidieron y bajaron la gran escalinata de piedra muy felices incluso los senseis del templo estaban felices por aquel festejo.
Mientras tanto en la estación de Policía Peter estaba frente a todos sus compañeros dando un discurso sobre la seguridad de Petalia.
-Como todos saben cada año nos turnamos en hacer guardia en el festival. Todos portaremos nuestro uniforme y nuestra placa pero también disfrutaremos el festival-.
-lo único que hacemos es encerrar unas horas a los ebrios o gente que pelea en la calle en estos días-  interrumpió un policía.
-Tienes razón Jaime pero aún así debemos estar atentos ante cualquier cosa. Bueno disfruten del festival y recuerden que la seguridad de Petalia nos fue encomendada-. Terminó de decir Peter.
Esa tarde toda Petalia adornaba con luces sus hogares. La plaza principal estaba adornada con muchos adornos y los puestos de la feria comenzaban a ponerse. Todo se veía hermoso e increíble pero aún no había comida ni los juegos funcionaban ya que aún faltaba el desfile. Cada año el templo de Mufoshi marchaba junto a los carros alegóricos y los policías. Las únicas espectadoras eran Adi y Astrid quienes año con año miraban el desfile como si fuesen niñas otra vez. El desfile empezaba al atardecer y terminaba al anochecer. Los chicos se reunieron y se propusieron a ponerse de acuerdo sobre donde verían el espectáculo de fuegos artificiales. Astrid,Ana Vanessa y Kayla estarían en los algodones de azúcar mientras que Matt y Adi caminarian un rato mientras platicaban. En cambio los chicos probarian sus destrezas en juegos como reventar globos y competirian para saber quién duraba más en caer del toro mecánico.
-Hace mucho que no estábamos solos-. Dijo Adi mirando a Matt mientras caminaban.
-tienes razón. ¿quieres una espiropapa?-. Pregunto Matt a Adi mientras se detenía en el puesto del señor Finguerman.
-Claro-. Respondió Adi.
Matt pago las espiropapas y le entregó una a Adi.
-Ya casi es el aniversario de la mujer que nos cuido a Ana Robert y a mi-. Comentó Matt mientras Adi mordia su espiropapa.
-Mi madre acaba de cumplir su aniversario tambien-. Respondió Adi.
-¿Enserio?-. Pregunto Matt.
-Si. Mi padre suele estar algo melancólico ese día ya que fue su único amor-. Dijo Adi  algo sería y cabizbaja.
Ambos siguieron caminando hasta que llegaron a una cabina fotográfica. En ese momento Adi miro a Matt y le dijo.
-nosotros no tenemos una foto juntos. ¿Te gustaría tomarte una?.
-Claro-. Dijo Matt sonriendo.
Ambos pagaron la foto y se metieron a la cabina. Después de salir el dueño les entregó dos fotografías grandes en un marco de fotos. Ambos continuaron caminando hasta que vieron a alguien de aspecto tétrico a las afueras de la feria ambos decidieron ir con aquel sujeto. Salieron de la feria a una calle cerca que se encontraba sola y algo obscura ya que los locales no dejaban pasar mucha luz. El hombre misterioso salió por detrás de ambos y hablo en una lengua extraña. Ambos lo miraron fijamente y de pronto atrás de ellos apareció un círculo gigante que los arrastraba con fuerza ambos tiraron sus fotografías y fueron tragados por aquel agujero extraño. Matt tomó de la mano a Adi y ambos cerraron los ojos y cuando los abrieron estaban en el mismo lugar donde habian sido tragados por aquel agujero. La feria aún Seguía y ambos se dispusieron a entrar de nuevo. Todo era normal hasta que Astrid apareció frente a ellos.
-Adriana porque te alejas así y porque estas con Matt Likaniss-.
Ambos se voltearon a ver extrañados porque los dos conocían bien a Astrid y ella nunca se había comportado así.