Princesa

Capítulo 4 ''Esto recién comienza''

La música estaba muy alta, no podía escuchar nada más que un gran zumbido, la gente bailaba muy apretada, definitivamente este lugar estaba colapsado, al lado derecho había una barra, Dan me agarró de la mano y me dirigió hacia la barra, realmente intentar atravesar la sala abarrotada de gente se sentía como estar nadando contra la corriente o contra un tsunami mejor dicho. Después de un enorme esfuerzo logramos llegar, hacia las esquinas de toda la sala estaba mas vacío el lugar, por lo menos se podía respirar, la barra no estaba colapsada pero no había ningún lugar para sentarse. Dan se dirige hacia un sujeto de chaqueta de cuero café que estaba concentrado mirando su vaso con la mirada perdida.

Muévete- le dijo muy agresivamente – deja a la chica sentarse.

Dan, no es necesario, no debes tratarlo así. – le dije yo. El pobre tipo debió haber tenido un mal día, tenía una mirada tan triste y Dan lo trataba como basura, no tenía derecho a hacerlo. El hombre miro a Dan con los ojos tan cansados, probablemente estaba ebrio, estaba triste y se sentía abatido, él solo lo miro y lo ignoró. Volvió su mirada al vaso nuevamente.

¡Te dije que te muevas!- Dan toma al hombre de su camisa, lo levanta y lo empuja lejos. El hombre tambaleante que cayó al piso. No podía creerlo, Dan era muy agresivo si quería algo. Es extraño, en un momento puede ser toda una ternura para luego volverse todo un monstruo descorazonado en segundos.

¡Dan!-chillé. Me dirigí hacia el hombre para levantarlo pero Dan me sostuvo del brazo.

Princesa, así es mi mundo, aquí nadie tiene compasión por nadie. – me dijo.

-Entonces no me creo capaz de estar en tu mundo.

-¿Y que? ¿Te vas a ir? Te recuerdo que no puedes.

<<Mierda, es cierto>> pienso. Odio no poder tener el control de mi misma, me frustra. Gruñó.

Siento a Dan detrás de mí, posa sus manos en mi cintura y me empuja hasta la silla para que me siente. <<Joder, su contacto tan repentino hace que mis sentidos se pongan alerta>> Se acerca a mi oído y me susurra

-Amo como gruñes.

Y creo que justo en ese momento morí, todo mi interior se volvió líquido, sentía como si estuviese flotando, no entendía como un completo idiota podía hacerme sentir sensaciones que jamás había experimentado antes y al mismo tiempo me hacía odiarlo por un simple hecho de que algo dentro de mi lo rechazaba totalmente. <<Recuerda que es una actuación, piensa en todas las chicas a las que él les dijo esto>> pensé. Era cosa de recordarme eso y la magia se acababa, claramente yo no era la única, él podría tener a cualquier chica de este lugar en un segundo y yo no iba a ser una más, yo no era como ellas, no era como el resto.

Me volteo para hablarle pero no me percato de su cercanía por lo cual quedamos frente a frente, muy cerca, podía sentir su respiración con la mía, invadiendo todo mi espacio personal, claramente a los dos nos sorprendió pero fui yo la primera en romper el contacto.

Le pongo una mano en el pecho y me impulso hacia atrás mientras lo empujo para que se aleje.

-Bueno ¿y ahora que hacemos? – le pregunto.

-Pedir algo para beber, ¿para que crees que te senté?

-Tan agradable que eres – le digo en tono de sarcasmo.

-Y eso que estoy en mis mejores días princesa.

Dan hace un gesto con la mano y el barman viene inmediatamente, al parecer se conocen porque se saludan como viejos amigos, el barman dirige su mirada de Dan a mi repetidas veces entonces mira a Dan y le pregunta