Catorce.

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"31 de diciembre.

Querido diario sé que no te he escrito desde hace unos días, he estado con mi abuelita en el hospital, no soporto estar solo...solo le pido al nuevo año que mi mamá y mi abuela se curen pronto para que regresen.

Hoy Eddy me ha invitado a su casa, ya ha regresado de sus vacaciones con su familia en España. Me ha dicho que tiene mucho que contarme.

También estoy deseando ver a mi príncipe, me muero por empezar las clases de nuevo...

Louis seguía leyendo con interés en la soledad de su habitación, cuando de repente llamaron a la puerta, entonces guardó el diario bajo la almohada de nuevo y fue a ver quien era.

—¡Ah ho-hola!, ¿es-está E-ed..

—¡Hola Harry!...¿qué tal estás?...¡Oh lo siento!, Ed no está.

—Que ra-raro, me di-dijo que vi-viniera a esta ho-hora.

—Bueno pues pasa. Seguro que estará al llegar—dijo Louis amablemente.

El rizado miró a todos lados muy nervioso y luego entró.

—Ven siéntate— habló de nuevo el ojiazul señalándole la silla del escritorio, mientras él se sentaba en su cama.

—¿En se-serio no te mo-molesto?—habló Harry sonrojado.

—No, tan solo leía. Bueno y cuéntame, ¿que tal te va?, ¿Qué tal la canción?, ¿cuando te toca actuar?.—preguntó Louis muy intrigado, mirando al nervioso chico tan malditamente tierno que tenía enfrente.

—Si emm.... Ed-Ed... dice que ya estoy listo pero y-yo no lo creo. N-No pienso que mi voz sea tan he-hermosa como él dice....emm so-solo lo hace po-porque es mi amigo—tartamudeó el ojiverde ya más calmado, aunque evitando mirar directamente a Louis.

—¿Bromeas?, ¡pero si eres increíble—dijo Louis sorprendiendolo— tienes una voz especial y compones muy hermoso. Seguro que llegarás muy lejos en la música, ya lo verás.

—Gra-gracias eres muy a-amable Lou-Louis.

—Mira, hasta mi nombre suena más bonito con tu voz—sonrió Louis.

Al escuchar eso Harry levantó su vista y Louis se le quedó mirando, entonces se hizo un silencio, sus miradas se habían cruzado y era como si el mundo se hubiese detenido.

El ojiazul olvidó por completo que no estaba hablando y que Harry era un chico, tan solo podía mirar los hermosos y profundos ojos verdes frente a él, los cuales lo miraban brillantes y expectantes, de repente se sintió como si estuviese viendo algo mágico.

—¡Oh Harry!, ¡ya estás aquí, perdona el retraso!, ¿nos vamos?—Habló el pelirrojo tras abrir la puerta.

—¿A do-donde váis?—preguntó Louis casi sin pensar.

—Ah pues he invitado a Harry al cine y a cenar. Hace unos días que fue su cumpleaños y no hemos podido ir a celebrarlo hasta hoy.

—¡Oh vaya, felicidades Harry!—exclamó el ojiazul levantándose y abrazando a Harry en un impulso.

—¡Gra-Gracias Lou-Louis!—exclamó muy sorprendido el ojiverde.

—¡Bien...emm hasta luego!—dijo Ed.

—Hasta luego!...¡que os divirtais.

Louis corrió al baño y se miró al espejo como si no se reconociera.

—¿Que ha sido eso Louis?, ¡Y- Yo no abrazo a desconocidos!, ni me quedo embobado mirándolos fijamente, ¿qué me está pasando?, ¿Por qué actuó así con Harry?— se preguntó buscando respuestas en su reflejo del espejo.

Luego de un rato intentando descifrarse a sí mismo, se refrescó echándose agua fría en la cara y luego volvió a tumbarse para seguir leyendo.

"2 de Enero.

Ayer he ido a cenar a cada de Eddy...su familia es encantadora. Su mamá es muy cariñosa y atenta, su papá es muy amable y su hermanita es muy dulce.

La comida estaba muy rica y luego me quedé a dormir en su cuarto. Es muy lindo...él tiene muchos instrumentos y pósters de sus grupos y cantantes favoritos.

Fue muy bueno volver a sentir el calor de una familia, con un papá y una mamá, todos juntos disfrutando de una hermosa velada.

Hoy he vuelto a comer con ellos y me han dicho que puedo quedarme el tiempo que quiera con ellos, hasta que vuelvan al trabajo en California.

Por eso Eddy duerme en su fraternidad pues sino estaría solo en su casa durante lo que duran las clases.

Estoy preocupado pues hoy me ha dicho que sus padres quieren vender la casa y trasladarse definitivamente a California, él me dijo que ama esta Universidad y quiere estudiar aquí los cuatro años pero también ama a su familia... le pagarán una habitación si definitivamente decide quedarse a estudiar la carrera.

Ojalá yo tuviese ese dinero, me iría de aquí... odio estar solo. No sé lo que haré cuando mi abuelita se vaya. Además pronto será ni cumpleaños y tendré dieciocho, no me gusta crecer. Quiero que mi mamá se cure cuanto antes y regrese, la necesito mucho...

44. El diario-Larry Stylinson (Terminada).Donde viven las historias. Descúbrelo ahora