30 de Febrero 《InkError》▪30 Días De OTP▪

¤Día 16¤

La duda emergía en ambos seres desde la tarde anterior, en la que, sin poder explicárselo, despertaron con un reconfortante calor cubriendo sus cuerpos, como si alguien los estuviese apoyando, una sensación tan agradable que parecía abrazarlos y decir "Jamás estarás solo". Sin embargo, fue la decepción en sus rostros la que destruyó la burbuja de paz que se formó en una acción, pues, al abrir sus cuencas, ambos se encontraron con la desagradable (según Error, pero su verdadero pensamiento nunca será revelado) sorpresa de ver a su enemigo acurrucado a su lado, enseguida comenzaron las acusaciones por acciones no verídicas.

No obstante, ante el griterío y el show que el destructor le estaba armando sin pruebas para confirmar la más absurda de sus teorías, Ink decidió parar todo, afirmando que Error le había golpeado, y que ambos comenzaron una pelea, en la cual, por el agotamiento, el glitch comenzó un reinicio automático, y él perdió el conocimiento por la misma razón. La explicación fue suficiente para lograr que el ser de colores negativos calme su ira.

Ahora estaban ambos allí, en el blanco Anti-Void, decorado con ciertos toques de pintura que el guardián decidió darle para una mejor comodidad para él. Eran grandes las ideas que surgían por su cabeza, pues algo no quedaba del todo claro, más para Ink que Error.

"¿Por qué?" Seguramente era lo que se repetía constantemente en su mente, y la duda podía intensificarse como también podía pasar desapercibida, pero siempre estaba allí, no importa lo que esté haciendo, la pregunta volvía a reproducirse, como disco rayado, y gritando, hasta podría jurar que aquella voz que sólo él escuchaba podía oírse por todo el multiverso.

—Hey, raro, ¿se puede saber en qué demonios estás pensando ahora? —Era un experto en destruir momentos filosóficos, sin duda lo era.

—Sí, pensaba en qué vestido ponernos hoy, yo creo que uno naranja estará perfecto para mí, ¿y tú? ¡Uno esmeralda! —Sus preocupaciones se esfumaron con gran velocidad, no había nada que su felicidad pudiese parar. —¿Te gustaría que sea largo o corto? Te verás hermoso en ambos, de todos modos.

—No me pondré vestido otra vez, Ink. —¿Y esa respuesta sin insultos? Tal vez era Error al fin asumiendo que el pintor no tenía remedio, finalmente lo estaba aceptando. —Así que descarta esa idea de tu cabecita, a menos que quieras ser un segundo Horror por el cráneo que te partiré a patadas si sigues con eso. —A su manera, por supuesto.

"Porque eres interesante, tal vez."

—En ese caso, ¡Hoy tengo una actividad preparada para ambos! Y sé que la disfrutarás tanto como yo~ —El artista tomó su gran pincel, llamando la atención de su única compañía física en el blanco lugar, quien reaccionó inmediatamente, manteniendo varios hilos listos para atacar. —¿Huh? ¡Oh, no! ¡No estoy peleando contigo, Error! —Perdía su tiempo intentando tranquilizarlo, pues el destructor no se quedaría tranquilo hasta que su contrario por fin suelte aquel gigantesco utensilio. —Sólo haré esto.

Sin más, una colcha y una manta aparecieron en unos minutos, además de un plato lleno de palomitas, esto desconcertó al glitch.

—¿Qué sucede? Creí que te gustaba ver Undernovela. El otro día estaba incómodo entre los hilos, así que traigo esto para disfrutar.

—¡Undernovela! —Exclamó, enseguida su actitud arisca desapareció, y el portal sin queja alguna abrió. —¡Al fin haremos algo interesante!

—Me dueles, Error, me dueles. —Con mano al pecho, fingió un terrible dolor. —Creí que lo nuestro era especial, y que estos habían sido los mejores días de tu vida.

—Mejor deja de decir bobadas, que te echaré con pincel y todo derechito a Underlust.

—Hum, pues no me quejaría por eso, ¿sabes? Tú, yo, juntos, allá, piénsalo. —Coqueteó, guiñando sus cuencas repetidamente. A cambio, un buen derechazo por poco y le deja sin mandíbula.