"No todo en esta vida se puede lograr...pero eso no significa que te rindas antes de empezar" ~Primo~
Cursiva y negrita: Hablan en italiano.
Solo cursiva: pensamientos de (T/N)
(C/O): Color de ojos
Negrita: "La Voz"
Observó esa alta edificación que se alzaba frente a ella, por lo que pudo escuchar del hombre que la atrapó se llamaba mansión e irían a ver a un tal Primo, no sabía porque lo llamó así pero se veía muy serio; ciertamente al ser una chica y el hecho de que hasta ahora no había tenido la oportunidad de ver a más personas no lo dejó apreciar tanto a este hombre, y descubrió— para su sorpresa— que no le disgustaba del todo; dejando de lado su carácter, que para ella le dio la peor primera impresión, su color de cabello, ojos e incluso su forma de vestir le llamaba la atención.
No debía quejarse, pese a estar atada por esas molestas cosas negras que hasta ahora no habían perdido la llama que las rodeaba, ojalá ella fuera capaz de usarla por la misma cantidad de tiempo, su aura la cansaba demasiado, y aunque por ese pequeño dato se sintió desanimada, el mismo desapareció al mirar por la ventana. Tenía una vista perfecta del lugar en el que estaban, extensas praderas repletas de un verdor que solo ocupaban en su memoria una mínima parte por las pocas fotos que llegó a ver, un pequeño rio que pasaba entre dos piedras y que daban a un jardín repleto de flores. Había uno que otro animal, entre ellos caballos, no pudo evitar sonreír con todo lo nuevo que veía, acepto esta poca información que tenía, ella ya sabía que aún había cosas que desconocía, y que muchas de ellas no estaban en los libros; tanta fue su emoción que no pudo evitar correr pese a estar amarrada a donde los caballos, o eso intentó, de nuevo ese hombre molesto volvió a atraparla, dirigiéndola a rastras al interior de la mansión.
Miles de pasillos se abrieron frente a sus ojos, había flores de muchos colores decorando los largos pasillos con una extraña tela roja que se extendía en el suelo, era bonito, ya que tenía adornos a los lados de un color muy brillante, también observó las pinturas de paisajes que desconocía y que se veían hermosos; sumida en sus pensamientos no notó cuando llegaron a dos puertas grandes, y justo cuando el hombre iba a tocar, una voz mucho más serena, más suave pero segura se escuchó del otro lado.
—Pueden pasar—el rubio le dio un no tan agradable empujón obligándola a pasar, se hubiera quejado, pero la sentó en una silla captando así la atención muchas personas en la habitación; la veían de manera seria y analítica a excepción de una chica que le sonreía suavemente.
—Disculpa que Alaude te haya traído de esa manera tan poco amable, y comprendo que en este momento debes estar muy confundida, pero no tienes que temer no te haremos nada malo, solo quiero hacerte unas preguntas.
—Discúlpeme usted a mi señor desconocido que nunca en mi vida he visto, el hecho no es solamente el de estar confundida y no, tampoco tengo miedo, pero como puede ver a mi me causa mucha felicidad estar paseando tranquila y que unas personas que no conozco me persigan, incluyendo a un hombre que no me deja ni irme en paz, eso y le sumamos el hecho que no para de atraparme y tratarme mal—Sonrió con clara molestia.
—Nufufufu esta chica me cae bien—el hombre que hablo tenía una expresión de burla en su rostro, su ropa era de mal gusto a su parecer, sin embargo, le sentaba bien, aunque su peinado era muy raro.
—Me recuerda a un melón—dijo sin querer en voz alta.
—Nufufufu ¿Que has dicho pequeña mocosa? — podía ver lo molesto que estaba por la expresión en su rostro, pero no le importaba, ya estaba cansada de quedarse callada cuando le hablaban.
—Oh, además de melón también eres sordo, perdón, pero no se utilizar lenguaje de señas.
—Di tus últimas palabras niñata—vio con asombro como una neblina empezaba a formarse de la nada.
—Deamond—era increible como ese rubio de mirada suave logro controlar a ese hombre con unas simples palabras, de verdad creyó que la atacaría.
—Discúlpalo, tiene una personalidad algo complicada—le sonrió y tubo que admitir que tenía una sonrisa preciosa, esos ojos azules eran amables, contrario a los fríos del hombre que la trajo y que según se llamaba alaude.
Ambas miradas, azul y (C/O) conectaron, como si el mundo se apagara en su entorno, encerrándolos en una burbuja donde solo existían ellos dos, un sentimiento profundo se instaló en ambos que ahora se miraban con una expresión confusa, era evidente que no sabían lo que sucedía, pero lejos de ser incómodo era agradable y confortante.
—No se preocupe, también fue mi culpa el haberlo provocado, no he tenido un buen día, y entre la persecución y viaje estaba enojada—Por el momento era mejor que se controlara, aquel hombre era amable, pero se veía que su palabra era muy importante en el lugar, no quería saber lo que pasaría si llegaba a hacer enojar a sus compañeros.
—JAJAJAJA ¡¡ESTA CHICA ES GENIAL!! ¡AL MENOS SABE CUANDO CONTROLARSE! — ¡casi quedó sorda! Ese hombre hablaba, o, mejor dicho, gritaba, demasiado alto.
—ma ma no grites knuckle, ella no está acostumbrada a tu voz y podríamos lastimarla, creo que sería mejor el presentarnos, la pobre parece confundida—sonrió un hombre de alegre sonrisa, se veía bastante amistoso.
—Asari-san tiene razón, pobre pequeña, solo mírenla parece tan confundida—La única chica del grupo habló, era muy bonita tenía que admitirlo, cabellos como el sol caían hasta mitad de la espalda y sus ojos eran muy azules.
—Mi nombre es Elena pequeña, y soy la que se encarga de que todos ellos no se metan en problemas— Había vuelto a hablar la misma chica de brillantes cabellos mientras le sonreía con suavidad.
—Yo soy Knuckle niña, disculpa el haber gritado antes, suelo hablar muy alto cuando estoy emocionado— Ahora que hablaba más tranquilo pude notar su voz gruesa, era un hombre de cabello negro al igual que sus ojos, tenía una pequeña venda en la nariz y vestía con ropas largas y grisáceas además de llevar un libro bajo el brazo.
—Yare Yare que molestia solo quiero dormir, soy lampo—El chico que habló solo era unos centímetros más alto que yo, de cabello color verde.
—Yo soy Asari Ugetsu, llevémonos bien— El hombre que le pidió a knuckle bajar la voz le habló, sus ropas eran curiosas y algo extrañas, pero encontraba cierto gusto en las mismas.
—Nufufu yo soy Deamond Spade— Era el cabeza de melón, su cabello de un azul diferente a los que ella conocía, tenía entendido que era índigo.
—hmp Alaude—Pocas palabras, debió suponerlo
—yo soy G—Esto lo dijo otro hombre de cabello rojo y... ¿una cicatriz? en la cara.
—Por ultimo estoy yo, primero déjame darte nuevamente mis disculpas por el trato de mi guardián contigo, es un gusto conocerte yo soy Vongola Primo.
E decidido retomar esta novela que había dejado en Hiatus por un tiempo, y si es posible alargar más los capítulos ya que los siento muy cortos, gracias por leer.
Se despide LilinyuXDbay-bay
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Llama de la Luna
RomanceÉl, jefe de una de las familias mafiosas más influyentes de Italia Ella, una chica "común" con una vida vacía rodeada de paredes blancas. ~Dos vidas diferentes~ Uno rodeado de los peligros del bajo mundo, arriesgando su vida para proteger a su g...