Baje del coche y me pare al frente de la gran puerta, toque dos veces una mujer muy pálida abrió.
-Hola! Eres ___? Verdad-Dijo la mujer pálida.
-Si y usted es..?- Dije sonriendo.
-Oh cariño, soy tu nueva madre- Dijo cogiendome la manos.
-H-hola, ma...má- Dije sonriendo.
-Ya te acostumbraras, pero ahora ven y conoce a tu padre y a tu hermano que talvez se vuelva tu esposo- Dijo cogiendome de la mano y caminando.
-E-esposo?- Dije sonrojada.
Llegamos a la gran sala de esa mansión, vi a un señor con barba y a un chico hermoso, de piel pálida que miraba un libro.
-Chicos.... Esta es ___ y vivirá con nosotros- Dijo mientras nos sentábamos.
-Hola ___, a mi me puedes llamar Papá si quieres - Dijo sonriendo.
-¡Min Yoon Gi! ¡Suelta ese libro ahora mismo y saluda!- Gritó la mujer pálida y el chico saltó del susto.
-Hola, soy Min Yoon Gi, pero dime Suga- Dijo el chico pálido.
-Ahora ___, te contaremos un secreto que no puedes contar a nadie ¿Okey?.- Dijo mamá
-Esta bien?- Dije curiosa
-Nosotros...- Dijo mamá hasta que Suga la interrumpió.
-Somos vampiros- Dijo mirándome.
-Oye lo quería hacer más interesante!- Dijo mamá
-V-vampiros...- estaba alucinando.
-Si humana tonta- Dijo suga
-Woooow estoy es genial!!!- Dije sonriendo.
-Que simpática- Dijo papá pero yo me desmayé.
Abrí mis ojos lentamente y mire a todas partes hasta ver el rostro perfecto de suga..
-Entonces... No era un sueño-Dije susurrando.
-No, no lo era- Dijo mientras leía un libro.
-¿Cuando tiempo dormí?- Dije levantándome.
-1 hora exacta- Dijo cerrando el libro y levantándose.
-Seremos buenos amigos ¿no?- Dije y suga me tiro con fuerza a la cama quedando encima mío.
-Auch, duele- Dije quejándome.
-Mira niña, si no me dejas de molestar no dudaré en morder tu precioso cuello, y hacerte mía- Dijo lamiendo su labio inferior.
Suga se levantó rápidamente y se fue, yo tenía mucho miedo, pero ese chico realmente me gustaba.
Comencé a recorrer la enorme casa, y inspeccionar cada habitación hasta que llegue a una puerta donde decía "No entrar" abrí la puerta y vi a suga, salía de su baño, muchas gotas caían por su hermoso cuerpo y una toalla tapaba sus partes. Yo seguí mirando, hasta que suga se dio la vuelta..
-Eres una humana mala, no se espía a los chicos desnudos- Dijo y me sonroje.
-L-lo siento-Dije y cerré la puerta.
Corrí hasta la cocinar, abrí la nevera y solo había sangre para tomar, creía que iba a vomitar. ¿Esa sangre era de humano?
-No, no es de humano es de animal- Dijo suga haciendo que pegara un brinco para luego mirarlo.
-¿Lees la mente?- Dije nerviosa.
-Si.- Dijo para luego sentarse y mirarme.
-Esto.... ¿No hay nada de beber?- Dije casi susurrando.
-No, solo hay sangre, si quieres puedes tomarla- Dijo haciendo una pequeña sonrisa.
-Esta bien- Dije tomando la jarra de sangre. Iba a soltar el líquido a mi boca pero suga grito.
-No!¿Que haces?... Los humanos no beben eso- Dijo frunciendo el ceño.
-Y entonces ¿Que tomo?- Dije dejando la jarra en su lugar.
-Vamos de compras- Dijo tomandome de la mano.
Suga me llevo hasta un supermercado y comencé a echar muchas cosas dentro de la cesta.
-¿Tanto comes?- Dijo mirándome.
-Si... Tienes algún problema- Dije con tono burlón.
Terminamos de comprar y volvimos a casa me preparé una comida deliciosa y rápidamente anocheció. Suga y yo subimos a nuestras respectivas habitaciones. Me acosté en mi cama y me quedé dormida.
Me desperté sudando, tuve una pesadilla del avión, y aún era de noche, lagrimas caían por mis mejillas, no quería dormir sola. Me levanté silenciosamente y fui hasta la habitación de Suga..
-¿Suga?- Dije susurrando.
-¿Que quieres?- Dijo molesto.
-¿Puedo dormir contigo?- Dije para luego acercarme.
-¿Quieres ser violada?- Dijo riendo.
-Tengo miedo- Dije tocando su hombro.
Suga me tomo de la cintura y me elevo para luego caer acostada a su lado.
-Ahora, duerme- Dijo cerrando los ojos.
Yo comencé a tener pensamientos de Suga besándome, y de repente me acordé que el lee mentes, ¡Mierda!
