Antonio

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Antonio C.

Toda mi vida he escuchado la palabra psicopatía, es un término que dicen que me define, dicen que es un trastorno antisocial de personalidad, pero eso no tiene sentido para mi. Siempre le he agradado a la gente, mis calificaciones, siempre fueron las mejores, sin embargo al no tener remordimiento y no ser tan cercanos a mis prójimos, ya me consideran psicópata. Desde mi nacimiento he sido diferente, jamás me importaron las emociones, desde mi opinión son debilidades hacía el humano, la niñez  no fue difícil, siempre me dieron algo llamado amor, se preocupaba a por mi y los demás, pero todo cambió en mi adolescencia, aquel día que quise vengarme, jamás pensé que me hiciera feliz, intenté ya no matar, porque es muy agotador pero cada vez que miro alguien mi maldita conciencia me pide que lo haga, y por idiota provoca que me internen en una estúpida casa ya que soy menor de edad y no tengo familia. Pero antes de irme más allá les pondré en contexto.

Un día estaba con mis padres, mis hermanos, mis abuelos y yo esta vamos en casa cenando, en eso escuchamos que se abre la puerta. Sabíamos que nadie más tenía las llaves de esta casa, aparte de mis tios pero ellos no estaban en el país, mi padre decide asomarse y justo en ese momento le disparan, provocando que me salpicara su sangre en toda la mesa, no sabia que hacer me quede en shock, son esos momentos donde nada en ti funciona y no entiendes lo qué pasa a tu alrededor. En eso mi madre se levanta, en un intento de protegerme pero también le disparan, mis hermanos se abrazan a mi, sentía como sus uñas se enterraban en mi carne, por un momento provocó que reaccionara y me diera cuenta que ahora mis abuelos nos querían defender, (al parecer toda mi familia tenía complejo del héroe), pero bueno ya sabrán cómo terminó. Solo quedábamos, mi hermana de 8 años y mi hermano de 5 años  y yo de 13 años. Los tipos se nos quedaron viendo, examinando a ver si nos movíamos, al final tomaron varias cosas de la casa y después tomaron a mi hermana, yo la defendí, porque nuestra madre siempre me pedía que los defendiera, pero era inútil, solo era un mocoso de 13 años, la tomaron y a mi me golpearon mientras me obligaban a ver como abusaban de ella muy lentamente, escuchaba como gritaba, en ese momento solo sentía furia, quería matar y romper todo, por una vez en mi corta vida tuve un sentimiento. La habían violado frente a mis ojos y no podia hacer nada, me sentía muy impotente. Lo último que recuerdo es que nos pusieron un trapo en nuestra nariz, y cuando despertamos me di cuenta que estábamos en un callejón, intenté despertar a mi hermano pero estaba inerte y mi hermana estaba inconsciente al otro lado mío, la desperte y lo único que decía era que le dolia todo su cuerpo, lloraba demasiado y no para suplicarme que acabara con su vida, la sangre me hirvió y yo solo sentía odio, así que grite con todas mis fuerzas y alguien nos escucho, nos llevo a una estación policial, tomaron nuestros datos y luego llamaron a nuestros tíos. Me sentía como una mierda, tenia mucha rabia, desnutro de mi algo quemaba, es como si tuviera una bomba dentro de mi y sabía que en cualquier momento iba explotar, si no hacía algo al respecto, por ello, después de unos meses de entrenamiento y de búsqueda, decido llevar acabo mi venganza, decidí escaparme de mi habitación, lavando conmigo una mochila, la cual contenía armas, después me dirijo a la habitación de mi y le doy un beso en la mejilla, ella se levanta asustada y me mira preocupada, yo solo le pido que vuelva a dormir y que saldré un momento a algún lugar, ella solo me mira con preocupación pero se vuelve acostar, me quedo un rato vigilando de que se haya dormido y cuando estuve seguro, me fui en búsqueda de esos mal nacidos, cuando di con su ubicación gracias a algunos contactos que gane, los encontré y gracias a eso parecía que todo iba a mi favor, los habia encontrado, a los 3 tipos que habían hecho sufrir a mi hermana, los 3 estaba carcajeándose como si no hubiera pasado nada, y la ira en mi burbujeó, unas ganas incontrolables de matar surgieron de mi, aun no puedo recordar como paso todo, siento que fue muy rapido pero satisfactorio, al ver sus cuerpo inertes, comienzo a reír y es que al fin había soltado a mis demonios interiores. Limpio mis huellas de las armas y me pongo una nueva muda, no era idiota así que sabía que debía ocultar bien mis rastros. Cuando llegue a la casa, mi hermana estaba en mi recámara, tomé asiento a un lado de ella, nos quedamos mirando la nada por un rato y de repente ella me abraza y me pide que durmamos juntos, yo solo me limito a complacerla. Después de ese día, quería volver a matar, por eso decidí dejar la escuela y empezar a buscar personas que habían hecho daño a otras personas y después acababa con su vida, me sentía en el paraíso, así transcurrió por unos meses, pero un día sale en las noticias uno de mis asesinatos, el de los 3 tipos que abusaron de mi hermana, las noticias decían que un justiciero había llegado a la ciudad y juro que en ese momento me sentía como un dios, así que no pude ocultar mi gran sonrisa de satisfacción, provocando que mis tíos me miraran raro, yo solo los ignore. La verdad es que jamás nos preguntaban cosas, solo nos mandaban a la escuela, nos llevaban al psicólogo, nos daban de comer y nos compraban ropa. Mis tíos jamás tuvieron hijos, porque decían que era una pérdida de de tiempo y esfuerzo pero ahora nos cuidaban como si fuéramos uno de ellos, siempre buscaban la manera de animarnos pero jamás se entrometían, de echo el día que les dije que ya no iba a estudiar y mejor quería "trabajar", respetaron mi decisión. Todo iba de maravilla, mi hermana iba progresando, se dormía conmigo y yo la protegía de cualquier cosa, pero todo cambia el día que llegue a l a casa con la ropa llena de sangre porque había olvidado mi muda, sin embargo estaba muy cansado como para cambiarme, así que me dormí. De repente alguien abre la puerta sobresaltándome, era mi tía la cual estaba acompañada de mi tío y mi hermana, mis tíos me miran preocupados, mi hermana con curiosidad y yo solo me limito a sonreírles. Ambos hacen un escándalo, pero mi hermana se acerca a mi para comprobar si no estoy herido, me da un beso en la mejilla y me abraza fuertemente echándose a llorar porque pensaba que esta herido. Después de que se calman todos, les empiezo a explicar toda la situación, causando finalizó mi tía me ve con horror y mi tío junto a mi hermana tienen cara de orgullo, mi tía estando molesta por mi ps actos va directamente con la policía, a pesar de las súplicas de mi hermana y los consejos de mi tío termino llenado a un internado, no sin antes pedirle a mi tío que cuidará de mi hermana, este me lo jura y me quedo tranquilo, mientras me llevan. Cuando llegue al lugar solo me quedé un par de meses en la área baja pero luego de unas peleas y uno as análisis por parte de psiquiatras decidieron llevarme a la torre es como una carcel especial dentro de ahí había gente que tenía los mismos pensamientos que yo, sin embargo me decía que era superior que ellos así que me apodaron el Dios de la muerte. Extrañaba mucho a mi hermana, así siempre pedía que me dieran informes de ella, sin embargo me ignoraban, después de unos meses, cumplí catorce años y vinieron unos agentes, dándome noticias de que mi hermana se había quitado la vida aventándose de un puente y dejando una nota para mi, al igual que por favor dejara de preguntar por ella , ya que no tenía ningún derecho. Me trague la ira y en mi surgió un vacío, ignore la carta que me habían dejado y ahora no tenía a nadie.

