Capítulo 1. Una cabellera diferente

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Miraba mi reloj cada cuatro segundos mientras manejaba una bicicleta roja. Necesitaba llegar a tiempo a mi trabajo pero cierta irresponsabilidad mía lo impidió. Cuando llegue la jefa me esperaba con los brazos cruzados en la puerta del lugar.

- Nadia, otra vez tarde. Tiene suerte que apenas estoy llegando- Dijo la señora Margot.

- Lo siento, señora Margot, tuve un imprevisto.

-Siempre te he dicho que me puedes mandar un mensaje cuando se te presente una situación.

Ella tenía razón, como una chica de 16 años pudiera ser tan inmadura ante la puntualidad de su trabajo. Es algo que debería cambiar. ¡Estoy decidida de dar el cambio!

-Prometo que le avisare con tiempo- junte mis manos y agache la cabeza.

-Está bien Nadia, ahora pasemos- sonrió. La señora Margot siempre ha sido comprensible conmigo, me apoya con lo que puede. Para ser sincera me siento culpable de engañarle en que llegue tarde. Me había quedado dormida después de ayudar a mi abuela con la siembra del día. Sin embargo debo de estar consiente que tengo responsabilidades a partir de las 6 de tarde.

Me acerque a los boliches para darle una limpieza rápida antes de que el lugar diera su función. Estoy satisfecha de trabajar en esta bolera. Es uno de los lugares más populares de la pequeña ciudad de Chester.

-Pronto traerán nueva bolas de boliche- se acercó Prue, mi mejor amiga y compañera del trabajo.

Ambas estudiamos en la misma escuela y por supuesto en las mismas materias. Somos muy unidas, tenemos planes de ir a la misma universidad en un futuro, es una de las razones por lo cual trabajamos para juntar suficiente dinero.

-¿No crees que estas son suficientes? – habían alrededor de 31 bolas de boliche que habíamos limpiado.

-Para la señora Margot no lo es- ambas carcajeamos.

-Puedes creerlo, Misla término con Drake.

Misla es mi otra mejor amiga, es una chica muy coqueta y atrevida. Aunque le guste demasiado los chicos guapos es buena amiga. Puedes tenerle confianza y esta para ayudarte en las buenas y en las malas. En total somos tres inseparables chicas.

-¿Y con quién quiere ahora?- pregunté.

-Con tu lindo vecino Barin Lawler- se mordió los labios.

- ¿Qué?- me sorprendí con una sonrisa.

-Acaso estas celosa.

-No, claro que no. Barin es muy coqueto y mujeriego igual que Misla. Dudo que duren.

- Tal vez solo un mes.

- O una semana- dije en broma.

-Tal vez hasta 6 meses- escuche una voz masculina muy reconocida.

Prue estaba atónica y sorprendida. Volteé sospechando de quien era.

-Hola Barin- sonreí falsamente.

-¿Qué tan coqueto y mujeriego soy?- se acercó de una forma nada agradable con una sonrisa pícara.

Sabía que estaba bromeando, a pesar de que nos llevamos muy bien por ser vecinos, a veces coquetea conmigo, yo simplemente lo golpeo cada vez que lo hace.

-Eso díselo a cada chica que sales- le di un golpe en el hombro.

Barin es uno de los chicos populares de la escuela. Está en sexto semestre y es el capitán del equipo de basquetbol.

Princesa del SolDonde viven las historias. Descúbrelo ahora