Blossom estaba harta.
No podía seguir aguantando esa situación.
Sabía que no era mutuo... Entonces, ¿Por que no podía dejar todo atrás?
La respuesta es sencilla: Brick Him, no es tan fácil de olvidar.
–Por favor...– el joven hizo pucheros va usando ternura de parte de la muchacha.
–Bien– dijo rendida–. Pero si algo sale mal, es tu culpa.
El juego era en pareja. Una real. Debían estar agarrados todo el tiempo de las manos y hacer distintas actividades juntos. La pareja ganadora, se llevaría a casa una noche en el mejor restaurante de la ciudad para dos personas.
–Queremos concursar por favor– dijo Brick.
Una vez todo listo, sus manos fueron amarradas con una soga dura y seca.
Blossom sólo podía sentir corrientes de electricidad y estrellas en su campo de visión. Ella, estaba de la mano. Con él. Con Brick.
¿Era un sueño? ¿o no?
–El primer reto consiste en tomarse una foto juntos con las poses que les daremos. Todo esto con las manos agarradas.
La primera foto salió un fracaso. Blossom quedó encima de él, recostada sobre su pecho y la mano libre estaba sacando la foto. Brick debía sostener a Blossom con un agarre de caderas en el aire. Todo con una mano.
–Hay más fotos, si esas le salen bien podrán seguir en la competencia– les sonrió una muchacha.
En la siguiente foto ella debía estar por encima de él, mirándolo a los ojos. Brick agarraba la cadera de su supuesta novia con un poco de torpeza.
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–¡Bien! ¡salió perfecta!– Blossom miró a Brick emocionada.
La penúltima foto consistía en que él le de una flor, con la misma mano donde tenían las esposas. Ella debía cruzar los brazos sobre su pecho, mirando la flor.
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–No me siento cómodo haciendo esto– dijo Brick–. No es por ti, Blossom. Es sólo que...
–No hace falta que lo digas, gorra. Yo también no me siento muy cómoda haciendo esto. Y tampoco es por ti. No lo tomes a mal, pero no... te veo con esos ojos.
Mentira.
-Que bueno que lo dices... mis amigos me decían lo contrario. Me siento mejor ahora que sé la verdad- suspiró.
–No hay problema Brick– sonrió.
–Pasaron a la siguiente prueba– dijeron–. Ahora, la siguiente es una carrera de obstáculos.
Dos vueltas a un camino de tierra donde estaban repartidos distintos objetos para dificultarlos.
–Brick, ten cuidado. Ahí hay una trampa para osos.
–¡Mira, Bloss! ¡allá está! ¡es ella!
–¡Brick, mira el maldito camino!
-Está preciosa...
–¡Brick!
–¡Está mirando para aquí! ¡rápido esconde tu mano...!
Blossom se tiró arriba de la trampa para osos para que a su amado no le suceda nada.
–¡Bloss!– gritó Brick.
Oh no.
Toda la salida estaba arruinada.
Por su culpa.
–¿Estás bien, moños?
No respondió. No podía... el dolor la dejó sin habla.
Brick quitó la trampa de su pie, y la levantó. Estaba sangrando.
–Gorra– susurró– quiero ir a casa. Si quieres puedes quedarte aquí, pero yo... me iré. Lo lamento.
La abrazó.
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Razón número 8: Te envío regalos,y tú no dices nada. Te envío mis sentimientos, y a ti no te importan. Te envío todo de mi, y tú prefieres todo lo de ella.
n/a: dos capítulos en un día !!! 😊 ¿Les va gustando?
