Relatos de otro hombre

Lo que quedó

Estaban muy cerca de Achad, el humo de los incendios que habían dentro de la villa se lograban observar, cuando llegaron a la entrada se observaron la cantidad de cuerpos sin vida, tanto de humanos comidos como bestias....

Esteban volteó hacia Arón y le dijo "Tengo dos pistolas guardadas en la guantera del auto, te daré una y buscaremos a Miguel, si sigue vivo aun... habrá hecho lo que acordamos."

Arón no lo comprendió pero siguió a Esteban, pues, confiaba en él.

Se metían en la ciudad, acabando silenciosamente al as aun bestias que pululaban entre los oscuros restos de aquella destruida ciudad.

Esteban agachado mirando a una puerta con una luz de un poste iluminándola saco una radio y hablo "¡Miguel!" espero unos segundos en silencio, sin respuesta alguna e incrementando la tensión. "Miguel... Responde" ningún sonido provenía del radio hasta que sorpresivamente sonó una voz muy familiar para ambos "Esteban, estoy con muchas personas en donde metieron a Arón luego de hacerlo presidente"

Todos sonrieron y Aron agarró la radio "Aquí Arón, Miguel. Nos dirigimos para allá, tiempo estimado 20 minutos." Apagó el radio y hablo con Esteban.

"Podemos llegar Esteban, aprovechemos que es de noche... puede ser un suicidio como no puede serlo.... Hay que arriesgarse y tomar esta pequeña partícula de vida, de una posibilidad."

"Así es Arón, estoy contigo."

Se miraron a los ojos y con un respiro hondo se levantaron y corrieron a su destino.

Milagrosamente no se encontraron con ninguna bestia en su recorrido, pero en la entrada de aquel edificio habían 2 bestias que eliminaron golpeándolos repetidas veces en la cabeza hasta que dejaran de moverse.

De repente los dos se quedaron parados y se miraron "Todo está muy silencioso" dijo Esteban.

De repente un tentáculo sale de la oscuridad y agarra a Esteban por su pierna y lo lanza violentamente delante de las puertas de un vehículo que había allí.

"¡Esteban!" dijo Arón mientras sacaba su pistola, se dirigió hacia Esteban que esta agonizante en el suelo pero fue interrumpido por un golpe que logró esquivar por centímetros.

Repentinamente salió de las sombras la bestia que atacó una vez a Arón esta vez propinando golpes con su brazo tentáculo. Arón los intentaba esquivar y en una oportunidad disparo repetidamente a su pecho.

El monstruo momentáneamente se detuvo, la sangre que salía de los orificios de las balas que impactaron en su pecho eran mucha, pero un humo salió de esos agujeros e hizo que el monstruo se regenerara.

Arón seguía apuntando pero en shock por tal escena, así que éste hizo su misma estrategia que antes, agarró a Arón por el pie y lo levantó, saco una pistola de su saco, pero esta vez Arón no peco por inocencia y le pego al a pistola antes de que disparara con su puño y con la otra mano le dio una ola de disparos que le impactaron en lo que él creía su cara.

La bestia lo soltó y cayó inmóvil al suelo, Arón agarró con ambas manos aquella gigante pistola y miró al monstruo el cual se volvía agua y se evaporaba.

Por un momento estaba feliz de que no lo hayan matado, pero recordó a Esteban así que rápidamente corrió a auxiliarlo, lo cargó en sus brazos y toco la puerta muy rápido, tardaron unos segundos en responder y cuando abrieron la puerta fue Miguel quien respondió.

"Miguel, ayúdame con Esteban, ¡rápido!" Miguel de manera rápida lo tomo en sus manos y lo llevo hasta una zona de enfermería improvisada. Arón se quedó en la entrada del recinto, acosado por aquellas miradas asustadas de las personas que habían dentro.

El chico bajó la mirada, atontado y miró como sus manos y su camisa estaban llenas de sangre. No podía creer el escenario, se dio la media vuelta y cerró las puertas del lugar.

