Al día siguiente desperté medianamente temprano, sin muchas ganas de hacer nada, pero de todas formas me levanté para salir a caminar un poco, poder despejarme y olvidarme de la mala noche que había tenido. Me arreglé apenas, amarre mi pelo en una cola de caballo, me puse unos joggins y una remera manga corta con zapatillas y bajé a desayunar. En la cocina ya se encontraba mis padres y Dean.
-Buen día familia. - Saludé sin entusiasmo.
-Buen día cielo. - Contestó el matrimonio al unísono. - ¿Que vas a desayunar? - Preguntó mi madre.
-Nada, no tengo mucha hambre, tenia pensado salir a caminar un poco. - Dije sin mirar en ningún momento a mi guardaespaldas que comía su desayuno en silencio y tampoco había tenido intención de saludarme.
-Ya terminé, vamos. - Dijo fríamente.
-Tenía ganas de ir sin acompañante. - Retruque, no quería pasar tiempo con él, y menos a solas.
-Que mala suerte, no va a poder ser. Me pagan por seguirte a sol y a sombra y procurar que nada malo te pase. - Me dijo mirándome fijo a los ojos.
-¿Algo malo como lo que ya me pasó cuando tenía 13 años? ¿A eso te referís? - Le pregunté con dolor y bronca. Me arrepentí al segundo y salí del lugar dando un portazo. Escuché sus pasos detrás mío cuando dejé la casa y comencé a caminar rumbo a la plaza.
-¿Qué fue eso? - Se quejo cuando se puso a la par mío.
-¿Qué cosa? - Pregunte haciéndome la desentendida.
-Eso, hablar de tu pasado de esa forma, haciéndome sentir culpable de algo que no hice, y que por el contrario, te ayude a salir.
Pare de caminar y me puse frente a él.
-¿Me ayudaste a salir? Vos no tenes idea de las veces que soñé con ese episodio, las veces que desee que hubieses actuado antes, antes de que esos tipos asquerosos se llevaran lo más preciado que tenía para dar. No tengo nada que agradecerte, no te debo nada. ¿Con qué me ayudaste? ¿De qué me salvaste? Fuiste sólo un cobarde, que no se animo a actuar cuando más se lo necesitó. Vos deberías agradecerme que no le dije a mi padre que vos fuiste uno de los que me secuestró, te pudrirías en prisión. - Dije y ambos nos quedamos en silencio. Quiso hablar pero no le salió nada, lo vi dolido, arrepentido y lastimado. Note que le hacía mal remover la mierda del pasado, pero yo aún seguía con muchas dudas, todavía quería saber por qué el "trabajaba" con esos tipos, qué lo unía a ellos. Y tenía la necesidad de herirlo de alguna forma, así como él me hirió al rechazarme de esa manera.
Preferí dejar todo así y me limite a seguir caminando, sin reparar en sí él venía detrás.
Afortunadamente no fue así, supongo que se dio cuenta de que no era buena idea y prefirio dejarme sola antes que seguir discutiendo.
No recuerdo cuantas horas habré caminado sin un rumbo fijo, sin mirar hacia ningún lado, sólo caminaba y respiraba, me concentraba en mi respiración como un inútil intento de meditación. Nunca fui muy buena para esas cosas.
Me sentía mal por haberle hablado así, pero me salió desde lo más profundo de mi ser, tenía mucho acumulado, necesitaba descargar mi ira y mi angustia, y él era la persona indicada para hacerlo. O tal vez no.
Cuando regrese a casa ya habían almorzado, mentí diciendo que había comido algo en un carrito de comida rápida y subí a mi habitación para encerrarme el resto del día.
Me cambié el pantalón por un short y me acosté a escuchar música con auriculares, sin darme cuenta me dormí y cuando desperté la lista de reproducción ya había terminado y la puerta no paraba de sonar, quien sea que esté del otro lado era demasiado insistente.
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Savior
RomanceEllos son muy distintos, pero un pasado los relaciona de la forma más oscura y cruel. ¿Habrá esperanzas para estos jóvenes con almas destruidas?