never mind the odds (I'm gonna try my luck)| stylinson [español]

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Harry llegó al hospital un jueves por la mañana con el paso apresurado. Era el primer día en que Louis lo estaría siguiendo en trabajo para el perfil, el primer día que pasarían juntos. Lo que significaba que podría compensar lo que hizo mal su primera y segunda impresión.

Aún se siente algo avergonzado cada vez que recuerda la manera en que invitó incómodamente a Louis a ir a su departamento como si fuera un horrible y raro asesino en serie. Sin mencionar los chistes de Harry Potter. Y hablándole a Louis sobre sus perros tres segundos después de haberlo conocido.

Es sólo que, Louis era estúpidamente lindo con estás magníficas mejillas y unas largas pestañas indecentes, y unos preciosos labios rosados que parecía que lamía mucho más que una persona común. Era demasiado para asimilar para una persona que no tuvo ninguna advertencia como Harry, quien estaba algo abrumado.

Pero hoy era un nuevo día y él estaba decidido a mostrarle a Louis que era una persona completamente normal que era completamente capaz de interactuar normalmente con otros humanos.

Cuando giró en una esquina hacia su oficina, se encontró a Louis ya esperando, apoyado en la puerta cerrada con un pie sobre la pared que tenía detrás.

Harry encendió su iluminada sonrisa, la que usaba cuando tenía que pedirle un favor a alguna de las enfermeras o cuando un atractivo extraño se le acercaba a decirle lo lindos que eran sus perros.

"Hola, Louis," sonrió, desbloqueando la puerta y haciéndole una seña a Louis para que entrara.

Louis apenas alzó la mirada de su notebook. "Buenos días, Dr. Styles," dijo secamente.

"¿Dr. Styles no es muy formal? Puedes llamarme Harry," insistió, aún sonriendo forzosamente hacia Louis.

Louis ni siquiera sonrió un poco. "Harry, entonces. ¿Empezamos?"

Su tono era serio, había algo en la manera que apretaba los labios ligeramente, en como sus hombros se encorvaban, y su intensa y atormentante mirada que era distante o retenedora, o—algo. Era algo desconcertante.

"Em—sí, ¡claro!" dijo Harry de forma animada. "Tengo que hacer una cirugía de levantamiento de frente esta tarde y pensé que podrías mirar desde la galería. Pero antes de eso, tengo consultas y algunos pacientes que ya accedieron a que escuches y apuntes. Nick me envió por fax los documentos que mencionaste el otro día—esos donde acceden a hablar contigo si tu aceptas no usar sus nombres. Tengo pacientes que ya los llenaron y solo falta tu firma."

Notó satisfactorio como Louis miró algo impresionado. La hora que Harry pasó investigando el "periodismo médico" (cosa que ni sabía que existía hasta hace unas 48 horas) había valido completamente la pena.

"Eso—uh, suena genial, en realidad."

Harry cruzó sus brazos sobre su pecho y miró a Louis con una sonrisa juguetona. "Pareces sorprendido de que en realidad soy algo decente."

Las orillas de los ojos de Louis se arrugaron cuando por fin le regaló a Harry una sonrisa sincera. "No estoy sorprendido, solo complacido," corrigió. "Quizás te estás adelantando y eres tú el que está sorprendido por ser algo decente."

Una ruidosa carcajada se escapó de los labios de Harry. "No pasa muy seguido, eso sí," accedió.

Louis enarcó una ceja y abrió su boca para responder, pero luego volvió a cerrarla y miró hacia el suelo. Cuando alzó la mirada, su expresión seria había vuelto. "Deberíamos irnos, ¿sí?" dijo con rigidez.

Harry trató de no molestarse al respecto mientras asentía con una pequeña sonrisa. "¡Sí, seguro! Um, déjame traer mi delantal y podemos irnos al cuarto piso."