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Ana María POV

Es de noche. Estamos en la calle. No tenemos ni putera idea de en donde estamos. Hermoso.

-¿Vamos a esa casa?- Señalo la casa- No parece tan mal.

-No es como si realmente tengamos otra opción, así que andando mis valientes- Dice Justina.

Entramos a la casa, esta patas para arriba pero al menos sin sangre por todos lados y tiene camas comodas. Perfecto.

-¿No seré yo algún tipo de bruja?- Soy fantabulosa.

-No, deja dormir- Dice cortante mi queridísima amiga.

-Lo mismo que dijo ella.

-Que aburridos- Digo y me voy a dormir.

.

Me despierto en el piso gracias a Justina. Genial manera de empezar el día.

-No te despertabas- Se defiende.

-Ah bien, pan y gracias. Ahora vayase que me tengo que cambiar- Me hace caso y se va como si el viento se la llevara.

Me visto con la ropa de la pendeja esa y cuando termino voy a la cocina para ver que clase de aire tenemos para comer hoy.

-Hola- Me saluda Kel.

-Hello, Its me- Ay pero que normal soy.

-Encontre sopa de pollo en lata en los cajones de la cocina, parece que se pueden comer- Informa Justina con dos latas en la mano.

-Eso lo descubriremos en breve ¿Hay gas?

-Si, pero queda poco- Me advierte Kel.

-Bueno mi queridísimo no amigo, te voy a informar que hago magia.

Agarro 3 latas, las abro y vuelco la sopa en una sartén. Espero que así se cocine, la verdad núnca en mi vida toqué una estufa, una sartén o lo que tenga que ver con la cocina.
Prendo la estufa y empiezo a cocinar, o eso espero que esté haciedo.

Cuando termino, o eso creo, sirvo la sopa en 3 platos hondos.

-Vengan a comer.

Los dos llegan como si no hubieran comido en días. Que exagerados.

-¿Esto de verdad se puede comer?- Kel mira mí sopa con desconfianza. ¡Como se atreve!

-Obviamente si- Digo indignada.

Nos sentamos en el salón a comer mi deliciosa sopa.

-No está tan mal- Comenta Justina.

-Obviussly.

Ya habíamos terminado de tomar la sopa cuando escuchamos disparos afuera de la casa.

-A la verga- Dice sorprendida.

-¿Vámos a ver quiénes son?- Pregunta Kel. Estás demente parker.

-Ve tú- Le digo. Ni loca voy a ver a que le están disparando esas personas.

-Bien, recuerdenme como un heroe- Dice y sale fuera.

-¿No tendríamos que seguirlo?- Pregunta.

-¿Tú crees?

-Sep.

-Bueno, seamos humanas y sigamoslo desde lejos- Propongo.

Salimos sin hacer ruido y lo seguimos discretamente. Dos hombres armados lo estan apuntando.

-La virgen...- Dice shockeada.

-Está en maravillosos problemas.

-Divis divis.

-¿Qué hacemos?- Pregunto.

-No podemos ayudarlo- Que pena.

-¿Cómo te llamas chico?- Pregunta el barbudo.

-Kelvin- Responde tartamudeando.

-¿Estás solo?- Pregunta el otro hombre. Pelado, por cierto.

-... No lo sé.

-¿No lo sabes? No juegues con nosotros- Dice esta vez el barbudo mirándolo con mala cara.

-¿Ustéd como se llama?- Le pregunta al pelado.

-Octavio.

-Queda con su cara.

-¿Con mí cara?

-Si, con su cara de Octavio

-Muy gracioso muchacho ¿Quiéres morir?- Amenaza el barbudo.

-No.

-Entónces no lo pidas a gritos como recién- Advierte el pelón.

El simplemente se queda callado. ¿Qué pasará ahora?

~❤~

Dos idiotas entre zombies.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora