HETERO - l.s

Lou

Luego de la conversación que había tenido con Harry, el rizado había salido pitando de la cafetería, parecía no tener muchas intenciones en volver a aparecer por allí en mucho tiempo.

Louis llegó a casa, con Eleanor. Y luego de hacerle el amor un millón de veces, cayeron rendidos. Louis estaba exhausto.

–Lou.–El susurro de su novia fue tan bajo que apenas pudo escucharlo.–Me he dado cuenta del chico que te sigue.

–Ah, ya. Me lo esperaba. –Louis se removió incómodo. ¿De verdad quería hablar de ese pesado, luego de un momento tan bonito?–Eleanor, eres una matapasiones, que lo sepas.

Soltó una suave carcajada y Eleanor se trepó sobre él.

–Me da muy mala espina.–Suspiró y posó sus manos en el pecho del ojiazul.–¿Que opinarías si me opero la nariz?

Louis quería mucho a Eleanor, eso no lo ponía en duda. Pero la curiosidad de qué querría el rizado de él lo abarcaba por completo.

Probablemente Eleanor no debería haber sacado el tema, porque parecía que iba a sofocar a Louis por un tiempo.

–¿Me estás escuchando?

–Si, Eleanor. Tú nariz es perfecta, no tienes que operarte nada.

Eleanor frunció el ceño.–No hablamos de mi. Hablo de ti.

–¿Qué le pasa a mi nariz?

Rodó los ojos. Cuando Louis quería podía ser muy terco.

–Hablábamos de Harry, ese chico que te acosa.–Louis asintió, comprendiendo.–Decía que me gustaría que no hablaras con él.

Louis asintió de nuevo, entendía el punto de Eleanor, aunque esperaba que ella lo entendiera cuando la ignorara y hablara con Harry.

Quería a Eleanor, pero a la vez quería saber más de Harry. Y eso nadie lo podía cambiar.