Capitulo V: Precognición.

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Nueva Casablanca, Italia, Dante.

A muchas horas de la guarida de Astor, al otro extremo de Nueva Casablanca. Yamato rompió con todas sus formalidades orientales y se abalanzó sobre Dante con toda la expresión de su lealtad intachable. Pasó de las puertas de la muerte al cielo de los guerreros; de la desolación a la vida. La imagen del viejo lobo que recuperó su manada.

Se encontró con un Dante colmado de serenidad y fuerzas, desbaratando un mundo para construir otro que merecía, y para eso Seth, era el engranaje perfecto.

Yamato – Desde que tu no estás, Astor heredó tu lugar, y lo peor es que Astrid se pasea con él de la mano sin disimulo.

Dante – No te preocupes Yamato, yo ya lo se todo. ¿Puedo confesarte un secreto?

Yamato – Tú sabes que puedes confiar en mí.

Dante – Muy bien. Tengo un poder, se llama precognición.

Yamato - ¿De que hablas Dante?

Dante – Hablo de que se todo lo que sucedió, y en el momento supe lo que iba a suceder. Así fue como me salvé. Por eso mandé a Seth a buscarte, pude  ver como Astor te disparaba en la cabeza, allí, en mi propia oficina.

Yamato – Entiendo, y lo creo fervientemente viniendo de ti.

Dante – Te lo agradezco. ¿Recuerdas que Astrid encontró una nota de Vin?

Yamato – Si, la amenaza.

Dante – Exacto! Al tocarla pude verla a ella escribiendo dicha nota, y algunas escenas con el jefe de la otra mafia.

Yamato – Nunca me cayó bien. Entonces, ¿Tienes premoniciones cuando tocas cosas?

Dante – Sí, pero también las tengo de la nada. Si me concentro en algo o alguien y también cuando corro peligro.

Yamato – Entiendo! Esos malditos querían traicionarte desde el principio.

Dante – Astor no sabía nada del plan de Astrid, todavía no se porque intentó matarme.

Seth – Si ellos estaban juntos desde antes, puede que cuando usted mando lejos a Astrid, Astor pudo pensar que la mato.

Dante – Eso tiene demasiado sentido.

Seth – Astor es alguien predecible.

Yamato – Muy bien, pero, ¿Qué pasó el día del ataque?

Dante – Cuando salimos de tratar con Hernán, pude ver en mi mente todo el
ataque y a Astor acabando conmigo de un tiro. Entonces lo mandé en otro auto separado de los dos vehículos que me llevarían a mí. Cuando Astor se fue, les dije que se fueran sin mí, caminé hasta la ciudad y tomé un taxi.

Yamato – Bien jefe, la justicia esta a nuestro favor ¿Cuál será nuestro siguiente movimiento? Pude ver en acción a Seth y estoy seguro que podemos recuperar juntos lo que le pertenece.

Dante – No hay próximo movimiento, Seth no trabaja para mí. Él es un súper soldado y su único propósito es disolver las mafias de cualquier forma. Seth me encontró y me perdonó la vida porque accedí a darle toda información sobre la mafia para que él pudiera hacer su trabajo. Solo
me hizo el favor de salvarte para que también dejes esto, eres un buen hombre.

Yamato – Pero jefe, ellos lo traicionaron, merecen que los aniquilemos.

Dante – Nadie más que Milito esta encargado de darles lo que merecen y la llegada de Seth me parece suficiente. Este trabajo no es para nosotros, Astor se metió con cosas que no debía y las utilizó mal. Es extremadamente peligroso.

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