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Capítulo 3: Golden Wish

Habían pasado casi tres días luego de que asumiera el papel de Bunny Bon, y los medios no tardaron nada en hacer eco de mi presencia. Bueno, en cierta forma eso era bueno, ya que aceleraría el proceso de encontrar a los asesinos de mi padre, pero lo malo es que también llama la atención de personas extravagantes o deseosas de tener sus cinco minutos de fama, mandándome "cartas de desafío" para que tratara de robar sus objetos valiosos, con una esperanza de que fracase y así ellos asumir la gloria de derrotar al famoso ladrón.

Me reuní con Don Toño después de clases en el bar donde me indicó que trabajaba el día siguiente de nuestro rencuentro. Aún no había clientes a esa hora fijada, así que no afectaría en nada el negocio. "Pomme Dorée", es como se llama el sitio, y es bastante conocido por los tragos en base a manzana del dueño, por lo que comprendí que no le fue demasiado mal luego de lo ocurrido con papá. Apenas llegué, nos pusimos a analizar el primer desafío que recibí.

Fue publicado en un periódico local de gran prestigio, y éste ocupaba toda la página. En resumen, una gran familia de Inglaterra me invitaba a tratar de robar el legendario diamante amarillo "Golden Wish", el cual pertenece a la misma desde hace más de 300 años. La cosa no acababa allí, ya que al final ponían una posdata.

-Junto con la joya, la verdad saldrá a la luz.-Leí en voz alta aquella parte.-Vaya forma rara de terminar una carta-concluía confundido.

-Creo que sé a qué se refiere, Joven Bon.-Me decía Don Toño en lo que terminaba de secar una copa. Acto seguido, prendió el televisor y lo puso en el canal de noticias.

El proclamado sucesor de la fortuna Hakuba, llamado por sus fanáticas como "The Golden Boy", estará por nuestra ciudad estos días custodiando la famosa joya perteneciente a su familia, la cual llegará a la exhibición especial del museo municipal, y se enfrentará nada menos que contra el ladrón fantasma, Bunny Bon, claro, si éste acepta el desafío. Cabe resaltar que Golden regresa al país luego de haber viajado hace unos años, a donde se encuentra ahora la familia principal. Seguiremos informando para más detalles, pero ahora, unas palabras de nuestro aclamado detective juvenil que grabó esto antes de salir de Inglaterra.

-Bunny Bon, estaré feliz de demostrar que no eres capaz de ganar a alguien como yo. No te llevarás el diamante de mi familia conmigo presente. ¡La verdad saldrá a la luz!

Apagaba el televisor de mala gana.

-Genial, me ha desafiado un detective de mi misma edad con complejo de niño bonito, y sobre todo ricachón.-Hablé cansado del espectáculo que acabé de observar y tapaba mi rostro con la mano derecha.

-¿Qué hará Joven Bon? ¿Responderá la carta?

-¡Claro que debo hacerlo! No puedo desaprovechar esto si es que quiero encontrar a quiénes mataron a papá. Además, no quiero que piensen que soy un cobarde que huyó de alguien como él.

-Está bien. Entonces, debe mandar su respuesta lo antes posible. Por cierto, ¿no ha tenido problemas en que los jóvenes Nakamori sepan que está aquí?

-No te preocupes por eso. Ambos estaban ocupados hoy. Meg te reconoció apenas te vio cerca de casa, y Foxy... bueno, es Foxy.-Concluía con una risita.

Dicho esto, continuamos planeando lo que debíamos hacer con respecto al robo, y al terminar regresé directo a casa antes de que se hiciera muy tarde.

....

Aprovechando que era domingo, aproveché en pedirle a Meg si podía acompañarla para llevarle el almuerzo a Foxy, y de paso ver el dichoso museo, lo cual era una finta para estudiar el lugar y preparar las trampas y trucos.