Locura de amigos

¿Es Petalia?

Poco después de que Astrid encontró a Matt y A Adi apareció Ana.
-Matti aquí estas-. Dijo mirando con amor a Matt.
Matt miro extrañado a Ana y después miro a Adi.
-¿Que haces con ellas? ¿Acaso tu novia es ella?-. Dijo Ana algo molesta.
-Adi es sólo mi amiga-. Dijo Matt aún confundido-.
-No me importa. Yo soy tu novia y merezco mi lugar como tal-. Dijo mientras se acercaba a Adi y le dijo al oído.- Si tratas de quitarme a Matt yo misma me encargaré de humillarte y hacerte la vida imposible,no me importa que seas cocapitana de porristas-.
Adi miro a Ana y después miro a Matt aún sin tener respuestas. Ana miro a Adi y Astrid,después miro a Matt y lo beso en la boca. Adi  estaba impresionada al ver aquel beso pues hasta donde sabía Ana sólo era amiga de Matt era como su hermana. Mientras tanto para Astrid era algo normal ver a Ana besuquear a Matt. Ana se llevó a Matt del brazo y se alejaron del lugar.
-¿Desde cuando te gusta?-. Le pregunto Astrid a su hermana.
-De que hablas-. Respondió Adi.
-No te hagas la tonta Adriana. Hablo de Matt Likaniss. Es obvio que te gusta y el también te quiere-. Dijo Astrid mientras miraba picaronamente a su hermana.
-Estas loca. Matt es solo mi amigo-. Dijo Adi algo molesta.
-¿Desde cuando? Tu y el nunca de se han hablado ni en la escuela-. Dijo Astrid.
-¿Escuela?-. Pregunto extrañada Adi.
-Si hermanita. ¿Ya se te olvido o Que?-.
-Olvidalo mejor regresemos a casa es obvio que estoy cansada-. Comentó Adi entre suspiros.
Mientras Ambas regresaban a su casa Matt y Ana siguieron en la feria.
-¿amor dime que hacías con Adriana?- pregunto algo sería Ana.
Matt sabía que ocurría algo extraño y quería llegar al fondo de la situación así que trató de seguir el asunto.
-Quería comprarte una espiropapa y me la encontré. Me dijo que si no había visto a su hermana-. Dijo manteniendo la calma.
-Eres el mejor novio del mundo. Por eso te amo Matt Likaniss-. Dijo Ana mientras miraba a Matt como una adolescente miraba a su primer amor.
-¿Donde está Robert?-. Pregunto Matt.
-De seguro estara con su novia Vanessa-. Respondió Ana quien no dejaba de mirar con locura a Matt.
Escuchar eso dejo a Matt impresionado. Vanessa era una chica bastante hermosa pero todo chico que la pretendiera en el pueblo era bateado por ella.
-¡Mira ahí estan!-. Dijo Ana apuntandole a Matt hacia un local lleno de peluches con tres personas en el. Robert trataba de ganar un unicornio para Vanessa quien se encontraba al lado de el alentandolo diciéndole cosas lindas. Esto impresionó aún más a Matt ya que Vanessa era siempre una chica sarcástica y fría. En definitiva no era Vanessa,Robert Ganó el peluche para Vanessa y está le dio un beso en la mejilla y le decía con una dulce voz.
-Gracias corazón eres el mejor novio del mundo-.
Matt y Ana se acercaron a ellos y los cuatro estuvieron un largo rato caminando por la feria mientras platicaban. Vanessa y Robert estaban abrazados y Ana no soltaba el brazo de Matt.
-Vaya quien lo diría,ya es muy tarde-. Dijo Robert mientras miraba su reloj en la muñeca.
-¿Nos acompañan a casa?-. Dijo Ana.
Ambos asintieron y llevaron a Vanessa a su casa. Cuando llegaron Matt se dio cuenta que el vivero de los Dustox aún estaba sin ningún cambió.
-No me gustan las despedidas amor-.dijo Vanessa mientras miraba a Robert y lo tomaba de una mano.
-Lo se princesa. Pero mañana nos veremos en la escuela-. Dijo Robert con un tono heroico.
Los tres se despidieron de Vanessa y está entro a su casa enseguida. Ana Matt y Robert caminaban juntos y Matt quería contarles lo que había sucedido pero no era el momento adecuado para ello. Caminaron tres cuadras cuando Ana se detuvo y les dijo.
-Nos vemos mañana en la escuela-.
Después se acercó a Matt y lo volvió a besar y después sacó unas llaves de su bolsa y se metió a una casa que tenía las luces encendidas y se escuchaban dos voces en el interior.Matt y Robert siguieron caminando y Matt le pregunto.
-¿Desde cuándo  Ana vive con alguien más?-
-Siempre a vivido con sus padres Matt igual que tu e igual que yo-. Dijo Robert mientras caminaban en dirección donde se encontraba la casa donde solían vivir ellos tres.
Al escuchar eso Matt se quedó de pie y su corazón se aceleraba.
-¿Estas listo para la prueba del entrenador Will?-. Pregunto Robert.
-Si,claro que lo estoy-. Respondió Matt volviendo en si.
El aún no creía lo que estaba escuchando. Sus padres seguían con vida. Continuaron hablando como si fuera el verdadero Robert hasta que llegaron a una esquina de la cual se veía la casa de Matt con las luces encendidas.
-Bueno Matt nos vemos mañana en la escuela-. Dijo Robert despidiéndose y tomando otra calle.
Matt camino hasta su casa con el corazón acelerado y al abrir la puerta escucho una dulce voz que le dijo.
-Te estábamos esperando mi cielo. Ven a cenar-.
Una mujer de cabello obscuro y piel blanca le sonreía a Matt y en la mesa un señor de mediana edad de cabello corto y obscuro lo miraba. Sin pensarlo Matt abrazo a aquella mujer y con lágrimas en los ojos sollozo.
-Mamá,papá-.
-¿Sucede algo cariño?- pregunto la mujer.
-¿Te peleaste con Ana?-. Pregunto el hombre.
-No,es sólo que- Matt se limpiaba las lágrimas y acepto cenar con ellos.
Cuando Adi y Astrid  llegaron a su casa una mujer de una gran belleza y ojos verdes salió para recibir a sus hijas. Así al verla la abrazo y comenzó a llorar. Era su madre quien había fallecido cuando Adi  era una niña . La mujer con una voz dulce le dijo.
-Hija no tienes porque llorar yo siempre estaré aquí para ustedes-.
Adi en su llanto le dijo.
-lo se,lo se, eres como te recuerdo Mami-.
-Adriana Hart no asustes así a tu madre-. Dijo Peter quien estaba detrás de su esposa.
Poco después de que Matt cenara con su familia se dio un baño,se puso su pijama y se acostó en su cama con una sonrisa en el rostro. Al fin tenía una familia.
En la casa de Adi todos dormían menos una persona. Adi estaba feliz de volver a ver a su madre pero estar en ese lugar la hacia estar incómoda pues ninguno de sus conocidos y seres queridos estaba actuando normal y Seguía preguntándose como es que su madre volvió a la vida si ella murió en  el hospital cuando ella y su hermana eran niñas. Había mucho por responder que no esperaba las ganas para decírselo a Matt y que juntos buscarán una solución.