Una carta abierta - La lucha interna

III

Mente permanecía inmune ante aquellos comentarios ofensivos. - No me culpes a mí, tú fuiste quien nos colocó en esta situación desde un principio- Comentó con toda calma. -Tu eres el idiota que vive en un mundo de sueños, no yo-


-...-


- A ver Corazón- Comentó Mente como quien tiene intenciones de culpar a alguien. - ¿Acaso te has mirado en el espejo? ¿Acaso te has fijado en cuantas heridas tienes? ¿No te son suficientes? -


Corazón permaneció en silencio, mientras se tragaba su enojo y escuchaba las palabras de Mente.

Yo aún permanecía inmóvil, mirando todas las rocas que había apilado hasta el momento. ¿Que me estaba pasando? Era mas que obvio que ya no era aquel niño feliz de años atrás.

Duele, ¿verdad? - Comentó Corazón nuevamente dirigiéndose hacia mí. -Podre tener todas a heridas de este mundo, pero al menos no soy como el hipócritae impostor al cual le haces caso- Seguía dirigiéndose hacia mí.

- ¿Impostor? - susurró Mente. - ¡Tu, corazón idiota, tu solo buscas lacompañía de alguien más, la aprobación de los demás! - Comentó. - ¡Sin embargo,yo buscaba nuestro bienestar! ¡Buscaba que estuviéramos a salvo! -


- ¿A salvo de tus paranoias o de tus malos recuerdos? - Respondió el Corazóncon tono sarcástico.


- ¡A salvo de tus malditas ilusiones! - Exclamo con furia la Mente sintiéndoseofendido por aquello. - ¡A salvo de tus malditas tonterías, a salvo de ti y tusmalditos errores de entregarte por completo a alguien! -

- Tu...-