Cap. 92 Max's Flashback

198 8 2
                                    

Mamá estaba cuidando de mi, era una cria demasiado mimada por mamá. Era feliz e independiente a pesar de todo. Ese día mamá se comportaba raro, y trataba de parecer seria, pero reía de vez en cuando. Tenía la impreción de que quería jugarme una broma, eramos muy bromistas, siempre. En la tarde, mi madre ganó, jugando a las escondidas y me tapó los ojos, esperaba no llevarme un susto enorme y que ella se riera hasta caer al suelo y llorar. Eran las mejores escenas. Pero en cambio, luego de unos minutos caminando de la mano, me destapó los ojos, dejandome ver una fiesta sorpresa.

Mamá:Feliz cumpleaños, cariño! -grito de felicidad. Yo lo había olvidado.
Max:Gracias, mami! -respondi lleno de felicidad.

Ese día, fue el mejor de mi vida. A mi me encantaban las fiestas pequeñas y hechas con demasiado amor. Especialmente hechas por mamá, que era con la unica persona que vivia. Esa misma noche, que estaba abriendo mi regalo, escuche un grito de mi mamá. Rapidamente corri a la cocina.

Max:¿mami? ¿Acaso se hiciste daño accidentalmente, otra vez? -pregunte, sacando una curita de mi bolsillo, siempre tenia encima por esa razón.

Pero al volver a levantar mi mirada, mi mama estaba tirada en el suelo, llorando, sangrando, muriendo. Quede completamente petrificado al ver tal escena en la que mordian el cuello de mi madre, bebiendo su sangre sin compación alguna. No sabia que hacer, no podia moverme, solo temblaba y miraba la maldita escena más traumante que pudo existir. Aquel vampiro me miro luego de tomar la ultima gota que quedaba en el cadaver de mi madre.

¿Por que no lo había mordido? La mordida de un lobo, a cualquier vampiro, lo mata. ¿Por que me tenian que quitar a mi mamá? No hicimos nada malo. Yo no hice nada malo para merecer esto.

Rapidamente trate de escapar, corrí a mi cuarto y me encerré para esconderme bajo la cama. Cerre mis ojos con fuerza y tape mis orejas de la misma manera, lagrimas escapaban corrian por mis mejillas, sin cezar. La puerta no fue golpeada, solo escuchaba pasos alejarse, alguien riendo y mi llanto. Pasaron largas horas, y solo habia logrado quedar dormido por unas 2 horas, o tal vez menos. No salí para nada, no habia nada que se moviera.

Todo era...

Silencio...

Cuando decidí salir, temblaba aterrorizado. Miraba a todas partes con tanto miedo que mi vista andaba nublosa por mis lagrimas. Fui a la cocina y trate de no mirar el cadaver de mi madre, pero tampoco se encontraba ahí. No estaba lo que tanto ame y me dio todo lo que podia. Extrañaba sus brazos, sus besos, para calmarme, las palabras que me decia cuando andaba intranquilo.

“Mamá:Bebito, Max. Tranquilo, no llores, cariño. Estoy aqui, mami esta aquí...”

“Mamá:No te pongas triste, cariño. Estoy aqui para hacerte feliz. Yo si te quiero, mi amor. Y nadie mas debe hacerlo. Estas muy chiquito.”

Mami, quiero a mi mami.

Pasaron otras horas y recogi un par de cosas, como mamá hacia. Hasta que escuche ruidos. Rapidamente corrí con una mochila, lejos de casa. Extrañaria mucho ese lugar, pero tampoco quería verlo.

Corrí, corrí y corrí sin parar, tropezaba y me hacia daño, pero seguia corriendo lejos, sin mirar atras. Andaba demasido oscuro y estaba muy cansado, por lo que cai rodando por una colina. Me quede llorando en el suelo un rato hasta que vi algo realmente enorme frente a mi, me miraba con seriedad y me tomo de la camisa para ayudarme, aquel lobo me ayudo a caminar, mientras yo secaba mis lagrimas. Cuando se detuvo pude apresiar que una mujer venia de frente y ambos se miraban.

Vampire HauntingDonde viven las historias. Descúbrelo ahora