Estoy muy descompuesta, ya no se si son los nervios o que es lo que me pasa.
15/09/17
Deben ser las 07:15 porque esta es la hora a la que me levanta mi mamá para cambiarme he ir a la escuela.
-Ma, estoy muy descompuesta- mentí.
-Uh hija... bueno, dormí que le vamos a hacer, hoy voy a sacar turno con el médico- me dijo preocupada.
No es de forra o tenía demasiada vagancia para ir a la escuela, sino que hoy tenía una prueba de la que no entendía nada y un trismestral de geografía que se me habían mezclado todas las ideas y no entendía un carajo. Era algo importante porque ya cerraba el segundo trimestre y no me había ido tan bien como en el primero- aún me sorprende que haya podido aprobar una prueba y más si es matemáticas... si, mejor ni hablemos de eso.
¿Por qué mi mamá accedió tan rápido a que no fuera a la escuela por una simple descompostura?
Porque ya hace unas semanas que vengo con estos dolores fuertes en la costilla y a veces me cuesta respirar, me descompongo muy seguido y ya no como tanto como antes, literalmente pasaba 1 hora desde que había almorzado y ya estaba comiendo alguna pelotudes que encontraba por ahí- supongo que es normal, soy una adolescente y aún estoy en crecimiento.
Unas horas después:
- Desayuna rápido y cambiate asi vamos al médico- mi mamá me había sacado turno con Ricardo, el doctor con el que me había empezado a atender cuando estaba enferma desde hace 3 años pero me conocía desde que era bebé.
-Oka- le respondí y tome el primer trago de mi merienda. Siento que voy a vomitar. ¿Que carajo me pasa ahora?.
Llegamos y nos sentamos en la sala de espera. Estaba aburrida asi que escribí el segundo capítulo de esta historia.
-Luján- me había llamado el ayudante del doctor, bueno más bien era un estudiante que estaba acompañado por dos chicas que también lo son, creo que era la tercera vez que los veía asi que ya los conocía.
Entramos al consultorio, los saludamos y el doctor me preguntó:
-¿Como estás?
- Bien - ya era como una costumbre decir "bien" cuando alguien me preguntaba eso y no me sentía realmente bien asi que...- más o menos.
- ¿Te duele algo?
- Sí, es acá- le apunté con el dedo la última parte del estómago que está entre las dos costillas- siento como si fuera un... vacío, como que me cuesta repirar.
-¿Sentís como si fuera un ardor que va desde el estómago hasta la boca?- al parecer sabía a lo que me refería.
- Sí, es raro.
- Sentate, te voy a tomar la respiración- me dijo apuntandome la camilla que estaba a su lado. Me senté y comenzó a tomarme la respiración mientras le preguntaba a mi mamá...- ¿Está con muchos examenes?
- Sí, hoy tenía el trimestral de geografía- le respondió mi mamá.
- Ajá! Ahí está. El Rey León- ¿que? - Tu respiración está perfecta - me dijo caminando hasta su escritorio para luego sentarse frente a nosotros.
¿Alguien me puede explicar que está pasando? ¿Nadie? Ok, sigamos.
- El Rey León- repitió tocandose la cabeza. Ok ya entendí, está diciendo que es mi cabeza- estás muy estresada porque tenés muchas pruebas, ya cierra el trimestre, tenés muchas cosas en la cabeza. Necesitas descargarte con algo. Antes hacías basquet pero lo dejaste porque no te gustaba competir- cuando voy a su consultorio el me pregunta y yo le respondo, me cae muy bien y por lo general soy muy cerrada con todos- asi que tendrías que dejar estos nervios en otro lugar, que se vayan. Deja el celular, usalo al menos 2 horas y después lo dejas y a las 22:30 o 23:00 de la noche, ese teléfono tiene que estar apagado.
Mientras decía eso, a veces mencionaba la escuela lo cual me ponía más nerviosa y me daban ganas de vomitar. Tenía razón, tengo que tranquilizarme.
Me dio unas pastillas para que esté más relajada y me dio el sertificado médico ya que había faltado esa misma mañana a la escuela.
Empecé a pensar sobre la escuela ¿Que voy a hacer si no me dejan rendir el trimestral? No puedo desaprobarlo. El lunes tengo ese trabajo de historia que todavía no terminé. No tengo ni la más mínima idea de cuando es el trimestral de lengua. Y... ¿Cómo me fue en esa prueba de matemáticas? Sentía que me iba a explotar la cabeza, sentía que me iba a desmayar en cualquier momento.
Respira profundo y tranquilizate.
A veces decía eso para calmarme. Cuando estaba muy enojada, triste, nerviosa o bajoneada.
- ¿Estás bien hija?¿Querés que hablemos?- mi mamá es muy atenta conmigo y de verdad estoy muy agradecida de eso pero algunas veces era mejor dejarmelo para mi o contarselo a mi hermana porque mi mamá se hacía mucho la cabeza.
- No mami, estoy bien. Un poco nerviosa pero bien.
- Bueno, te amo.
- Y yo a vos.
Sentía olas que no paraban de chocar contra las grutas pero al mismo tiempo sentía un vacío.
Hoy es 10 de junio del 2018 y esto fue escrito en septiembre de 2017.
Bueno al final aprobé geografía con 8, lengua con 9 y matemáticas con 7.
Vuelvo a sentirme asi y es constante, vienen las pruebas y no de que hacer, ya estoy en 2do año y tengo pruebas todas las semanas. La semana que viene tengo 5 pruebas y no me entra nada mas en la cabeza. Pareciera que los profesores lo hicieran apropósito.
Mi profesora de Cívica, una de las mejores profesoras que hay, con la que mas entiendo lo que explica. Me preguntó que me estaba pasando, porque el año pasado me habia ido tan bien que este año estaba como aflojando o muy distraida con algo. Me preguntó si estaba bien, si pasaba algo en mi casa, si quería hablar o algo. La verdad que me sorprendí, ella no es de ser tan demostrativa con los alumnos, pero que bueno que lo haya hecho conmigo. Ella había notado que algo me pasaba y gracias por eso.
Me dio otra oportunidad con las pruebas, asi que espero no desaprobecharla.
Esos detalles de preguntar realmente ¿como estás? Es algo en serio muy importante, no lo olviden.
Lc.
