Princesa

Capítulo 2 ''Yo siempre consigo lo que quiero''

Llegué a la casa de Julie exaltada, no podía parar de pensar en Dan, si lo pensaba bien era un buen chico, me había salvado y no tenía por qué hacerlo, pero otra parte de mi cerebro me decía que era un arrogante egocéntrico que no sabía tratar a una mujer suavemente después de una situación impactante, pero lo que él hizo por mi era un gran gesto que jamás olvidaría, pero me trató mal después, tal vez lo hizo para que no le diera cargo de conciencia pero en realidad no quería hacerlo, o tal vez me vio y le di pena pero cuando recupere la conciencia le fui desagradable y tomo esa actitud conmigo, pero ¿tan mala soy?

No creo ser tan mala.

Llego a su puerta y toco, primero retare a Julie por mandarme a mi segura violación y por no decirme a lo que iba y después le contaré sobre Dan.

¿Cam por qué demoraste tanto? ¿Y por qué vienes sin blusa?– Julie me abrió la puerta y ya me estaba reprochando a susurros, no podíamos hablar fuerte, sus padres estaban durmiendo.

A mi no me vas a venir a retar, escúchame bien que casi me matan por tu culpa – susurré, ahora que la veo me da mucha rabia saber que casi me envió a mi violación y muerte.

¡¿Que?! Ven, ven y cuéntamelo todo arriba – me dijo y me agarró de la mano para llevarme corriendo por la escalera. Por mas que los padres de Julie estén durmiendo ella no sirve para ser silenciosa. Me llevó a trompicones por las escaleras hasta llegar a su habitación. Para saber que Julie quería que le fuera a buscar cocaína su habitación tenía un aspecto bastante inocente para una cocainomaniaca. Esto me demuestra que las apariencias engañan y que no sabía todo sobre mi mejor amiga. Saber esto hace que sienta una punzada en el corazón. Pensé que cada una lo sabía todo de la otra, en eso se basan las mejores amigas, pero al parecer me equivoque y eso es lo que voy a conversar con ella ahora.

Me siento en su cama de piernas y brazos cruzados abrazando una de sus almohadas de corazón, ella cierra la puerta de su habitación sonriente pero al ver mi cara de molestia sabe que esto es serio.

Ok lo siento, debí decirte, y te iba a decir cuando llegaras pero al parecer ya te enteraste, no? -  me dijo. Cuando está nerviosa habla muy rápido. Creo que es la excusa más estúpida que he oído, no vale para todo lo que tuve que pasar ni menos si la estoy ayudando a seguir con un vicio que no se desde cuando lo tiene.

Es tanta la rabia que siento hacia ella en estos momentos que exploto.

¿Debí decirte? Claro que debiste decirme, casi me violan porque tu querías un poco de cocaína. A ver, dime, desde cuando consumes y porque jamás me dijiste. Creí que eras mi amiga. – dije.

Hey antes de que continúes, sigues siendo mi amiga y que eso te quede claro, segundo ¿Cómo que casi te violan? ¿Es en sentido figurado o literal? – me dijo. La conozco demasiado, cuando sabe que las cosas se le salen de control comienza a mover las manos, es un tic nervioso.

Literal, iba caminando con tu paquete y tres hombres me agarraron y me golpeaban mientras estaban desnudándome – me estremezco de solo recordarlo – y ahí llego el, y me salvó y me llevó a su casa mientras estaba desmayada.- suspiré.

Espera, ¿Quién te llevo a su casa desmayada? ¿un violador? ¿te acuerdas de su cara? Podemos denunciarlo – Julie se estaba alarmando mucho.

Primero, el que me llevó a su casa desmayada era Dan – su nombre me hace suspirar involuntariamente y tengo que controlarlo, ‘piensa en las cosas malas de Dan’, dice mi mente- y segundo, no podríamos denunciar o descubrirían en lo que andamos. Hablando de eso, porque querías cocaína, ¿desde cuando consumes y porque nunca me contaste?

Ah si, eso, bueno pues…-comienza a retorcer las manos de nuevo, se está poniendo nerviosa y eso me pone nerviosa a mi, esto no es bueno – estaba en una fiesta, y conocí a alguien, un chico, y bueno… nos besamos y el me ofreció cocaína, al principio me negué pero después pensé que no estaba malo probar, y te juro que no me gusto pero él me dijo que si vendía podía tener mucho dinero y tu sabes que me quiero ir a Paris de vacaciones y no tengo el dinero y lo necesitaba y… lo siento por no contarte – habló tan rápido que me costó entenderle. Lo dijo todo tan rápido que me costo procesarlo y por mas que intentaba no podía hallar respuesta coherente a todo este asunto.