[Izuku Midoriya x Oc]

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Especial.

Mako suspiro al ver cómo— después de haber separado a Bakugou de su novio—este había quedado herido. Mas cuando Deku no mostro señales de arrepentirse de la reciente pelea.

— No voy a disculparme con Kacchan Mako-chan. —Musito bastante enojado mirando a la rubia que no contuvo que pequeños suspiros se escapasen de su boca. —No después de lo que dijo.

—Pero, Izu-chan, ¿Qué fue lo que paso? —Pregunto observando como Recovery Girl desaparecía por la puerta. Sus nervios de mal en peor.

A nadie le gustaba que su novio se peleara con su hermano.

Midoriya no respondió inmediato, quizás pensando en las palabras que usaría con su adorada novia, que al contrario de Katsuki, esta había sacado la personalidad de su padre: calmada y muy preocupada.

Sus labios se fruncieron en una mueca.

—Kacchan dijo que eras una inútil... —Respondió acariciando sus palmas y su mejilla herida. Mako le dio una mirada de apreciación y a la vez de frustración. Después de todo, Katsuki era su hermano, y aunque al rubio mayor le pareciese tonto Mako le quería con todo su corazón.

Pese a que nebulosamente ese sentimiento no fuese correspondido.

—Ya sabes cómo es Onii-chan... el, simplemente no deja de ser arrogante — Dijo con una sonrisa dolorosa.

A Izuku le hubiese gustado acariciar su cabello, mejillas, manos y labios; admirar el futuro juntos, serpentear las decisiones de sus vidas y decirle que en un futuro Katsuki estaría allí, les vería crecer y quizás formar una familia.

Midoriya quería sanar el corazón de Mako de cualquier forma.

El chico tomo sus manos, besando sus nudillos. Prometiéndose silenciosamente lograr que todas las sonrisas de la rubia se dirigieran hacia él.

—Nunca voy a dejarte sola Mako-chan—Sonrió besando sus mejillas y jugando con sus manos, más nervioso que nunca. Y aunque no fuese la primera vez que se besaban se sintió como la primera. Única y mágica.

Especial solo para ellos dos.

Y a Katsuki, quien esperaba fuera de la enfermería, la culpa se lo carcomió.

¿Tan mal hermano era?

Era momento de dejar el odio de lado, las ganas de ser más, de competir. Pero, ¿Quién le daba la seguridad de que no se volvería débil?

Así que cuando Midoriya salió de la mano junto a su hermana no evito fruncir el ceño y poner mala cara. Mako se detuvo, aguantando las ganas de correr junto a Deku.

—Oi fea, necesito hablar contigo —Dijo con voz demandante. El peliverde se puso como muralla entre los dos rubios, mirando con calma al que era su mejor amigo en la infancia.

—Está bien Izu-chan, voy a estar bien —Hablo soltando sus manos y avanzar hacia su hermano. Ambos con miradas cargadas de mayores sentimientos de los que Midoriya podía interpretar. Decidió dejarlos solos, sabiendo que ante cualquier cosa su novia le llamaría.

El pasillo quedo en un silencio incómodo para ambos hermanos Bakugou, que el mayor tema que podrían tratar era sobre la comida o los quehaceres del hogar.

Cuando Katsuki quiso hablar, Mako se le adelanto, con lágrimas en los ojos.

—Extraño a mi hermano, no te pido que volvamos a hablar como antes o que salgas conmigo por obligación. Lo único que pido, realmente, es que acaben los problemas entre tú y Izu-chan, por favor —Rogo con una reverencia bastante derecha.

—No voy a perdonar al maldito de Deku —Musito, acariciando sus cabellos rubios —Tampoco voy a golpearlo, o al menos no tan seguido... sobre lo de extrañarme, diablos, ¿Qué mierda? No voy a estar aguantando que hables conmigo y te besuquees frente a el , ¿oíste?

Mako soltó una risa empapada de lágrimas, corriendo a abrazar a su hermano. Sabiendo que esa era la manera de Katsuki para remediar las cosas entre ellos. Y tarde o temprano, de alguna u otra forma, Katsuki debería acostumbrarse a Deku.

Tan solo debía esperar. 

Boku no hero [escenarios]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora