Capítulo 50: Infancia

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-La ayuda que obtuve de ustedes fue lo mejor, gracias por cuidar a Josh y a mi.

La atracción y el interés que tiene Tyler hacia Jenna nunca se había roto, ya que la chica nunca lo había dejado.

Para él es una diosa, da igual si los demás piensen de que éste está loco por decir que ella es la Luna.

Lo único que se debe de mantener es esa confianza que hay y va a seguir por años.

9, 8, 7.

Se había demorado en trasladarse, el trayecto de cambio de épocas fue muy repentino para su vacía cabeza, por lo que está le empezó a doler.

Cuando abrió los ojos con pesadez, observó a su alrededor un hermoso día con el sol iluminando al mundo del cual aún sigue parado.

Su entorno es amigable y puro.

- Hace tiempo que no huelo un día tan lindo como este- Dedujo, observando un parque con grandes árboles y muchos juegos infantiles, habían muchos niños jugando en ellos.

En todas esas criaturitas rondaba la felicidad, pero el castaño se fijó en uno de los pequeños que no está tan contento.

Este se encontraba en una banca del parque mientras movía sus piernas de lado a lado con su cabecita mirando hacia el suelo.

Tyler se acerca, sentándose al lado de él.

-¿Qué te ocurre pequeño?- Preguntó amablemente Tyler.

El niño lo miró, haciendo una mueca de disgusto al ver aquel castaño que se parece bastante a él-Espero a un amigo que fue a comprar con su mamá.

Tyler no puedo creer lo que veía, es él en verdad. Su misma persona pero con muchos años más joven.

Por lo que este, rápidamente de su mochila saca el gorro rojo que usaba en clases, finalmente se lo puso para no asustar más al niño.

-¿Y-Y cómo se llama?- En verdad éste no se acordaba de este momento, él quería recobrar estos lindos momentos, pero luego sabía que lo iba a olvidar cuando cambiaría la historia de su verdadero pasado.

- Jish, es un muy bien amigo y lo conozco desde hace varios meses- Sonrío, sus lindos dientes de leche se hacían notar con el brillo del sol.

-¡Tyler!- Se escuchó un grito de un niño, por lo que los dos individuos se giraron al ver a otro pequeño con dos helados en sus manos y a una señora atrás de ellos.

-¡Josh!- Celebró, corriendo hacia el chico pálido y peli negro al contemplar uno de sus postres favoritos, el helado de vainilla.

El mayor de cubrió más. Se sonrojó al notar aquel pálido niño que compartía uno de sus helados con su él del pasado.

Sus mejillas y su pelo ondulado lo hacía lucirse tan tierno.

- Oye, ¿Quién era ese niño grande con quien hablabas- Preguntó el niño pálido, lamiendo su cono de helado mientras el sol provocaba que éste se empezara a derretir, apurando las lamidas de ambos niños.

-Realmente no sé, creo que le llamé la atención porque estaba sólo- Río-Pero te tengo a ti Josh- Los dos niños sonrieron y saltaron de la felicidad, mientras Laura los miraba con asombro al ver a los chiquillos más bonitos y felices del mundo entero.

- Muy bien niños, hay que irnos a casa, se pueden comer los helados en el camino- Dijo la mujer, haciendo que estos le tomaran la mano para ir a sus hogares.

"Si ellos van caminando, ¿Mi casa no estará muy lejos, ¿No?"

Pensó el mayor, frunciendo el ceño cuando sintió su cabeza doler, ya que es hora de partir.

He's a wolf [Joshler/Tysh]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora