¿Te Conozco?

He Knows My Name

A lo largo de todas las clases del viernes estuve mirando a todos lados intentando buscar a la persona que me había mandado mensajes la tarde anterior.

Sin embargo, era una tarea totalmente inútil ya que no tenía idea de quién podría ser.

¿Acaso era el chico que se la pasaba durmiendo todas las clases en la banca del fondo?

¿O quizá el chico que jugaba con su celular cuando se aburría?

Lo único que sabía era que aquel chico iba en mi salón ya que había dicho que yo era la más inteligente del salón.

A la hora del descanso me senté en una mesa al fondo de la cafetería, mientras tomaba un poco de agua mi teléfono comenzó a sonar.

Número desconocido:
No te distraigas tanto en clase Chaeng o dejarás de ser la más inteligente del salón.

¿¡Cómo era posible que me hubiera vuelto a mandar mensaje!?

Se supone que lo había bloqueado

¿Cómo sabía también que me decían Chaeng?

Tú:
¿Cómo es que puedes mandarme mensajes si te bloqueé ayer?

Número desconocido:
Intercambié teléfono con mi hermana.

Por cierto, gracias por decirme que me bloqueaste, eso demuestra tu interés en mi :3

¿A qué se refería con 'tu interés en mi'?

Tú:
¿Estas drogado?

Número desconocido:
Oh mierda
No me digas que estás también detrás del edificio de la preparatoria.

Tú:
¿Qué?

Número desconocido:
¡El porro no es mío!

Tú:
Definitivamente estás drogado y no tiene más sentido que volvamos a hablar.

Número desconocido:
Espera

Tú:
¿Qué quieres?

Número desconocido:
Ayer no me respondiste

Tú:
????

Número desconocido:
¿Irás a la fiesta de Nichkhun?

En ese momento sonó la campana anunciando el final del receso, me apresuré a terminar la hamburguesa que estaba comiendo y me dirigí al salón de ciencias.

Al ser siempre de las primeras en llegar me senté en las primeras bancas, mientras los demás chicos iban llegando decidí intentar descubrir quién era el chico que me escribía.

Desbloqueé mi celular y envié un mensaje esperando que alguien sacara su celular y lo checara.

Tú:
¿Por qué tanto afán en que vaya a la fiesta?

Esperé a que alguien sacara su teléfono y checara el mensaje, observé a todos los chicos que entraban pero ninguno sacó su celular.

Cuando el profesor entró di un vistazo rápido a mis compañeros pero nadie tenía el celular afuera.

Me resigné y me di la vuelta, conforme avanzaba la clase me fui aburriendo y comencé a dibujar en las últimas hojas de mi cuaderno. Dibujar era mi pasatiempo favorito, siempre que tenía un rato libre me ponía a dibujar o pintar, en casa tengo un caballete y un estuche de pinturas profesional, así como un estuche de colores bastante completo.

Cuando terminaron las clases me dirigí hacia mi casa, Mina tomaba clases de danza terminando la escuela así que no me preocupé por que me recordara de la fiesta

Bueno, no preocuparme es un decir, aún estaba el asunto del chico de los mensajes.

Llegué a casa y me preparé algo de comer, a diferencia de toda la semana, los viernes mi madre solía trabajar hasta tarde, por lo que siempre me tocaba prepararme algo de comer.

Mientras comía volvió a sonar mi celular, ya estaba empezando a acostumbrarme.

Número desconocido:
¿De verdad creías que iba a sacar mi teléfono cuando me mandaste mensaje?

Que tierna.

Sentía como si estuviera jugando al gato y al ratón con un completo desconocido, ahora se cómo se sentía Kira intentando descubrir el nombre de L y cómo se sentía L intentando descubrir a Kira.

Tú:
No perdía nada en intentarlo.

Número desconocido:
En cierto punto tienes razón.

Y respecto al afán de que vaya, es porque quiero hablar contigo, empezamos con el pie izquierdo y quería disculparme por eso.

Tú:
¿De verdad crees que voy a aceptar tus disculpas?
¿De verdad crees que quiero conocerte?

Número desconocido:
Si no quisieras ya me hubieras bloqueado otra vez.

Tú:
Te odio.

Número desconocido:
Al menos sientes algo por mí.

Tú:
No te emociones.

Número desconocido:
No prometo nada.

¿Entonces irás o no?

Tú:
¿Cómo te reconozco si vas?

Número desconocido:
Ya me reconocerás cuando me acerque a ti.

Tengo que irme, mi hermana está buscando su celular.

Tras despedirse de manera apresurada se desconectó.

No sabía que pensar, sentía la curiosidad de conocer al chico que me mandaba mensajes.

Busqué el número de Mina y le marqué

"¿Chaeng?" Preguntó al contestar "¿Qué ocurre?"

No podía creer lo que iba a decir, tomé aire y suspiré pesadamente

"¿Aún quieres que vaya contigo a la fiesta?"