Hurt For Love

Parte 2

JeongHan se cepillo las hebras de los cabellos fuera de su frente y se sento en su cama mientras acomodaba cajas de fotos buscando un pequeño cofre que había guardado hace años.

La mayoria de ellas eran de su adolescencia, muchas de ellas solian ser de el junto a SeungCheol y Jisoo.
Conocio a ambos chicos cuando se traslado de la isla de Dokdo a la capital de Seul.

Conocio primero a SeungCheol quien lo recluto para la clase de gimnasia.
El era tipico chico, popular, deportista, pero un nerd e inteligente y una gran persona.
El mismo dia que SeungCheol lo tomo bajo sus alas, se sintio tan agradecido, que incluso nunca pudo odiarlo por robarse a su alma gemela.

Y asi fue como Yoon JeongHan conocio a Hong Jisoo, la persona que el destino eligió para el.
Su alma gemela.

Cuando SeungCheol le dijo que estaba de novio con un chico JeongHan ni siquiera que molesto, SeungCheol le explico que salian hacia un año, eran demasiado jóvenes cuando sintieron que las mariposas volaban de aqui para alla.

Citas de estudio, cine, batidos.
Y asi con el corazón acelerado Hong Jisoo fue de Choi SeungCheol y Choi SeungCheol fue de Hong Jisoo.

JeongHan habia llegado tarde.

La persona que le pertenecia por naturaleza, le habia dado su corazón a alguien mas.

Y asi vivio su vida.

Viendolo feliz, viendolo enlazar su vida como la rama de una vid al lado de SeungCheol y el solo ser su mejor amigo.
Porque no importa que SeungCheol pelee a Jisoo y le diga que el lo vio primero, todo el mundo sabia que el mejor amigo de Yoon JeongHan era Hong Jisoo.

Una vez que consiguio el pequeño cofre se sento con el entre sus manos, solo observando, solo contemplando la idea que ronda por su cabeza.
Y luego la voz de su madre hace eco en medio de su cabeza

"Esta banda de plata es para que use aquella persona que el destino te ha dado para que sea feliz"

Nadie le dijo que su alma gemela seria feliz sin el.

Nadie le dijo las consecuencias de amar y no ser correspondido.

Nadie le dijo que estaba muriendose lentamente.

Suspiro tragando sus lagrimas y sintio las punzadas familiares apretar sus pulmones.

Con manos temblorosas dejo el pequeño cofre a un lado de la cama y miro el frasco pastillas que estaban a su lado.

-Te juro mama que Jisoo sera feliz- Dijo en un murmullo. Tomo el telefono y marco el numero que habia llamado hoy temprano.

Uno tono.

Dos.

Tres.

-JeongHan ¿Que ocurre?- Sintio las espinas subir y empezar a extenderse cada vez mas rapido por su garganta, y antes de que su voz saliera entrecortada hablo.

-Tengo el regalo perfecto para que le des a Jisoo SeungCheol, solo tienes que venir a buscarlo.

-Oh dios! Siento que te amo Yoon JeongHan, me he estado volviendo histerico buscando algo.

-Solo ven- Corto la llamada y tomo el frasco de pastillas, se dirigio al baño mientras sentia que el aire comenzaba a faltarle y la opresion de su pecho se extendia hasta llegas a su corazón, sentia a las espinas enredarse en su traquea y cerrarse a su alrededor mientras las espinas se clavaban cada vez mas profundamente.
La sangre comenzó a brotar y el comenzó a entrar en panico.
Pero antes de arrepentirse hizo lo unico que haria que sabia que no podia salvarlo.

Vacío el pequeño frasco en la pileta y dirigio su vista al espejo.

La ultima mirada sin vida hacia su reflejo.

El ya no podia.

Ya no habia fuerza.

Ya habia perdido todo sin siquiera pederlo.

Y sonrio.

"Que seas feliz Jisoo-ah"

Y luego sintio las espinas romper la piel de su garganta, apretarla, y luego ya no sintio nada".