Lost Chilean | Quinto Escalón. (Editando)

Capítulo 20

Todo ese día la pase la raja, el Dam me hacía reír a cada rato diciendo cualquier estupidez, más amigos así.

Ahora me estaba arreglando porque todos se venían a mi casa, #valentinasacacasa.

No estaba lista y los pibes iban a llegar en menos de diez minutos.

Les dije a las Díez y son las Díez y veinte,típico.

Mi papá dijo que estaba bien siempre y cuando no haga ninguna estupidez de la que me arrepienta, él se había ido donde un amigo porque jugaba nose quien y bla bla.

Casa sola.

Me vestí re flash y bajé al sentir el timbre. En la puerta de encontraba la mayoría, ¿estos venían juntos o que?

Tengo la teoría de que hacen casi todo juntos, hasta quizás se bañan juntos.

—Hola, pasen– En la mesa había la mayoría de tragos que tenía mi viejo escondido por ahí, aparte los chicos habían traído más así que la mesa estaba repleta de todo.

—Eh wacha, ¿y la música?— Pregunto Mauro desde el sillón.

—Conéctalo a Bluetooth o pone en la Tele— Grite mientras abría la puerta, era el delivery de la comida.

Como no sabía que wea iban a comer, compre sushi y pizza porque no tenía idea.

Le pague y deje las cosas en la mesa de centro.

El ambiente estaba piola, todos estaban hablando, algunos fumando, otros en su vola y la música estaba buena.

—Ey enana, invite a más gente, ¿no hay problem?— Me habló Dam desde la puerta de la sala.

—Inviten a quien quieran, ya guarde todo lo que tenía que guardar— Me encogí de hombros y seguí haciéndome un trago.

A la hora sentí el timbre pero Damián se paró a abrir. Por la puerta entraba y entraba gente, mejor, aunque los weones me van a tener que ayudar.

Encima como es mi casa, voy a tomar como nunca weon.

Si no saben más de mi, ya tienen la respuesta.

En un rato vi a lo lejos a Dakillah, que es guapa esa mina.

Me acerqué a hablarle porque si.

—Hola— La salude con un beso en la mejilla.

—Hola ¿Sos Val o me equivoco?— Tomó de su vaso.

—La misma, te quería decir que sos seca y que la pases bien, chao— Weon ya estaba re mareada, estoy quedando re fan.

—Ay gracias— Dicho esto me di media vuelta y me fui a sentar con Marcos que tenía cara de amurrado.

—¿Qué pasa Marquitos?— Le hable al oído.

—Salgamos a hablar al jardín— Me habló devuelta, lo agarré de la mano y nos guíe al patio.

—¿Que tienes?— Le di otro sorbo a mi vaso, que estaba fuerte la wea.

— Mi ex que me hincha las pelotas con giladas que pasaron hace banda— Como que entendí pero no entendí.

—Despreocúpate, o al menos por hoy, mañana hablamos mejor, pásala bien no seai aweonao— Lo abrace cortamente y fuimos adentro nuevamente.

Weon la noche recién empieza.