Se quedó unos segundos en silencio hasta que desde el pasillo se oyó un llamado que decía su nombre, Arón salió corriendo y vio cómo Esteban estaba temblando en la mesa donde lo tenían.

Miguel le sujetaba su mano, llorando mientras que había otro grupito de personas buscando las cosas para poder atenderle correctamente.

Una mujer se le acercó a Arón y le dijo "¿Sabes cómo tomar la sangre?" Arón la observo y luego de segundos le dijo que sí, esta le dio una aguja y le dijo que hiciera una vía.

Arón se acercó y agarró su brazo para hacer lo que tenía que hacer, de repente Esteban dejó de temblar y abrió sus ojos, Miguel le agarró la cara entre lágrimas y le dijo "Aquí estoy"

Esteban sonrió y de repente cayó en la inconsciencia, todos agitados estaban en la sala tratando de auxiliarlo.

Horas pasaron hasta que Arón salió de la sala, aturdido y bañado en toda clase de líquidos asquerosos.

Subió hasta donde estaba su oficina y en la oscuridad, agarró su silla y se sentó, con un suspiro vio por su ventana aquellas estrellas que iluminaban aquella fría y solitaria noche, una lagrima recorrió su mejilla recordando la cálida mirada de Michelle, el sabor de sus besos...

No pudo resistir mucho tiempo antes de romper en llanto silencioso. No podía contenerse, los recuerdos que tenía eran tan intensos como el fuego, tan vividos...

Entre tanto pensó "Tantas personas he perdido, ¿solo yo estoy vivo al final?"

No hallaba las palabras correctas para describir todo el dolor que sentía, pero describió un estado.... Locura.

En un momento decisivo pensó "Por qué decidí en aquel momento dejar atrás la necesidad por sobrevivir... ¿Por qué pasó esto?"

Arón abrió la gaveta de su escritorio y había una pistola allí, la cargó y apuntó a su sien.

Su mano temblaba, sus ojos estaban cerrados y junto a la luz que transmitía la Luna pensó por un segundo que tendría el final que quiso desde el comienzo... Pero no, coloco el arma sobre la mesa y dijo en voz alta "Aun me necesitan"

Dejó la pistola ahí y abrió la puerta, bajo a buscar a Miguel pero no lo encontró, una persona que estaba ahí parada le dijo que lo movieron a una sala del piso superior, este fue hasta allá y lo vio a él llorando sosteniendo su mano.

Tocó la puerta y dijo "Miguel... ¿Qué tal estás?"

"él... no quería todo esto... Debiste verlo, me esforcé tanto por salvarlo, por despertar nuevamente el día de mañana junto a él, junto a ti, tener un rumbo fijo... pero ahora todo se ve tan negro..."

Arón se sentó en una silla que había frente a la camilla donde estaba Esteban recostado y le dijo a Miguel "Comprendo que pienses que sin esa persona no podrás completar de trazar el camino a la felicidad pero, es imposible decir que ahora no nos necesitan... Michelle murió, Ross igual y Estefanía; todos lo que yo creí un dato estable en mi vida, Eduardo los termino asesinando"

Miguel le preguntó quién era Eduardo.

"Él era mi amigo, o eso creía... Bueno, lo que haya sido antes no importa, él se encargó de asesinarlos a todos, tirar con mi novia y traicionarlos."

-...-

"Lo que quiero decir Miguel, es que vendrá un nuevo día, no morirá Esteban, tranquilo."

Arón se levantó y cuando iba abrir la puerta dijo "Esteban y yo tenemos varios meses juntos... perdón por no decírtelo Arón."

Se quedó parado y dijo "Los felicito... cualquier cosa, sabes dónde estoy Miguel, cuídate pana"

Cuando cerró la puerta, apagaron las luces el pasillo y un hombre le dijo a Arón que iban a acostarse ahora, para ahorrar energía.

Arón dijo "Vale" y caminó en el oscuro pasillo pensando en Michelle... en ese momento, una parte de él murió.