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Frustración, enojo, dolor, impotencia, rabia, un conjunto extenso de sentimientos se apoderaba del cuerpo de Brandon mientras ponía sus manos sobre su cabeza, gritando de una manera desgarradora al ver frente a sí una casa en llamas a la par que su corazón retumbaba fuertemente dentro de él, causándole un dolor apenas soportable. Oía a lo lejos las sirenas de la policía y de los bomberos, ya tardíos para salvar a los que estaban a dentro.

Brandon yacía arrodillado en medio de la calle, con las lágrimas abundantes en las mejillas y el inconfundible sentimiento de culpa atormentando en su mente y su conciencia.

Las luces rojas y azules estuvieron ya lo bastante cerca de él como para cegarle levemente la vista llena de lágrimas, sentía su rostro caliente y maltratado, no sólo por la intensidad del llanto, sino por las quemaduras causadas por las llamas que habían alcanzado su cara y cuello.

Además de las sirenas oyó gritos, vió como unos bomberos con sus trajes entraron de inmediato a la casa en busca de sobrevivientes y al mismo tiempo el camión de los mismos hacia su trabajo tirando chorros de agua. Los tres bomberos salieron pocos segundos más tardes cargando cada uno un cuerpo, Brandon sabía que éstos estaban ya sin vida.

...

-¿Brandon Cooper? - preguntó el oficial de policía sentándose frente al chico de cabellos negros.

-Sí- respondió Brandon con un hilillo de voz mientras trataba de calmar sus nervios tocando pausadamente los vendaje que cubrian su cuello y parte de su mandíbula.

-Muy bien chico, cuéntame ¿Qué sucedió?

Brandon suspiró pausadamente, recordando cada detalle de lo que había sucedido antes del incendio.

-Pues...

2 meses después

Al entrar al aula de clases inmediatamente Brandon sintió la mayor parte de las miradas sobre él. Sin saber quién lo miraba en concreto debido a su capucha caminó directo a su asiento habitual no muy al fondo del todo. Al sentarse vió una hoja pegada con cinta a la mesa que decía "Puto piromániaco". Respiró profundo y arrancó hostilmente la hoja para luego arrugarla y encestarla en la papelera, sin más, la clase de cálculo comenzó.

Desde que había vuelto del reformatorio, su vida era así en el instituto, nadie se atrevía a decirle nada pues no era el típico chico flacucho útil para nada al que todos le hacían bullying, aún así, su locker y sus habituales puestos en el comedor y en los salones estaban rayados con mensajes como "asesino", "depravado", "piromaniáco" "violador", etc, etc. Brandon no hacía nada al respecto, solo dejaba que fluyera ya que después de todo, nadie se había metido con él directamente y si lo hacía tendría serios problemas penales.

Brandon pov's

El timbre retumbó en mis oídos sin previo aviso, haciéndome despertar de mi ensueño. Apagué el cigarrillo apretando la colilla con el suelo y me levanté del piso del baño, salí de este y caminé con dirección a mi clase. En el trayecto pasé por un pasillo casi vacío, y digo casi porque habían dos chicos, Tom con su chaqueta deportiva y un pequeño chico vestido completamente de negro.

-¿Eres idiota o qué? - Escupió Tom empujando sutilmente al chico. Frené mi paso, no quería estar metido en eso

-Maldito engendro - Fue ahí cuando la sangre me hirvió. Tom había vuelto a empujar al chico, esta vez tan fuerte que había hecho que el chico diminuto cayera al suelo. Corrí rápidamente hacía él poniéndome en medio de los dos

-¿Qué te pasa idiota? ¿Tienes tantas agallas que te metes solo con los más débiles que tú? - Tom palideció, pero pronto su ceño se frunció y dijo

-Quítate de mi camino Cooper - dijo entre dientes - Esto no es asunto tuyo - empuñó sus manos a los costados

-Yo me meto en el asunto que me de la puta gana- Vi en su mirada la intención de golpearme, pero ambos sabíamos la consecuencia de ello. De repente y sin ningún aviso, sonrió

-Ahora que lo recuerdo ¿que hace dos meses no fue que los mataste? - su asquerosa sonrisa se incrementó al igual que mi ira junto con los latidos de mi corazón

-Largate - dije apenas. Tom chasqueó la lengua y se fue.

La vista se me nubló, haciendo que me sentara junto al chico que había empujado. Después de que las luces volvieran a mí, pude darme cuenta de que el chico había estado temblando durante la corta charla y lo seguía haciendo ahora.

-Oye, cálmate - le dije mirándolo directamente, rápidamente pude notar como se sonrojaba, apartó la mirada velozmente e intentó cubrirse con la capucha de su suéter

-Gra...gracias- musitó, haciéndome sentir un poco de pena ajena

-No es importante, aprende a defenderte...

-Daniel - sonreí sin ganas viendo sus ojos verdes.

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Hola personas, sé que somos pocos, pero háganme saber que están por medio de comentarios y/o estrillitas para así seguir con la historia 💕

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