—Pues esa es mi vida agente cristal —le comento después de terminar de narrar

—Gracias, joven Antonio

—Y ¿para qué quiere saber mi historia? —pregunto sin interés alguno

—Pues es algo oficial pero nos informaron que lo pasarían a la planta baja y que ya no estara en la torre, por su buen comportamiento

—¿Enserio confían en una persona como yo?— pregunto burlonamente —¿Que les hace pensar que no me portaré "mal"?, mejor exijo que me digan para que me necesitan

—¿Quien te crees que eres para exigir?

—Obviamente soy el Dios de la muerte y en este momento estas en mi infierno

—Al parecer también tienes complejo de Dios y eres narcisista, casi lo olvidó—su voz suena desafiante, justo mi tipo —Como sea solo le informo que tendrá que compartir habitación

—¿Con quien tendré el placer de compartir habitación? —pregunté, esta vez interesado

—Pronto lo sabra, mientras tanto toma tus cosas y te espero en la salida

La agente se retira, dejándome solo en mi habitación. No puedo creer que ya no iba a estar en la torre tenía 6 años ahí, extrañare a mis seguidores, nah que les den por el culo. Tomo las pocas cosas que conservo y las pongo en la maleta, le doy una última mirada a la que fue mi habitación y me dirijo hacía la agente. Olvidaba lo eterno que eran las escaleras de la torre, mientras ando por los pasillos me doy cuenta qué hay muchos cambio, de pronto la agente se detiene en una habitación, supongo que habita mi futuro compañero....

También cortito pero ya mero iniciaron lo largo😄

Actualizada 29/04/2021

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