La entrevista (Candy Candy) [PAUSADA]

Karla

Tras escuchar dos tonos en el celular que sostenía con su mano derecha, sobre su oído, Terry percibió una linda vocecita que lo llamaba con alegría.

—¡Terry que bueno que marcas!— exclamó Perla casi saltando de la emoción.

—Hola chaparra, perdón por no haberte llamado antes pero...— estaba a punto de excusarse sin embargo la pequeña no se lo permitió.

—No importa... ¡Ah que no sabes!— grito la castaña pegando más el móvil a su oído.

—No, no sé— Terry comenzaba a sentirse más y más a gusto recargado en la pared de su casa, mientras escuchaba atento las nuevas noticias que le tenía su hermana.

—Puedo pasar las vacaciones contigo— exclamó la niña con unos tremendos gritos que despertaron al joven de su ensoñación— La directora dice que he avanzado mucho, y me dijo que las vacaciones son para estar contigo ¿Estas feliz?

—Claro que sí. ¡Es maravilloso que vengas!, verás que nos la pasaremos genial— contestó sonriendo ante la sola idea de estar de vacaciones. Aunque claro que debía pasar primero demasiadas cosas para llegar a ello.

—Espero mucho ese día, ahora tengo que ir a hacer mi tarea— notificó la niña, mientras él entendía que ya era hora de colgar.

—Esta bien. Apurate. Te hablo después— se despidió.

[...]

El sonido de un hombre gritando despertó a Terry que recargaba su cabeza en la ventana del autobús. Observó de un lado a otro el panorama hasta que reconoció el lugar donde se hallaba y con resignación supo que ya estaba cerca de la escuela preparatoria que le habían asignado para su aplicación de examen.

—Aquí bajó— le dijo al chófer que iba comiendo una torta y estaba un poco molesto por la interrupción del joven. Sin embargo tuvo que detener el transporte para que aquel "imprudente", bajará— Gracias.

Un solo vistazo a aquel barrio donde se encontraban diversos restaurantes elegantes, era suficiente para darse cuenta que se trataba de un lugar donde abundaban solo las personas más refinadas y con un estatus social bastante alto. Por lo que, no le sorprendería encontrar por ahí a cualquiera de sus compañeros de secundaria.

Respiró hondo y fue hasta la calle que dictaba aquel papelito que le dieron cuando hizo todo el trámite. Pues no tardó mucho en encontrar la escuela, porque un policía se encontraba ordenando a los grupos que les tocaba ingresar para la prueba. Así que decidió formarse detrás de una chica para que le dijeran donde tenia que colocarse.

—Vamos, avancen— gritaba una mujer de unos treinta años de edad, para que nadie se quedara e hiciera desorden.

Ethan avanzaba decididamente aunque las piernas le comenzaban a temblar de la emoción y los nervios. Ese día era uno muy importante en su vida y sabia que debía tranquilizarse o de lo contrario nada saldría bien. En eso pensaba cuando recibió un codazo en su estómago por parte de la chica que se encontraba delante suyo.

—Perdón— dijo al instante— Soy una estúpida— se agachó para volver a ordenar sus papeles en la carpeta.

—No te preocupes— respondió él también en cuclillas ayudándole— ¿Karla?— preguntó mirándola.

—¿Terry?— ella también lo miraba sin creer que realmente él estaba ahí y pensando en lo pequeño que era el mundo— Oh Terry, que gusto me da volver a verte— grito abrazando al muchacho.

—A mi también me da gusto. Volviste.

—Si. Lo sé, lo sé, he estado bastante tiempo afuera así que, bueno llego la hora de volver a mi hogar— sonrió divertida, aunque después esa sonrisa se borro porque la mujer les llamo la atención por detenerse a la mitad de camino.