Mini Daehwi • JinHwi

01 • [ Shit! a room... ]

—¿Lee Daehwi? —preguntó cuando ese niño terminó de hablar.

—Sí, Lee Daehwi. —afirmó aún sosteniendo aquel gigante pantalón— Esto... disculpe, ¿me puede dar un pantalón más pequeño? Este es muy grande.

—Oh sí, después iremos a comprar pantalones, pero primero me tienes que acompañar, ¿está bien?

—¡Claro!

Jinyoung envió un mensaje al grupo diciendo que ya había encontrado a Daehwi. Ambos fueron directamente a la sala de ensayos, pero claramente con cuidado, no quería imaginarse qué pasaría si lo encontraban con un niño que era totalmente parecido a Daehwi.

—¡Dae...! ¿y ese niño? —preguntó Minhyun mirando al pequeño niño que tenía Jinyoung en sus brazos.

—Ah, es una larga historia, sólo diré que es Daehwi... en fin, ¿cómo lo sacamos de aquí? —una vez dejó al niño en el suelo, Jaehwan se acercó a él y empezaron a jugar.

Se le hacía raro el comportamiento de Jaehwan, parecía que él ya sabía sobre el mini Daehwi.

—No podemos simplemente salir como si fuera lo más normal del mundo. Podríamos pedirle ayuda al manager, ¿no creen? —en seguida sintió las miradas de sus compañeros en él, todos con el ceño levemente fruncido, mientras que Daehwi lo miraba con una sonrisa divertida.

—Sería una pésima idea, Minhyun.

Quedaron varios segundos en silencio. El más pequeño de todos no entendía nada, solamente habían dos pensamientos en su cabeza: el baño y la comida.

—Necesito ir al baño. —comentó el más pequeño.

—¡Jinyoung! —gritaron todos al mismo tiempo.

Sabía que era inútil discutir con ellos, así que le tomó la mano al pequeño y caminaron hacia el baño, que se encontraba lejos -demasiado-. No lo mal entiendan, no era porque Jinyoung era flojo, sino que se le venían pensamientos en donde lo encontraban con el niño y, a nadie le gustaría saber qué podría llegar a pasar si lo descubren.

—Aquí es, estaré afuera.

Pocos minutos pasaron, parecían horas, horas y horas. Era una tortura, no escuchaba ni un pequeño ruido proveniente del baño, ni siquiera el sonido de eso cayendo en el retrete.
Empezó a preocuparse, ¿y si le pasó algo? Quizá sonará absurdo pero, ¿qué tal si se ha ido por el retrete? Digo, puede pasar... ¿no?
Decidió abrir la puerta del baño lentamente, y lo único que vio fue un niño pequeño con ropa gigante dormido en la tapa del retrete. Su boca estaba levemente abierta, y de ella salía un hilo de baba.

—Oh dios... mamá, ayúdame. —pidió en voz baja.

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—Retomemos. ¿Dices que te has ido lentamente hacía el auto del manager y te has llevado a Daehwi porque éste se había dormido? —habló Woojin mientras trataba de escuchar a su compañero— Claro, lo que digas... el manager te matará. —se logró escuchar un pequeño grito que hizo sobresaltar al pobre chico— Está bien, ya entendí.

Sus compañeros lo miraban esperando respuesta, éste suspiró y buscó su compañera para después ponérsela.

—Chicos, tenemos que ir a casa rápido.

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—¡Ahhh! —fue lo único que salió de la boca del niño en ese momento.

Miró a su alrededor y se encontró con una bonita habitación, habían camas de dos pisos. Le resultó extra el hecho de que esté en otro lugar, pero la preocupación -si es que se le puede llamar así- no duró mucho, ya que empezó a sentir hambre.

Bajó cuidadosamente la cama y empezó a caminar por toda la casa, sólo veía habitaciones.

—Una habitación por aquí, una habitación por allá, una linda habitación podré encontrar. —murmuró mientras salía de otra habitación— Supongo que esta no es otra habita... ¡es que joder! -gritó al encontrar otro habitación completamente igual a las anteriores— Uy, ¿eso he dicho yo? Mi hyung me castigará si se entera.

Siguió caminando en silencio hasta que por fin había conseguido entrar a la cocina. Abrió la heladera y en ella encontró muchísima comida.

—Un helado no me hará mal. —una sonrisa traviesa se formó en su rostro mientras sacaba el bote gigante de helado.

Dejó ese bote de helado en el suelo y buscó una cuchara, mágicamente encontró una pequeña. Se sentó en el suelo y comió tranquilamente se helado.

—¿¡Hyung!? —gritó. Al no recibir respuestas volvió a vagar por esa casa, se encontraba tan aburrido.

Se le ocurrió una idea. Primero buscó una silla de la sala, después la llevó al baño y la dejó frente al espejo. Con cuidado se subió a aquella silla y empezó con su idea. Dejó un lindo dibujo en el espejo del baño y se fue como si no hubiera pasado nada, pero no sin antes dejar su firma "LEE HERMOSO HWI".

¿Cómo resumir todo lo que Daehwi había hecho? Sin duda alguna, Wanna One tenía mucho trabajo para limpiar una pequeña y sencilla casa.

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Wanna One había llegado a casa, encontrándose con yogur derramado en el suelo, dibujos en partes de la casa, libros en el suelo, cables enredados y hojas también tiradas en el suelo. Claro, esa era sólo una pequeña parte del gran desastre que había en esa casa.

Todos se dirigieron a la habitación de Jinyoung para poder recibir una explicación, pero lo encontraron dormido y con Daehwi en sus brazos.