IV: El Comienzo de un Cambio

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IV: El Comienzo de un Cambio


Al llegar a la casa de Geraldine me llevo la sorpresa de encontrarme con Pierre en la puerta de la casa. El al verme me dedica una pequeña sonrisa, yo solo me limito a responderle el saludo con un asentimiento con mi cabeza.

La puerta es abierta pocos segundos después por Geraldine, quien nos sonríe a los dos, es un gesto eso me alegra por unos segundos antes de ver como Pierre se inclina hacia los labios de Geraldine, depositando un corto beso es esos labios que yo tanto ansió por probar. Decido ver hacia otro lado para evitar ver su demostración de afecto.

—Lucas—por suerte Genevieve me llama y aprovecho para verla a ella y me sorprendo al ver a los tres verme curiosamente, como si supieran algo que yo no se.

—Nosotros iremos al cine—dice Pierre tomando la mano de Geraldine quien me dedica una pequeña sonrisa de labios cerrados y se va con Pierre. Los sigo con la mirada hasta que escucho como alguien raspea su garganta, mi vista vuelve Giovanna quien se encuentra bastante cerca de mi por lo que doy un pequeño paso hacia atrás.

—Podemos estudiar una hora, necesito ir a casa temprano—miento, en realidad no quiero presenciar el momento en que Geraldine llegue a casa o simplemente no llegue a dormir.

.

—Luces terrible—es lo primero que escucho cuando abro la puerta de mi habitación, veo a mi hermano mayor, Isaac, acostado sobre mi cama con un marco de fotografía en sus manos.

—¿Qué haces en mi habitación?

—Nuestro padre me mando a cuidar de ti, cerrara el bar tarde.

—Estoy lo suficiente grande para cuidar de mi mismo.

—¿Esta el la foto con la que te masturbas? —Cambia de tema, y al darme cuanta que observa una foto que tengo de Geraldine me acerco a quitársela.

Observo la fotografía entre mis manos, es una fotografía de la escuela donde sale Geraldine postulándose para ser la presidenta del club de teatro, la fotografía es a color por lo que al instante que la vi no duden arrancar la fotografía y guardarla.

Quizás mi obsesión con ella no es buena, pero no creo que le haga mal porque no la estoy lastimando con solo ver su fotografía.

—Hoy fue con su novio al cine—le digo observándolo, Isaac se incorpora y me indica que me siente a su lado.

—Mira hermano, yo no se nada del amor, nunca me he enamorado pero creo que si te gusta esta chica ¿por qué no decírselo?

—¿Qué parte de fue con su novio al cine no entendiste?

—Lo se, tiene novio pero eso no te puede impedir confesarle tus sentimientos, si te dice que no siente nada por ti, estaba bien, ella es feliz con su novio, tratas de superarla y mejor te fijas alguien que este libre y este interesada en ti. No pierdas tu tiempo por una chica que no sabes si algún día te corresponderá. Ya si en algún momento ella esta soltera igual que tu y quieres inténtalo pues lo intestas, solo no te tortures esperando a que ella haga de el primer paso.

—Lo pensare...!auch! —siento un golpe en mi cabeza baja, veo a Isaac reír.

—¿Y si vamos al gimnasio? Te ayudaría a distraerte y no estar de loco obsesionado con esta chica. Soy bueno enseñando , solo mira este cuerpo—lo veo levantarse y sacarse la camisa la cual me permite ver el buen trabajado cuerpo de mi hermano. Para tener solo veinte años mi hermano demuestra que es bueno en lo que le gusta, hacer ejercicio, ser mujeriego, y estudias leyes.

—A papá no le parecerá una buena idea.

—Al menos péinate un poco entonces, creo que Lacey viene este viernes podría ayudarte con eso.

Niego con la cabeza.

—No quiero cortar mi cabello, tendré frio en mi cuello y eso que aun no llegamos a diciembre, me congelare. —el solo ríe.

—Para eso hay bufandas tonto, pero creo que será imposible convencerte así que mejor iré a comer algo.

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Necesito aumentar un poco de peso.

Me observo en el espejo, mi uniforme escolar es bastante aburrido. Y después de estar pensando en la palabras que me dijo Isaac ayer, no puede evitar pensar que un cambio no seria malo. Coloco mis gafas naranjas y sin peinar mi cabello bajo a la primera planta para encontrarme a papá preparando el desayuno.

— ¿De nuevo avena?—pregunto desanimado cuando papá coloca el plato frente a mi.

—No es solo avena hijo, también hay fruta fresca y nueces, es por tu bien y lo sabes.

—Comer sano cansa— me quejo pero aun así comienzo a comerme mi desayuno, se que lo necesito.

—Lo se, se que llegas a cansarte de llevar una rutina y no poder disfrutar de todo, pero no quiero perderte Lucas—dejo de comer y observo a papá, luce preocupado.

—No lo harás papá, el susto ocurrió hace años, tu, mamá, mis hermanos incluso Fran y su hermano Fred se han encargado de mantenerme sano, pero aun así creo que mantener esta dieta estricta después de que el doctor dijera que ya no era necesario es demasiado, obviamente no iré a comer solo papas fritas y gaseosas, solo no se ¿Algo que ya no sea solo avena por las mañanas?—lo veo sonreír y me siento mejor porque su preocupación desaparece.

—De acuerdo, variaremos pero la semana que viene te toca estar con tu madre por lo que tendrás que convencerla a ella también.— bufo y el ríe para después retomar el desayuno.

—Tengo pensado ir al gimnasio con Isaac—le menciono a papá mientras tomo mi mochila y la coloco sobre mis hombros.

—¿Para que?

—¿No me ves? estoy súper delgado, quiero tener un par de músculos aquí— señalo mis brazos— un par de tabletas de chocolate como los que tiene Isaac aquí— señalo mi abdomen— papá ríe.

— Solo si tienes cuidado e Isaac esta contigo, no quiero que te lastimes.

— No lo hare lo prometo.

Después de recibir su beso en mi frente-porque aunque ya esta bastante grande papá no me deja salir de casa sin antes darme un beso en la frente-subo a mi auto y lo pongo en marcha.

Me siento bien, pero algo dentro de mi me dice que eso cambiara.

En Arlington (#0) [TERMINADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora