Como todo adolescente, las hormonas llegan a nublar el juicio, mucho más teniendo un lindo novio, presidente del consejo estudiantil, con la llave maestra para todas las aulas.
-Vamos Karamachu~, seguro te ves muy lindo con ese traje.
Con las mejillas rojas y tratando de hacer más larga la falda a tirones miro al de ojos rojos sentado frente a el en su silla presidencial.
-Esto es demasiado Osomatsu.
-Esto no es nada mi dulce presidente.
Sacó su móvil para colocar una sensual melodía, Lady Marmalade, mirando con lascivia al ojiazul frente a el.
-¿E-en serio?
El asentimiento de su novio lo hizo sonrojar de sobremanera y tomando una bocanada de aire comenzó a mover sus marcadas caderas, derecha a izquierda, sus manos pasearon por el contorno de su uniforme femenino, las largas medias deleitaron al ojicarmesí, le dio la espalda siguiendo el ritmo de la música moviendo con más fuerza sus caderas dejando a la vista su bien formado trasero gracias al basquetbol, la parte superior se alzó dejando a la vista la curva de su cintura y con una mirada suplicante alzó la falda por completo mientras sus manos acariciaban su nuca con lentitud enredando sus dedos entre sus cabellos.
Osomatsu ya tenía una prominente erección mordiendo su labio inferior aguantando las tremendas ganas de saltarle encima a su novio para follarlo de una vez por todas y deslizo su mano derecha a su miembro para masajearlo, si que era masoquista.
Observo como el de ojos rojos se acariciaba moviendo nuevamente sus manos por sus piernas hasta llegar a sus muslos donde jugueteo con ellos separando estos dejando a aquellos traviesos ojos observar la fina lencería femenina de encaje rojo separar su rosada entrada de la vista ajena. Ante la última parte de la canción el presidente del consejo estudiantil quedó con las manos sobre su pecho sintiendo el fuerte golpeteo de su corazón.
-¿Porque no se sienta en mis piernas?
Volteó y miro como el ojicarmesí palmeaba sus piernas con una sonrisa burlona y esta se ensanchó aún más al ver como el presidente del consejo estudiantil obedecía sus palabras sentándose con delicadeza sobre su regazo, pronto sus manos no resistieron en meterse bajo la falda del uniforme escolar para acariciar sin descaro alguno su trasero apretando este, moviéndolo y rozando sus dedos contra su entrada.
-Mngh.
Reprimió los gemidos hasta sentir la lengua del contrario pasar por su cuello y detenerse en su oído.
-No te contengas.
Mordisqueo su oreja con afán lamiendo esta lentamente mientras su dureza de frotaba contra la del ojiazul, los suspiros y gemidos fueron en aumento ante los furiosos roces del ojicarmesí que parecían calentar a propósito su entrada arrancando gemidos obscenos de sus labios.
-Si te vieran así, ¿que pensarían presidente?
El miedo detuvo por un momento su excitación, no sabía que clase de persona podría ser Osomatsu, si habían empezado esa relación de por si errada al ser ambos chicos y de muy distintos mundos es por el mayor de ojos rojos que siempre estaba ahí para el, ya sea molestarlo o brindarle ayuda. Fue deslizado hasta quedar de rodillas frente al bulto que se formaba en los pantalones del ojicarmesí que no tardo en sacar su miembro mirando por primera vez este tragando grueso al verlo de un considerable tamaño, húmedo y con las venas resaltando a su alrededor.
-¿O-Osomatsu?
-Vamos, ¿porque no lo pruebas Karamachu?
Tomando su miembro deslizo el glande por su labio inferior dejando su pre-semen sobre el labio del menor sintiendo una dolorosa punzada en su miembro ante su enorme excitación. Con las manos temblorosas tomó el miembro con ambas manos y lamió lentamente alrededor sintiendo lo caliente del miembro que sostenía, después como había visto en múltiples películas para adultos comenzó a introducirlo lentamente a su boca resintiendo el sabor de aquel líquido, era salado y dulce, un sabor un tanto desagradable debido a su inexperiencia, con cuidado lo fue reemplazando con su saliva para hacer más llevadera la felación, comenzó a moverse de adelante hacia atrás, chupo una parte arrancando fuertes gemidos del chico con uniforme negro, bajo hasta sus testículos para lamerlos escuchando como las uñas del ojicarmesí se deslizaban por el descansa brazos de la silla, de repente fue alejado del miembro ajeno con un tirón de cabellos para ser besado con total lujuria mientras era tomado por los brazos para ser alzado sin romper el beso y puesto en el escritorio boca arriba, su ropa interior fue retirada sin ninguna clase de delicadeza.
-Masturbate para mi Karamachu~.
Aquella sonrisa denotaba las ansias por poseerlo, pero Osomatsu era masoquista, lo sabía.
-Ah, ahhh.
Lentamente y alzando la falda que le habían hecho ponerse comenzó con el vaivén sobre su miembro usando su mano derecha abriendo más las piernas dejando expuesta su entrada que se contraía de forma ansiosa.
-En verdad eres muy lascivo.
Separo con fuerza las piernas del ojiazul para empezar a frotarse contra su ansiosa entrada soltando gruñidos de placer ante la erótica escena, lamió dos de sus dedos introduciendo uno en aquel apretado orificio sonriendo ante el lastimero gemido del ojiazul.
-Shhh, pronto veremos las estrellas juntos Karamachu.
Después de la debida preparación comenzó a introducir lentamente su miembro observando con total atención como este se perdía en las entrañas del ojiazul, su cuerpo pedía arremeter con furia su interior, dejarlo sin caminar, pero su cabeza aún se mantenía un poquito fría dictando que no lo hiciera o se iría a la sala de castigos quizás hasta la universidad. El presidente por su parte estaba sunergido en la sensación de dolor y placer a partes iguales, su respiración dolía y quemaba, alzó la mirada encontrándose con una erótica vista, siendo esta su novio con dos gotas de sudor recorriendo su rostro, sus mejillas rojas y una sensual sonrisa con sus ojos entrecerrados, alzó las manos para jalarlo por las mejillas besandolo mientras este comenzaba a moverse lentamente. Falta decir que el aula terminó por ser un concierto solo para dos, los rasguños, las súplicas por más, las pieles chocando mutuamente, los muchos te amo y las lenguas danzando entre ellas por ver quien dominaba los besos acompañaron a aquellos protagonistas que ante todo el esfuerzo físico simplemente decidieron hacer uso de sus prendas como un futón para descansar.
-¡Wow! Osomatsu parece que te saltó un gato para arañarte la espalda.
El pelirosa miro a su compañero de bromas con total sorpresa tomando una foto para enseñarla al ojicarmesí-
-Joder, si que están rojas.
Sonrió de lado ante la fotografía preguntandose como estaría el presidente.
-¿No siente calor presidente?
El ojiesmeralda sabía que se estaba asando por dentro.
-Por supuesto que no my dear Choromatss~.
El ojiamatista por su parte solo bufo desviando la mirada.
-Los chupetones se te notan Kusomatsu.
Un chillido y miles de negaciones salieron de los labios del ojiazul mientras que el de ojos esmeralda le daba un largo sermón acerca de las consecuencias de una relación sexual prematura.
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30 días OsoKara
FanfictionCambie de pareja porque yolo, ñejeje. Créditos del fanart: Mone/Pixiv Créditos del edit: su servilleta 💕