La boda.

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- Maia ¿Enserio? ¿Pero me estas viendo?

Jordan se estaba poniendo el traje de la boda, era una camisa beige con una corbata mas dorada y el traje negro.

La americana le quedaba... algo prieta en los brazos pero por lo demas estaba muy guapo.

- Pues a mi me gusta muchisimo. A demas tu estas invitado a las dos ceremonias, cuando vayamos luego a la de la manada, vistete como quieras, pero mañana vas a ir asi. - El chico bajo la cabeza y se coloco la corbata enfrente del espejo, a su lado Maia se estiro el vestido y se miro junto a el.

Era un vestido negro con franjas beige como las de Jordan. Y una cinta negra en el pelo. Iban a conjunto y muy guapos.

Jordan se giro y la atrajo hacia él, sujetandola de la cintura, y mirandola a los ojos.

- Eres preciosa.

Ella se puso de puntillas y le beso, despacio y agarrandole de la nuca. Ese tipo de besos que no deberian acabar nunca.

En la habitacion de al lado, Simon se apretaba la corbata morada, a juego con el vestido de Isabelle que se quedaba en casa. La camisa era de un violeta muy clarito y el traje de un gris oscuro.

El vestido de ella le habia dejado colgado en la percha, de la parte mas alta de la puerta. Era un vestido precioso, de palabra de honor violeta clarito como su camisa ceñido en el pecho y suelto el la parte de y con un cinturon gris en la cadera.

Se acabo de arreglar y se miro en el espejo peinandose hacia atras con gomina los rizos.

***

- ¡Jace! - la puerta de la habitacion de Jace sono y fue a abrirla poniendose los pantalones.

- Dime Alec.

- Necesito unos zapatos negros. - dijo su parabatai abriendo el armario y tirandose al suelo a buscarles.

Cuando encontro unos medianamente decentes se levanto del suelo y se los probo.

- ¿Y no se les podias pedir a Magnus?

- Queria unos zapatos negros no unos zapatos con purpurina. - dijo Alec cerrando la puerta y mirando a su amigo. - ¿no sabes vestirte?

- Es que la camisa es estrecha y los pantalones me rozan. - se quejo el rubio.

Alec le coloco la camisa y le hizo el nudo de la corbata, que en este caso era de un rosa palido y la corbata de un fucsia mas oscuro. Luego le ayudo con la americana y se quedo mirandole mientras se peinaba el pelo.

- Queda una hora, te recuerdo, la boda acaba a las dos, comemos y a las 4 sale el coche que se lleva a Luke y a Jocelyn hacia el aeropuerto. A las 5 todos nos hemos preparado y salimos hacia las fabricas de Mexico mediante un portal. ¿Entendido?

- Lo entendi ayer y te llevo oyendo repetirmelo como mil veces. - le sujeto de la barbilla y le hizo mirarle a los ojos, eran de un dorado impresionante. - La vamos a sacar de alli.

***

Clary acabo de peinar a su madre y de ponerla el vestido, parecida un princesa escapada de un cuento.

- Estas guapisima mamá. - lo cierto es que Clary no se quedaba corta, con un vestido rosa clarito. - va a ser una boda preciosa.

- Tu estas tambien guapisima. ¿Vas a saber cuidarte hasta que volvamos de Londres?

- Si mama.

- Llamame si pasa algo ¿Vale?

Jocelyn la abrazo muy fuerte y la dio un beso en la frente. Cuando Jace llamo a la puerta y dijo a Clary que la estaba esperando Luke. Jocelyn se seco las lagrimas y se coloco el pelo.

- ¿Lista? - Joce afirmo, Clary la dio un beso y fue a buscar a Luke.

Cuando Clary habia salido, Simon entro y agarro a Joce del brazo.

***

- Aqui le traigo. - dijo Maureen volviendo desde el portal que habia en la fabrica.

- ¿Te ha visto alguien?

- No, se habian ido todos ya.

Sebastian agarro la bolsa y entro en la habitacion de Isabelle. Que ahogo un grito y se intento esconder en el borde de la cama. No habia bebido mucho agua, solo lo suficiente para no morir por una deshidratacion.

- Ponte esto. - dijo el chico lanzandola la bolsa encima de la cama.

- ¿Como? - le pregunto alzando las manos para que viera las cadenas.

Sebastian se acerco a ella y la recorrio con la mano la pierna desde los tobillos hasta la parte mas alta del muslo. Ella chillo y empezo a temblar. Y él se lanzo a su boca y la mordio el labio, cuando ella le dio un cabezazo.

- ¿Una ultima vez? - La desabrocho los pantalones y se les arranco.

- No, Sebastian por favor...

- Lo siento, pero me gusta despedirme de las cosas. Y despues te soltare, te vestiras y atravesaras el portal. Y nosotros contigo. - la tapo la boca con la mano para que no chillara.

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