Relatos de otro hombre

IRA

Mientras Arón se cambiaba la ropa, Elena entro a su cuarto y vio su torso desnudo.

"¿Arón?" Dijo Elena, mientras cerraba la puerta del cuarto.

Arón la miro con ojos desafiantes, y le respondió un "Dime" grueso que resonó por las paredes frías de su cuarto.

Elena se acercó a Arón y lo abrazo, le dijo entre las lágrimas "¿Qué es lo que te pasa?".

Arón no abrazo a Elena, y le respondió "Yo... nada, Elena" separó a Elena de él y se puso otra camisa, salió y agarro una lata de atún que tenían.

Cuando Arón salió, se encontró a Ross recostado en una pared cerca de la puerta de su cuarto y miró a Arón con ojos de decepción antes de irse.

Ross se sentó en el sofá y el silencio reinó en la sala. Estefanía abrazo a Ross en su agonía silenciosa.

Eleonor entro a su cuarto a buscar a Elena y decirle palabras de ánimo.

Cuando Arón terminó de comer, le dijo a Ross todo lo que había presenciado en su instituto, Ross le dijo "Salgamos mañana para buscar líquido, Arón." El tono de Ross era muy serio.

Arón lo aparto suavemente y se fue al cuarto donde dormía y se acostó.

Cuando todos estaban dormidos, las luces apagadas y las mentes perdidas, Ross se levantó de la sucia cama, fue a la sala y se sentó en el sofá.

Solo podía pensar en el vergonzoso y horrible estado de Arón, mostrando sus verdaderos objetivos, rosando peligrosamente la locura y la maldad...

Ross estaba muy distraído, "metido en su mundo", y Estefanía se le sentó al lado silenciosamente y le puso la mano en la pierna, Ross sobresaltó y volteo rápido.

"Me diste un buen susto" dijo en un tono amable y casi susurrando, Estefanía le preguntó si estaba bien, porque estaba ahí sentado.

"Pensando... pensando en la nueva cara de Arón, buscando las palabras correctas que decir para cuando nuestra breve separación llegue... espero que no sea así... espero pensar erróneamente". Ross se puso sus manos en la cara, y Estefanía las bajo con cuidado.

"Ross, no pasara eso". Una mirada de segundos ocurrió entre ellos y Ross le respondió "Lo sé", puso su mano en la mejilla de Estefanía y empezó a acariciarla, Estefanía conmovida por tal acción, lo beso apasionadamente y su fuerza hizo que Ross se acostara cada vez más en el sofá. La pierna izquierda de Estefanía estaba en el espacio que dejaba la entrepierna de Ross.

La mano cautelosa de Ross le tocó la espalda, mientras que la de Estefanía estaba por dentro de su camisa. El acto se consumó esa noche en el sofá donde absolutamente nadie tiene idea de lo silenciosos que fueron ambos en su acto lujurioso.

Cuando despertó Arón, se dio cuenta de que Ross se había levantado temprano, y por su lado, Elena también se dio cuenta de Estefanía.

Arón se levantó y tocó la puerta de las chicas para abrirla, para comprobar si Ross les había dicho dónde iba o sí lo habían visto.

Elena le respondió que no y que pasaba lo mismo con Estefanía, que estaba desaparecida.

Arón se alertó y buscó por toda la casa sin conseguir a ese par.

Elena busco a Arón y le pregunto "¿Qué harás?", Arón respiró hondo y le dijo a Elena que le buscara algo macizo y largo que se pueda usar como arma.

"Irás otra vez..." le dijo a Arón y lo miro fijamente. "Sí" respondió firmemente.