Christopher había sido muy amable al llevarme hasta la iglesia, estaba muy nervioso, no había ensayado mis votos, así que escribí unos rápidamente.
Zabdiel: Gracias a mi bastardo Padre quien nos une en este sagrado tormento.
Chris: No puedes decir eso en una iglesia hermano.
Zabdiel: Lo sé. - arranque la hoja y la tire en los asientos traseros.
Chris: Lamento decirte que ya estamos aquí. - mire hacia la iglesia, y los nervios aumentaron en un 100 por ciento más. Había desconocidos por todos lados.
Richard: ¡Oye! - dijo uno de los empleados de mi padre, y gran amigo mío también. - Tu padre te espera adentro. Quiere hablar contigo.
Chris: Dejare el auto bajo aquel árbol. - dijo y señalo dicho árbol. - Te alcanzo en un rato.
Zabdiel: Esta bien, vamos Richard. - dije saliendo del auto y siguiendo al moreno.
Y ahí estaba el viejo, parado frente al altar, me sorprendería que estuviera rezando, al llegar lo pude encontrar con los ojos cerrados.
Sr. De Jesús: No lo vayas a estropear. - dejo salir sin más ni más. - Si se te ocurre alguna estupidez, olvídate de todos los lujos y comodidades.
Zabdiel: Lo se padre, me has hecho esa amenaza cientos de veces. Ya hasta me la sé de memoria.
Los invitados comenzaron a pasar, se sentaron y Christopher, siendo uno de los padrinos, se sentó hasta adelante. Me regalo un gesto de apoyo a lo que yo recibí con una sonrisa.
La típica melodía comenzó a sonar, era estresante, y la novia comenzó a entrar por la puerta grande, acompañada de su padre. Hice una sonrisa bastante fingida que hasta Christopher y Richard pudieron notarlo, me hicieron un par de gestos, diciendo que dejara de hacer eso, a lo que yo asentí y sonreí normalmente. ¿Ready? La farsa estaba a punto de dar inicio.
| Narra _ _ _ Vera |
Joel se había portado muy amable estos últimos meses, había estado muy cariñoso últimamente... debo confesar que soy una REAL ZORRA. Después de haberlo hecho con Zabdiel, fui directamente a los brazos de Joel... donde sínicamente también lo hice con él. Desde entonces, él ha estado más cercano conmigo. Quizá cree que soy de su propiedad ahora. ¡Vaya! Me estoy saliendo del tema. El punto es que tal vez lo mío con Joel vuelva a funcionar.
Mire el reloj, faltaba poco menos de 40 minutos. Y adiós Estados Unidos, hola nueva vida sin Zabdiel de Jesús. No sabía si llorar o estar feliz.
Joel: ¿Qué piensas? - pregunto Joel sorbiendo de su café.
_ _ _: Mi vida lejos de aquí. - sonreí.
Joel: Eso es sano. - sonrió bajo.
| Narra Zabdiel de Jesús |
Lo único que tienes que decir es "Si" concéntrate en eso Zabdiel.
Padre: Zabdiel de Jesús, ¿Juras amar, respetar y cuidar a Ximena hasta que la muerte los separe? - vaya... me quede en blanco, tome mi saco y recordé el sobre, ¿Esto era una emergencia? Lo saque del bolso y mire a Ximena, quien me hacía varios gestos. Abrí el sobre y saqué un papel que decía "Si has abierto este sobre, es porque por fin tu cerebro está carburando, sabes dónde está el auto. Suerte en Londres con _ _ _"
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