La entrevista (Candy Candy) [PAUSADA]

Respuesta 2: Grave Error.

Terrence comenzó a recordar su segundo y muy bochornoso encuentro... Jamás imaginó volver a verla de esa manera...

La temporada de exámenes en el colegio donde Terry estudiaba la preparatoria ya estaba presente. Típicamente, todos los alumnos llegaban hasta su lugar asignado, sacaban los utensilios necesarios para responder dicho examen, y el dolor de cabeza no se hacía esperar.

—Esperemos que este examen sea aprobatorio para determinar su entrada a la universidad, joven Grandchester— dijo la profesora de cálculo que ya había colocado las diez hojas de su examen departamental sobre la butaca.

Como siempre, Terry tomo el lápiz recién comprado, entre sus nerviosos dedos y con un respiro hondo trato de concentrarse en responder de la manera más acertada posible aquellos cuestionamientos. Pero eso prácticamente era imposible, porque los recuerdos de la noche anterior y todas las tensiones vividas durante sus períodos laborales, lo tenían como loco. Y para colmos la falta de dinero, cosa que no facilitaba la próxima visita a su querida hermana; ya que la directora del colegio no había recibido pago de dos meses atrás, y había solicitado una cita con el joven.

Ahuyento esos pensamientos para poder responder ese examen que tenía el boleto directo a la universidad de su agrado, para poder estudiar ingeniería comercial.

—Vamos viejo, acompáñanos al cine por lo menos— invito una vez más Richard, quien era un viejo amigo del joven. Ya que se conocieron desde que tenían seis años, y a partir de ese momento, no se habían separado.

—Ya te dije que no Richie— se negó el joven echándose la mochila a los hombros.

—Por favor...— suplicó aun sabiendo que su compañero tenía deberes por cumplir.

—No, ya después habrá tiempo para eso. Ahora lo primordial es conseguir dinero para el colegio de Perla— argumento el chico buscando su celular y su billetera para pagar el taxi que lo llevaría hasta un café de la avenida principal.

—Si ya sé: todo el dinero lo gastaste en los departamentales— imitó el rubio conociendo las razones de su amigo para alejarse de sus antiguas costumbres.

—Gracias por comprender hermano— respondió Terry corriendo hasta la parada de autobuses, donde ya había un taxi estacionado que lo llevó hasta el Starbucks.

Al entrar a dicho café, logró apreciar la figura de una mujer conocida para el muchacho. Quien lo saludo cordialmente, mientras le dirigía una sonrisa. Ella llevaba varios documentos en una carpeta, y algunos de ellos ya se encontraban esparcidos por el largo y ancho de la mesa.

—Me alegra que haya accedido a mi solicitud— expresó la mujer tomando de su vaso con agua.

—Yo accedo a todo lo implicado con mi hermana— respondió el chico leyendo la carta, ya que se moría de hambre.

—Joven Grandchester, admiro su espíritu fuerte. Pero... Me temo que si no cubre la escolaridad de lo que sería esté y el mes pasado, Perla ya no podrá seguir más en nuestro internado— sentenció la mujer con aspecto determinante aunque con un dejó de pena. Lo que ocasionó un escalofrío en Terry.

—Sé la situación de mi hermana, pero entienda la mía... También tengo que asegurar mi escuela, si no apruebo estos exámenes me temo que no podré darle una mejor calidad de vida a ella...— explicó el muchacho con el corazón hasta los pies— Por favor... Entienda que hago todo lo posible porque ella este segura ahí dentro, y para ello trabajó doble... Pongo todo mi empeño por cumplir con dichas condiciones... Ya he probado diversos colegios, pero ninguno ofrece tanta seguridad como el suyo... Soy el único que esta al pendiente de Perla, ya que Yadina no quiere colaborar en su crianza... Por favor, le pido unos días más...