Temor De Latinos Y Algo Floreciendo

4.3K 359 189
                                    

Voy aclarar algo esto son dos capítulos por eso hay 2 títulos
♦esto es lo que divide un capitulo del otro espero lo disfruten, mi imaginación estaba a full

Estepha llego hasta la cocina donde estaba todos los estudiantes de nami-chu limpiando el lugar, ella paso en dedo por una de las tazas y observo polvo en ellas, todos tenían miedo incluso algunos de los sirvientes que la conocían le temían en ese momento.

Estepha tenia en sus manos una de las armas mas antiguas, la que existían desde tiempos inmemorables, las cuales educaron a todos los niños y jóvenes latinos, un arma que solo una madre poseía, capaz de hacer temblar a cualquier persona que llegara a ver esa arma.

Así es damas y caballeros la tan conocida y afamada por todos los latinos, conocida como la chancla, un objeto de hule que se utiliza para estar en la casa, así lo describirían otras personas, pero los latinos y los niños te diría que es una arma que no importa cuanto corras o supliques esta te golpea.

Capaz de alcanzar mas de 200 metros de distancia de su objetivo, como un boomerang que te golpea y regresa a la mano de su dueña, te deja un moretón como una advertencia nunca lo vuelvas a hacer.

De todos tamaño y colores, solo las madres ha podido usar esta arma y poder que conlleva una gran responsabilidad, ningún niño ha podido en toda la historia poder desafiarse a una madre con esa arma.

Tienes suerte si solo logras escapar con solo un moretón, al día siguiente amaneces con un dolor en la zona afectada, uniéndose así al club de los niños corregidos.

— Polvo — hablo Estepha mientras pasaba su dedo en la mesa de la cocina — limpien — ordeno con chancla en mano

— Si — contestaron los estudiantes de nami-chu asustados

— Vaya que es efectiva esa arma — comento el hitman bebiendo su expresso

— Lo se — hablo Estepha — ¡Tengo el poder de miles de madres en mi mano! — chillo mientras los sirvientes suspiraban

— ¿alguien ha visto al décimo? — pregunto Hayato entrado en la cocina

— Kufufufu tampoco esta alondra kun — comento mukuro tomando unos chocolates de la repisa

— Tsuna esta descansando y hibari, pues todos sabemos que a el no le gustan las multitudes — respondió Estepha

— Entonces iré — hablo Hayato pero fue interrumpido por Estepha

— Solo dejenlo descansar — hablo la chica mientras se recostaba en la pared — se merece un descanso, siempre esta firmando papeleo, evitando peleas entre las mafias, entrenando — prosiguió mientras escribía en una libreta — evitando que byakuran viole a mukuro, estar al pendiente de todo aquí mientras esta en Japón y ahora escapar de estos — concluyo señalando a los estudiantes quienes la miraron molesto — ¿¡Qué?! — grito a punto de lanzar la chancla — ¿¡tienen un problema? — pregunto enojada

Todos negaron asustados, uno de ellos ya había probado el poder de la chancla y no quería volver a hacerlo.

—Kufufufu ¿Porque tan molesta? —pregunto era raro normalmente ella tarareaba feliz de la vida

—¡Osaron destruir la cocina! — grito molesta recordando como todo era un chiquero

— Nosotros siempre hacemos eso, no le veo el problema — hablo yamamoto después de todo era cierto

— Si, pero solo ustedes tienen mi autorización para destruirla ya que me recompensan con nuevos electrodomésticos — aclaro Estepha

— ¡Eso es extremadamente cierto! — grito Ryohei

Es el décimo vongola Donde viven las historias. Descúbrelo ahora