La navidad pasó, y todo lo que hubo fue una tarjeta enviada por Baekhyun. Un regalo sencillo también. Baekhyun no había sabido qué enviar, así que le mandó tres dulces.
Debió haberse sentido mal, y tal vez lo hizo, pero mientras el tiempo transcurría, crecía la atracción en la oficina. Lo que había comenzado como miradas inocentes, con el tiempo se convirtió en algo más físico, empezando cuando Kyungsoo tomó la iniciativa y fundió sus labios con los de Chanyeol.
Y cuando Chanyeol posó a Kyungsoo en su cama, lo hizo con una voz dentro de su cabeza que le decía que el otro no pertenecía allí. La voz se mantuvo diciéndole que la cama era de él y de Baekhyun, pero nunca de Kyungsoo. A eso, Chanyeol le respondía a su conciencia razonando que Baekhyun ya no estaba allí, que estaban separados y necesitaba algo, algo que Kyungsoo podía darle y Baekhyun no.
Antes de que Kyungsoo descendiera por el cuerpo de Chanyeol, tomó el anillo del dedo anular de su mano y lo quitó, tirándolo a un lado, al suelo, donde cayó silenciosamente.
Fue bien entrada la primavera cuando Baekhyun sufrió un dolor. Empezó a notarlo cuando las migrañas que frecuentemente padecía no se iban. También se dio cuenta de que su cuerpo estaba más fatigado. Después de dos semanas intentando soportarlo con el uso de píldoras, cedió. No había mucho más en su mente sobre qué estaba mal con él excepto que pensaba que eran sólo migrañas que desaparecerían pronto, con una de las pastillas mágicas del doctor.
Fue sin esperar nada y salió sintiendo el peso del mundo sobre sus hombros, y sobre su corazón también.
Le dijeron que tenía programada una tomografía al día siguiente, y por primera vez, Baekhyun realmente no quería hacerlo solo. La primera persona que le vino a la mente fue Chanyeol, su esposo y su apoyo. Viajando rápidamente en subte, Baekhyun se dirigió al apartamento de Chanyeol, reprimiendo las lágrimas y tratando de mantener un semblante fuerte.
Después se subió a un taxi, sólo para quedarse congelado cuando el taxista le preguntó la dirección. Se dio cuenta de que no la sabía. No estaba seguro. Intentó recordarla, pero no pudo acordarse de la dirección que había conocido antes como la palma de su mano. Nervioso y molesto, incapaz de explicar aquella repentina y temporal pérdida de memoria, Baekhyun descendió del vehículo y optó por correr, porque al contrario de la dirección, Baekhyun recordaba con memoria desteñida las calles y las esquinas donde sus viajes en el pasado habían doblado.
Tenía la esperanza de que tal vez se reconciliaran y que tomaría una noche el compensar aquel año perdido tan descaradamente. Baekhyun había imaginado y esperado, pero mientras veía a Chanyeol salir de su apartamento tomado de la mano con otra persona y una sonrisa en sus rostros, se detuvo y los miró mientras todas esas esperanzas se derrumbaban.
Y como el dolor que había estado sintiendo esas semanas, sus ojos se llenaron lentamente de lágrimas, antes de gotear hasta que Baekhyun no pudo soportarlo más. Con rodillas temblorosas y los ojos cegados, dio media vuelta y se fue en la dirección opuesta. Solo.
A mitad de año, al comienzo del verano, Kyungsoo se sentó en la cama de Chanyeol, esperando a que saliera de la ducha. En su mano estaba la alianza de Chanyeol, la cual Kyungsoo giraba y giraba, inspeccionando cada aspecto y detalle. Pasó el tiempo suficiente como para que Kyungsoo se entretuviera cuando Chanyeol regresó al dormitorio.
―¿Qué haces ahí, Kyungsoo? ―preguntó con una diminuta sonrisa.
Encogiéndose de hombros, Kyungsoo sostuvo su expresión de estoicismo.
―Sólo estaba pensando. De hecho, estuve pensando en esto desde hace ya un tiempo.
Mientras se subía los pantalones y agarraba una camiseta, Chanyeol lo miró.
―¿En qué piensas? ―Cuando vio el anillo en sus manos, suspiró. ―Kyungsoo.
―Chanyeol, ¿por qué no te divorcias de él y ya? ―soltó.
―Kyungsoo, él es...
―Han estado separados por tanto tiempo ―dijo―. Su relación ya estaba más que muerta cuando te conocí. ¿Para qué alargas esto cuando ya ninguno de ustedes siente nada por el otro?
―No puedo simplemente ir y presentarle de pronto los papeles de divorcio ―respondió Chanyeol―. Necesita algo de aviso, al menos.
―Entonces dale aviso ―dijo Kyungsoo, cerrando el puño con el anillo―. De hecho, envíale a uno de esos abogados para que le dé los papeles. Eso es aviso suficiente, ¿no crees?
―Eso es...
―Chanyeol. ―Kyungsoo le echó una mirada. ―Es mejor terminar las cosas ahora, ¿sabes? Así podremos tener un comienzo nuevo tú y yo. Y luego podremos casarnos y ambos podrán seguir con sus vidas. Estás conmigo ahora, y enfrentémoslo, él probablemente tenga a alguien también.
La garganta de Chanyeol se tensó con el pensamiento de Baekhyun teniendo a otro hombre. Era difícil imaginárselo, y tocó una fibra sensible en su interior.
―Kyungsoo...
―Te amo, Chanyeol, y sé que me amas también ―musitó Kyungsoo―. Así que hazlo, por favor. Por ti y por mí. Por él. Por todos nosotros.
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10080 •ChanBaek • [TERMINADA]
FanficSu noviazgo duró solo siete meses. Su felicidad se medía en la cantidad de carcajadas que compartían, la cantidad de noches interminables que pasaban enredados en los brazos del otro y la cantidad de amor que tenían el uno para el otro. Los cortos...